Ocho.

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—Dios, deja de comportarte como un niño pequeño y abre la puerta.—Yoongi aún seguía ahí, dando leves golpes para que abriera la puerta.

—No. Lárgate, si me vas a dar sermones sobre TaeHyung entonces solo lárgate de una vez.—Humillado. Así es como se sentía, todo el mundo se estaba metiendo en su vida y eso le estaba extresando, primero Jimin, después TaeHyung, su madre y ahora el idiota de Yoongi.

—No estoy para darte sermones. Solo deja de ser un niño pequeño, TaeHyung ahora es felíz y tiene novio, no arruines esto también.—Los pasos de Yoongi bajando las escaleras se hicieron presentes, y seguidamente su madre despidiéndose junto al sonido de la puerta principal.

¿No arruines esto también?¿Acaso le estaba acusando de haber arruinado su relación?No le importaba una mierda TaeHyung y menos su vida personal,el ya lo había superado.

Pero de una tonta manera seguía atado a el, dependía de el solo para sentir placer,incluso pensándolo sonaba humillante.

—Que os jodan.— Se iría, no podía permanecer aquí.  Saldría, no a follar lógicamente porque ya sabía los resultados. Pero saldría,a cualquier lugar que hiciera a su mente pensar en otra cosa que valiese la pena.

Tomó su abrigo y lo colocó sobre sus hombros antes de abrir la puerta, bajar las escaleras de su asquerosa casa y salir por la puerta principal, sin hacer caso a los gritos de queja de su madre.

Las calles estaban todas adornadas, ni siquiera sabía que había celebración aunque no tenía ni idea de cuál. Sin saber hacia dónde dirigirse siguió a la gran multitud de gente, quién parecía dirigirse hacía las zonas más decoradas, hasta llegar a al parque de atracciones.

Dios, es cierto. ¿Como lo había olvidado?Estas semanas estaba abierto, aunque lamentablemente ahora tendría que aguantar a parejas tomadas de las manos, o parejas comiéndose la boca, cosa que no despejaba su mente pero era muchísimo mejor que estar en su caso aguantando a su madre o a Yoongi.

No tenía ni idea de que hacer, no había traído nada de dinero tampoco. Quizás, quizás a alguien se le había caido algo de dinero de la cartera en los baños, era algo que pasaba muchas veces en un lugar tan grande y lleno de gente, sus amigos y él solían hacer eso muchas veces.

Para su fortuna los baños no estaban demasiado llenos pero oh. Desagradable sorpresa.

Pues encontrase a TaeHyung y a un chico pelirrojo dentro de los baños no estaba en su plan.

Salió a toda prisa del baño, apoyando su espalda contra la puerta de los baños. ¿Que espejo había roto para está mala suerte?

No podía identificar como se sentía. La forma en la que ese chico tomaba a TaeHyung por la cintura, dando suaves caricias, y la forma en la que TaeHyung tenía las manos en su cuello.

No los había visto besándose pero eso no quitaba la desagradable sensación.

Asco. Esa era una de las muchas cosas que estaba sintiendo, pero había algo más. Algo que no sabía como identificar. Su pecho quemaba de una forma dolorosa y sentía un nudo en su garganta.

¿Por qué tenía que ser tan descarado?

Se sentía celoso de alguna forma,pero no porqué estuviese enamorado de el,sólo...se sentía celoso de que alguien en esto momentos pudiera tomarlo,y el solo estaba atada a hacerse pajas pensando en el.

Se movió inmediatamente de la puerta al escuchar que alguien intentaba abrir¿Y si eran ellos?Se escondió tras el lateral de los baños. Efectivamente eran ellos.

El ardor volvió a su pecho y de nuevo tenía un fuerte y pesado nudo en la garganta, ya lo había decidido, quizás mucho tiempo atrás, solo le faltaba este empujón. Volvería con TaeHyung. No sabía como, ni por cuanto ni de que forma, pero tenía seguro que de forma romántica no.

TaeHyung era un chico sensible,lo comprabas con mínimas cosas y pequeños detalles,podías enamorarlo con promesas rotas,y eso era lo que el iba ha hacer. No le importaba si alguien salía dañado de toda esta mierda en la que se estaba metiendo,mientras no fuera él el que salía dañado,todo estaba bién.

Se fijó en como TaeHyung le decía algo al otro chico, señalando hacía el puesto de algodones de azúcar. Para su fortuna el chico pelirrojo se quedó ahí, mientras que TaeHyung fue solo al puesto.

Mierda, tenía que hacer algo. Esta era su oportunidad.

Se acercó al puesto donde estaba TaeHyung no muy seguro de sí mismo, le sudaban las manos y rezaba para que el rubio notara que estaba ahí.

Y así fue.

Pudo ver a el rubio mirandolo de reojo.

—JungKook,deja de-

—Es YeonTan,está enfermo y tu eres el que tiene los papeles de su veterinario,pásate mañana a buscarlo.—Y se largó sin esperar respuesta.

Vale, esa excusa era genial, sí, había jugado con la salud de su perro pero tampoco era nada grave. Cuando se conocieron YeonTan empezó a ser prácticamente de los dos y TaeHyung fue bastante comprensivo dejándole a JungKook el perro, pues su apartamento no era adecuado para criar un perro.

Había logrado que TaeHyung viniera a su casa mañana¿Pero como hacía para follars- estar con el? Dios,ni siquiera habia pensando en eso,pero estaba seguro de que algo se le ocurriría.

Pudo ver  a TaeHyung todavía en el puesto, este tenía un expresión molesta y frustrada y JungKook lo entendía. No debe de ser cómodo que tu ex te encuentre en un parque de atracciones con tu pareja y quiere que vayas a su casa mañana.

El rubio caminó de nueve hacía su acompañante, el chico pelirrojo, tomando su mano. Esté parecía preguntarle algo, pero TaeHyung solo respondía agitando su mano. ¿Estaban hablando sobre él?
D e j a   d e   s e r    e g o c é n t r i c o

Mañana sería su día de suerte, quizás no follaba ese mismo día pero así podría saber ai sería capaz de " reconquistar a TaeHyung " entre comillas porque bueno, a el no le interesaba en lo absoluto estar de manera romántica con TaeHyung.

Taesexual. Kookv Where stories live. Discover now