7

1.9K 222 49
                                    



Jeonghan pestañeo con pereza, despertando por la luz que alcanzaba a entrar entre las cortinas de la ventana. Vagamente miro la habitación para luego centrarse en la persona frente a él. Sonrió con ternura por lo adorable que lucía, a pesar de que lo abrazaba con fuerza por la cintura.


Anoche... soltó un suspiro soñador de solo recordar como a cada embestida perdía el aire entre jadeos y gemidos. Como ese adorable humano a pesar de darle de los sexos más rudos que ha tenido en los últimos años, seguía siendo dulce a su manera al preocuparse de estimular de forma maravillosa cada punto sensible de su cuerpo.


Fue jodido por esa habilidosa lengua no solo en la boca, sino también en zonas que hace tiempo un amante suyo no se dedicaba a probar. Odiaba que en ese año Joshua se haya metido con otras personas, pero definitivamente aprendió mucho, porque le dejo más que satisfecho a pesar de que su resistencia era la de un simple mortal.


No dejaba que cualquiera se la metiera, aunque hubo casos en los que se arrepintió al no cumplir sus expectativas, pero a Joshua se lo dejaría cada vez que quisiera.


Se moría de ternura por como ese humano se aferraba cada vez más al moverse solo un poco. Anoche cuando al fin acabaron, se quedaron acostados abrazados para dormir, en su caso porque extrañaba esa calidez de tener un cuerpo contra el suyo luego de una maravillosa sesión de sexo. No era difícil saber que el humano lo abrazaba para que no ocurriera lo de la otra vez de que se fue sin despedirse.


Igual no tenía intenciones de ello.


Por lo que con calma se dedicó a admirar a ese hermoso humano que tenía una cara divertida al dormir. Lucia enojado, pero de repente sonreía como un gatito.


Con su índice delineo sus facciones, encontrando fascinante cada detalle, desde imperceptibles lunares hasta como sus pestañas les daban un toque hermoso a sus ojos. No aguanto más y se acercó a besar todo lo que veía y encontraba perfecto.


Joshua empezó a pestañear rápidamente, riendo por las cosquillas que le provocaba ser besado por todo su rostro. Los labios de ese demonio eran tan suaves y cálidos que le encantaba sentirlos contra su piel.


- Déjame dormir, siento que corrí una maratón con todo lo que hicimos – Se quejó, dejando un poco hacia afuera su labio inferior como un puchero. Al fin dejo de abrazarlo para darse vuelta, dándole la espalda al demonio. Jeonghan se apoyó en su codo para levantarse un poco, dando un vistazo a la habitación.


En cualquier otra situación, este sería el momento ideal para irse.


Sus ojos se detuvieron en una repisa de la habitación.


Había un peluche de jirafa junto a figuras de Star Wars. Sintió sus ojos humedecerse al notar cuan bien cuidado se veía. Se voltio para ver la espalda desnuda del menor, por la que con sumo cariño deslizo su mano, acariciándola por cada lunar que llegaba a tocar. Joshua se estremeció, pero no dijo ni hizo nada. Dejo un beso en su hombro para finalmente levantarse de la cama.


Estaba en busca de sus ropas cuando Joshua se sentó en la cama, luciendo nervioso.


¿Puedes jugar conmigo? (JIHAN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora