Tus acciones dependen solo de ti, la vida te devuelve aquello que siembras, pero también aquello que recoges.
El amor, la traición, el miedo, y la música se combinan en esta historia de relatos cortos.
Inspirada en la serie "Bia"
Ganadora a "Mejor...
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Los recuerdos invadían sus pensamientos, aquellos que quería borrar de su mente para siempre. ¿Por qué la culpaban a ella? ¿Es que acaso los Gutiérrez y los Urquiza vivirían eternamente peleados? Helena quería responder todas aquellas preguntas pero no tenía ninguna respuesta, tampoco podía acercarse a ningún familiar suyo, ni a Víctor, eso solo empeoraría la situación. Mientras Helena bajaba las escaleras de la residencia, el teléfono sonó. La mayor de las Urquiza se acercó a la mesa donde se encontraba el aparato y respondió con una voz dulce.
- Residencia Kunst, ¿En qué podemos ayudarle? - dijo Helena con su acento castellano-portugués tan pronunciado, a pesar de llevar en Argentina muchos años.
- Hola ¿Está Thiago? - preguntó la voz de un joven.
- Ahora mismo no está, si quieres después le digo que llamaste ¿De parte de quién? - A Helena esa voz le sonaba muy familiar.
- Víctor Gutiérrez, soy un amigo suyo. ¿Perdóname, nos conocemos? Tú voz me resulta...
- Eh... no. Lo dudo mucho, llegué recién a la Argentina. Después le digo que llamaste. Adiós
- Adiós, gracias
A Helena le iba el corazón a mil, después de diez años había vuelto a escuchar la voz de su gran amor. Víctor, su amigo, confidente y aliado, había estado a punto de descubrir que aquella mujer que le había atendido, era nada más y nada menos, que su Helena. Porque si algo tenía claro Helena era que aunque hubieran pasado muchos años, le seguía amando como la primera vez que se vieron, por eso el corazón le iba a mil cada vez que escuchaba su nombre.
Marzo de 2007. Casa de los Urquiza.
Helena no estaba muy segura de ponerse aquella falda, le gustaba combinar colores y estampados distintos, pero esa vez no se sentía cómoda con el outfit escogido. Su madre Alice no entendía porque Helena estaba transformando la habitación en una completa leonera.
- ¿Necesitas ayuda?
- No mamá, tranquila. Estoy buscando un atuendo adecuado para la ocasión - dijo Helena, mientras seguía buscando en su armario una prenda con la que sentirse cómoda.
- ¿Para que ocasión?
- Hoy Lucas me va a presentar a un amigo suyo, trabaja en una discográfica, y si todo sale bien podremos grabar con ellos un disco.
- ¡Pero qué buena noticia philia! - dijo entusiasmada Alice, quien conocía el talento de su hija para la música, especialmente para el canto.
- Si, estoy muy emocionada - dijo Helena sonriente.
Era una oportunidad soñada y no se la podía perder por nada del mundo. Tras una gran batalla contra su armario, la joven se despidió de sus padres y de Bia, y fue dirección a la discográfica donde Lucas la esperaba. Mientras caminaba por las calles de la ciudad porteña, una bicicleta se cruzó con ella y ambos cayeron al suelo.
