▶¿Qué es lo que queda después de que los que amas, tu propia familia, te lo arrebató todo?
Solo hay una respuesta: un profundo dolor, y el dolor solo puede ser purificado con más dolor.
Continuación de My Sweet Deer|| Fanfiction Robb Stark|| GOT.
Di...
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-Eres hermosa. -susurró mientras le acariciaba la blanca piel sobre la delgada tela del camisón de dormir. El pelinegro se posó encima de ella y le arrancó la tela.
La joven yacía acostada mirando hacia ningún lugar en particular, ausente, perdida dentro de sí misma. Él la poseía una última vez antes de que Jaime Lannister viniera por ella. La tomó del cabello y la puso contra la cama, Lyanna no luchó.
Finalmente Ramsey gruñó de placer y la dejo libre, se recosto a un lado de ella mirando hacia el techo mientras hablaba.
-Mañana vendrá el Matarreyes, no te toque durante todas estas lunas para que te recuperarás, tuve que encontrar un tipo de paciencia que no sabía que poseía. -le aparto los rubios rizos de la cara, con una delicadeza que a él mismo le resultaba ajena -. Ví a nuestro hijo, no parecía algo proveniente de un hombre y una mujer, solo era sangre coagulada, algo de carne-comentó fugaz, divagando -, si hubiera sido varón le hubiera enseñado todo lo que debería aprender, todo lo que mi padre no me enseñó y que yo tuve que obtener con mis propios medios solo por ser un bastardo, ¿Sabes? Tuve un hermano, él era el heredero de Dreadfort y lo envenene, era toda gentileza, un idiota. Le hice un favor a mi padre, yo era su única opción.
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-Si le dices algo al Matarreyes, mataré a tu amado lobo, ¿entendido? -amenazo Ramsey Bolton tomando a Lyanna por el brazo y susurrandole al oído.
Lyanna estaba inmóvil, veía a su tío Jaime venir hacia ella, enfundado en una armadura Lannister y montando un corcel blanco, su melena rubia corta lo hacía ver distinto a como lo recordaba.
En cuanto estuvo a su lado, en el patio de Winterfell, el León Lannister corrió a abrazar a su sobrina.
-Anna... - le susurró Jaime. La sintió delgada bajo su tacto, casi en los huesos, pronto ella le correspondió el abrazo-. ¿Te encuentras bien?
-Si, tío, estoy bien, Lord Bolton me trató como a una invitada, fue un generoso anfitrión. -respondió Lyanna sin duda en la voz, dibujando una pequeña sonrisa, mientras abrazaba a su tío.
Claro que hubo un tiempo que extraño a su tío Jaime y extrañó a su familia, pero el solo recordar una y otra vez las palabras de Ramsey Bolton "Los Lannister mandan saludos." Le había quitado todo sentimiento de amor y lo había sustituido con odio puro.
Los Lannister les habían arrebatado a sus hijos. Llevaba semanas intentando asimilarlo, desde que había visto a sus pequeños en ese estado, algo dentro de ella se quebró, estaba segura de que ya no sentía nada, todo el amor y dolor que pudo llegar a sentir se fue con sus hijos, dejando un profundo odio.
Sabía que Carmine liberaría a Robb y que si ella era lo suficientemente cautelosa podía llevarlo con ella disfrazado de soldado Lannister.
Tenía que esperar, todo era cuestión de esperar. Esta vez sería diferente, ella no sería la usada, la pieza del tablero que se movía a conveniencia de otros, ella movería las piezas y Robb Stark tenía tanto derecho como ella a vengarse de todos los que le habían arrebatado su vida, juntos saldrían de ahí y recuperarían Winterfell.
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