LISTA DE ALFAS PERFECTOS PARA MÍ; YoonMin/윤민

5. Celo, escremento y pastelillos.

Si antes ya estaba sudando por la carrera que he tenido que hacer para llegar a la universidad, entonces ahora mismo debo parecer un perro mojado por la lluvia, porque soy un lobo ¿Entienden?, -Lo sé, mal chiste- pero no puedo evitar hacerlo porque además de ser un acto natural e incontrolable para cualquier persona, el chico que tengo al frente me hace sudar frío por el aura un tanto tenebrosa que se trae y a eso se le puede agregar el que al ser Omega el acto de sumisión ante un alfa de linaje puro es casi obligatorio y lo odio.

— ¿No dirás nada?. —Espeta con altísimo— Namjoon omitió decirme que le enseñaría a un Omega mudó.

¡Diablos Park reacciona!

— S-se me hizo tarde, no es para tanto. —titubeo.

— Quizás para tí, pero para mí es tiempo perdido.

— Lamento llegar tarde ¿Sí?. Ahora ¿Podríamos empezar?. —Resoplo mientras jugueteo con mis dedos. ¡Me rehusó a verlo a los ojos!.

— Ya llegamos a la hora límite en la que podíamos estar aquí, así que no. —Su voz suena grave y me preguntó si siempre es de esa manera tan... maldito— Lo mejor es que te vayas.

Gruño con un deje de frustración, tomo la mochila que he lanzado y salgo sin decir nada. Parece que dos alfas entrarán a mis listas el día de hoy, dejo a sus opiniones a cual creen que serán destinados.

— ¿Bien?. ¡¿Sólo bien?!. —Cierro mis ojos ante el grito de TaeHyung, bufó un tanto cansado y dejo mi estómago pegado a la superficie de mi cama. Necesito una buena siesta.

— ¿Que quieren que les diga?. Sólo hablamos de nuestras carreras y ya.

La cara de decepción de mis amigos al descubrir que Minhyuk no me llevo hasta el dormitorio me hace pensar que he hecho algo mal, aunque luego recuerdo que fui yo quien salió como un desquiciado del lugar -claro que esa parte no se las he dicho- sólo para ser recibido por un alfa malhumorado que tenía razón para estarlo.

Luego de que entrara al dormitorio la noche anterior y evité que Jin y Tae se despertarán, me puse a pensar un poco de lo que quizás hice bien o mal en la cita con ese alfa, pero al no dar con nada concreto lo único que me resto hacer, -al menos hasta quedarme dormido- fue pensar en que quizás nunca podré llegar a tocar un instrumento. ¡Por la gran luna!, Soy un idiota, es obvio que el alfa iba a estar enfadado, yo estaría igual si alguien llegará tarde a una reunión conmigo.

[···]

En lo que va de la semana he estado un tanto ocupado con las citas que he quedado con Minhyuk,
–Milagrosamente me llamo para tener otras– y también en mi horario siempre dejo una hora en particular sólo para mí: Las siete, a esa hora dejo de lado al Park JiMin altivo y me permito ser sumiso sólo para mí mismo. Admito que he estado yendo con la esperanza de encontrar a Min YoonGi ahí y así de paso disculparme, pero nunca hay rastro de él, así que sólo me queda tocar las teclas de ese lindo piano a la forma que me salga.

Tengo un secreto y es que cuando era pequeño me escabullia de vez en cuando de mi clase de danza para ir a las clases de piano que quedaban en el salón de al lado en aquella academia. Recuerdo el día que un niño me sorprendió tocando un piano de la peor manera, ese día se hizo algo así como mi confidente y aunque no me enseñó gran cosa, gracias a él se tocar algunas partituras para principiantes.

Estos días he estado pensando un poco sobre el instrumento que quisiera aprender a tocar, y fue así que caí en cuenta de que el piano siempre ha sido un instrumento que llama demasiado mi atención.

Así que él será mi destinado. Bueno, al menos hasta que consiga otro tutor.

—Gracias por traerme.