Sueño.

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Alguna vez soñó con este momento. Abrir sus ojos y toparse con el azul cielo de Castiel. Perfectamente como lo había imaginado sucedió. Sonrió al ángel y este le devolvió el gesto. Se acurrucó un rato más bajo las sabanas, abrazándolo.

Finalmente el ángel logró escapar de sus brazos, dejándolo solo. Pero ya no quiso dormir así, entonces se levantó. Usando su bata favorita, camino por los pasillos. Cuando paso por el cuarto de Jack, su ángel le quitaba el cabello de la frente, susurrándole algo para que despertara.

Cas le sonrió al descubrir a Dean en la puerta, y este siguió su camino.

El desayuno fue normal y el almuerzo también. Sin embargo, Sam había notado las nuevas sonrisas, sonrojos y el ambiente romántico. No iba a mentir y decir que jamás notó lo que pasaba entre su hermano y el ángel, pero no era quien para intervenir en algo que ambos debían solucionar. Luego de ver tan roto a Dean, se dio cuenta de que esto realmente era algo serio y no un simple gustar. No era algo pasajero ni olvidable. Además de eso, ya sea por la distracción que significaba Cas o por su apreció hacia el nephilim, Dean no había vuelto a hablar del tema o referirse de mala manera al chico.

Pero eso no duró demasiado.

- Jack no va. – Sentenció Dean.

- ¿Por qué no? Ha venido a todos nuestros casos. – Defendió el menor de los hermanos.

- Porque no quiero que venga, ahora Cas esta para cuidarlo.

- ¿Y qué? Vamos a dejarlos encerrados a los dos. Jack está en peligro y si estamos todos juntos es mejor.

- ¡No quiero tener que cargar con el niño a todas partes y punto! No arruines mi buen humor, Sammy.

Cas y Jack estaban allí, escuchándolo todo.

- Si quiere ir, va a ir. – Acabó la discusión Castiel. - Vamos, Jack.

El ángel tomó de la mano al nephilim con su mochila lista y subieron las escaleras. No habían pasado ni 24hs y la pareja ya tenía una pelea.

Durante el caso, Cas no le dirigió la palabra al cazador. Se la pasaba consintiendo al nephilim y olvidando por completo que Dean existía, hasta que este se decidió a enfrentarlo a solas.

- Cas. Por favor. – Suplicó con el tono más suave que su voz podía usar. – Apenas comenzamos algo serio y estamos peleando al segundo.

- Esto comenzó hace mucho y no voy a pasarte tu comportamiento solo porque ahora tenemos un título y los sentimientos aceptados. – Suspiro, dejando de sobre el Impala los batidos que habían pedido. – No me gusta como tratas a Jack, ¿Pensaste que no me di cuenta como lo desprecias todo el tiempo? Apenas llevó un día con ustedes, ¿Cómo lo tratabas antes de que yo volviera, Dean?

Temprano en la mañana creía estar viviendo un sueño hecho realidad, como esos que imaginan las adolescentes de quince años. Tarde en la noche, se daba cuenta de que todo eso se había caído, destrozado y no sabía por dónde comenzar a repararlo. Dean había recuperado a Castiel, pero no lo tendría a su lado tan fácilmente. 

Want you back.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora