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Era el cumpleaños de Gia.

Alai había despertado temprano aquel día. Se sentía emocionada, además necesitaba buscar algo que regalarle a la chica por su cumpleaños. Si bien la fiesta sorpresa o no tan sorpresa estaba ya organizada quería hacer algo especial por Gia así que se levantó temprano y fue hacia el comedor necesitaba encontrar un pastel o al menos un pedazo del mismo y claro una vela.

...

Gia había despertado temprano, no había conseguido dormir más además era su cumpleaños y sabía que su madre sería la primera en llamar.

― ¿Cómo estás mi amor? Feliz cumpleaños Sophie ha estado despierta hasta las diez, te imaginaras todo un record.

― Feliz cumpleaños Gi, te extraño mucho, pero mamá dice que regresaras pronto.

― La extraño mas ― sonrió ― gracias por esto, pronto estaré en casa y festejaremos comiendo mucha pizza

― Si, pizza mamá escuchaste Gia dijo que comeremos pizza.

― Lo que tú quieras cariño, espero que tengas un hermoso día, pronto estarás aquí y festejaremos.

Las extrañaba tanto, aun mas en aquel día, hablaron por algunos minutos y se despidieron. Parte de ella quería terminar lo más rápido posible con las grabaciones y volver y otra solo quería que durara para siempre, pero claro eso no era posible y en dos semanas deberían volver a la realidad.

...

Alai miró su celular y notó que casi eran las ocho el despertador de Gia sonaría en poco así que se apresuró tomó el ascensor y volvió a su habitación al abrir la puerta notó que Gia ya había despertado y miraba su celular.

― Feliz cumpleaños a ti ― empezó a cantar Alai notando de inmediato una sonrisa en el rostro de Gia ― Feliz cumpleaños querida Gia feliz cuarto de siglo a ti.

― Tu si sabes cómo animarme ― veía el pequeño pedazo de pastel en forma circular que Alai traía en un plato así mismo la única vela sobre él.

― Bueno todo por animarte ― se acercó a la cama de la chica ― debes pedir un deseo anda.

― Ahora mismo tengo todo lo que deseo pequeña, gracias por esto.

― Vamos de seguro hay algo más que quieres anda cierra los ojos y pide un deseo.

Gia le hizo caso y cerró sus ojos y lo único que pudo visualizar fue la sonrisa de Alai. Si ella era el único deseo que venía a su mente así que sonrió ampliamente y abrió sus ojos, lentamente se acercó y sopló.

― Si, lo hiciste ― sonreía ― no preguntaré que pediste, pero de verdad espero que se haga realidad.

― También lo espero gracias esto es muy lindo en serio.

― De nada, ya sabes tendrás tu fiesta no tan sorpresa, pero quería darte algo de mi parte ― comentaba acercándose a hacia su bolso de dónde sacó una pequeña caja ― lo compre hace unos días en el pueblito no lejos de acá es una cadena ― comentaba mostrándole a la chica ― tiene una figura de una flor y creo que es la indicada te ayudará a recordar el tiempo que vivimos aquí y bueno todo lo que ha significado esta película... Espero que te guste.

Gia estaba sin palabras solo podía observar aquella simple cadena con la figura de una flor era sencilla pero hermosa absolutamente perfecta.

― Oh Dios es hermosa no sé qué decir me ha encantado Alai

― Menos mal no había devoluciones ― sonreía ― ¿Te ayudo a ponértela?

― Si por favor

Jardín de MargaritasWhere stories live. Discover now