Delicate ✧ KookV

Capítulo 6

Su despertador sonó exactamente a las 6 de la mañana, 30 minutos antes de lo que solía despertar habitualmente, y solo por no haber terminado de transcribir el informe de Taehyung. Ahora mismo se arrepentía muchísimo, anhelaba unos minutos más de sueño.

Con los ojos entrecerrados por la luz de su computadora, por fin pudo terminar la última página. Sonrió y corrió al salón para imprimir las hojas no pudiendo creer que su plan haya funcionado a la perfección.

"¿Qué haces despierto?" Jungkook pegó un salto al mismo tiempo que se daba la vuelta. Entre la oscuridad notó a su hermano comiéndose una tostada. "Porque vamos, tú siempre te levantas tarde" Alzó una ceja Namjoon.

Jungkook se sintió ofendido.

"Estoy siendo responsable por primera vez en mi vida" Respondió escuchando el sonido de la impresora, tomó las hojas rápidamente y comienzo a acercarse a las escaleras, sin embargo, tropezó con una de las plantas de su madre provocando que cayera.

Namjoon soltó una risa y fue donde el menor mirando todas las hojas desparramadas en el suelo.

"¿Tu responsabilidad tiene que ver con un tal Kim Taehyung?"

Jungkook solo bufó ignorando la pregunta de Namjoon. Se había sentido algo avergonzado realmente, pero eso era algo que no tenía que saber.

"No te metas, hyung"

Después de que lo eligieran como presidente del centro estudiantil su tiempo libre se había reducido a cero, corría de un lado para otro al igual que Suho el año pasado. Era algo molesto. Aunque si tenía a Jungkook a su lado él estaría más tranquilo, era algo que apreciaba mucho de su mejor amigo.

Miró la hora en el reloj del pasillo y supo que Taehyung ya debía estar esperándolo junto al director en su oficina. Esa sería su rutina de todos los días desde ahora, caminar apurado de aquí para allá al mismo tiempo que se preocupaba de aquel chico. En el fondo sabía que Jungkook podía ayudarlo pero aquello le haría sentir mal consigo mismo, porque a él lo eligieron, a él le dieron la responsabilidad y Seokjin era conocido por ello.

La mirada penetrante de la madre del castaño lo estaba matando, se sintió incómodo con su actitud aunque ya tenía una idea del por qué estaba así.

"Buenos días" Habló con tono firme. "Vengo por Taehyung" El mencionado estaba escondido detrás de la espalda de la mujer mirándolo con ojos curiosos.

Taehyung se preguntaba en donde estaba el otro chico. ¿Acaso se molestó por no haberle dicho su nombre? El corazón del castaño se apretó del arrepentimiento y se sintió culpable por no responderle en el momento.

Sus orbes cafés estaban brillantes por las lágrimas y el primer sollozo no tardó en llegar. Siempre era lo mismo, nunca nadie se podía quedar a su lado por mucho tiempo, no es tonto, sabía que en el fondo ese tal Seokjin tampoco quería hacer esto.