D de Destino

El poder de un Shichibukai.

Luffy se quedó viendo un momento hacia el enorme galeón destrozado, después de un par de minutos escucharon los gritos de los piratas que se habían recuperado después de haberse alimentado.

– Quiero que presten mucha atención a lo que está por suceder – comentó el azabache sonriendo.

Su tripulación lo regresó a ver algo confundidos, pero por lo demás le hicieron caso, mientras los cocineros lo veían como se vería a un idiota. Patty estaba por hablar, burlándose del pirata cuando para asombró de todos se escuchó un estruendo junto con los gritos de los piratas.

Después de un segundo olas enormes comenzaron a mecer el Baratie y pudieron ver como el galeón se inclinaba hacía dos lados distintos – fue partido por la mitad – dijo Sanji con la boca abierta dejando que su cigarrillo cayera al suelo.

Luffy asintió mientras el resto de los presentes solo podía maravillarse y aterrarse ante lo que estaban viendo frente a ellos – leven el ancla – ordenó rápidamente Zeff – o el barco se hundirá.

Los cocineros asintieron corriendo intentando no caerse para poder levantar el ancla, preguntándose todo el tiempo quién demonios había cortado ese galeón inmenso.

– Zoro esto es lo que tienes que superar – dijo Luffy mirando a su segundo al mando – este es el poder del Grand Line.

Usopp abrazado a Zoro para salvar su vida miró a Luffy con la cara tan pálida que incluso podían ver a través de él – ¿estás diciéndome que alguien o algo en ese mar puede hacer este tipo de cosas? – preguntó al borde de un ataque cardíaco – ¿y quieres ir allí?

Se rió ligeramente mientras asentía sin importarle las miradas que estaba recibiendo de los cocineros y Usopp – ¿cómo... cómo puede ser esto posible? – preguntó Nami con los ojos casi callándose de sus cuencas, había visto a los Gyojin hundir barcos, aunque mucho más pequeños, pero esto estaba en otro nivel ¿qué clase de monstruos vivían en el Grand Line?

Salieron hacía uno de los pasillos exteriores del Baratie para terminar de ver como el galeón se hundía cuando notaron algo entre la neblina causada por las enormes olas, un pequeño y extraño bote con algunas velas con fuego verde y un hombre sentado tranquilamente en un único asiento.

Zeff abrió los ojos tanto de miedo como de asombro – ese... hombre – susurró, Luffy sonreía mientras los demás veían el pequeño barco acercarse.

– El hombre con los ojos de halcón – murmuró Johnny regresando a ver a Zoro.

El peliverde apretaba el brandal con fuerza haciendo que la madera se partiera, comenzó a sudar ligeramente y sus ojos parecían querer enfocarlo todo y al mismo tiempo alejarse aterrados de la pura fuerza que sabía tenía este hombre.

Se irguió mientras con su mano derecha tomaba sus espadas – yo...

Fue detenido por Luffy colocando una mano en su hombro – no – dijo con fuerza, Zoro lo regresó a ver confundido, molestó – respira primero... siente a lo que te estas enfrentando.

Zoro suspiró mientras asentía y cerró los ojos, al principio le pareció que no podría concentrarse bien, había mucho ruido y la necesidad de luchar y probarse contra ojos de halcón era abrumadora, pero casi un minuto después comenzó a sentirse más tranquilo y sereno, comenzó a pensar mejor lo que estaba haciendo.

Frunció el ceño y comenzó a sudar nuevamente pero ahora por un motivo muy diferente.

No podía sentirlo en verdad, no podía verlo o como quiera que quisiera llamarlo, pero el poder emanado por ojos de halcón parecía oprimir a todos haciendo casi imposible el no poder notar la diferencia entre unos y otros.