PALOMITO [LARRY STYLINSON]

Capítulo 10

Siendo consciente de cada una de sus extremidades congeladas, Harry tragó la saliva amarga en su cavidad bucal mientras sus ojos perdidos de cualquier tonalidad verde se enfocaban sobre el niño que arrebataba la única luz en su interior. Sus orbes se dedicaron a observar detalladamente cada rasgo de ese rostro, cada emoción y palabra no dicha. Estaba mintiendo, su palomito no estaba siendo sincero con él, podía descifrarlo, había algo detrás de toda esa mierda que le había dicho.

Gruñendo frustrado, apretó con violencia sus dientes contra la carne agrietada de sus labios.

— Estas no son tus palabras. —Soltó con voz seca tomando el rostro de su niño, necesitaba que lo mirara, sus ojos azules cielos no podían mentirle.

— Harry... —Louis intentó bajar la cabeza y evitar sus ojos, pero no se lo permitió.

— No, Louis, dime qué está pasando, sé que tú no quieres hacer esto, por favor habla conmigo.

Los labios rasgados de Louis temblaron, nuevas lágrimas comenzaban a caer por su pálido rostro ¡Maldita sea! No podía verlo así. Harry estaba perdiendo la puta cabeza.

— Harry... —Louis consiguió articular nuevamente mientras sus ojos hinchados y rojizos se abrían exponiendo su tristeza y temor. — Harry, yo... no te he dicho toda la verdad.

— Lo sé. —Suspiró pesadamente quitándole las lágrimas que caían por su rostro. —Confía en mí palomito, estoy aquí para ti.

Los labios de Louis se apretaron con fuerzas, sus manos temblaban sobre sus muslos. Harry las tomó enredando sus dedos.

— Hey, tranquilo, habla conmigo.

— No... no puedo, no puedo hacer esto.

Harry aspiró con dificultad.

— Si, si puedes, vamos confía en mí.

Louis apretó su mano, su cuerpo batallaba por dentro entre lo correcto e incorrecto. Harry suplicó porque no se apartara. No podía perderlo.

— Mi familia es... es particular, Harry. —Soltó su palomito de repente. —Por favor, no me preguntes qué hacen exactamente, pero tienen poder.

Harry parpadeó rápidamente mientras tragaba con dificultad, poder se asemejaba a dinero. No iba a hacerse el desentendido, sabía que Louis no llevaba una mala situación económica, pero ¿Cuánto rico era? ¡Maldición! no esperaba esto.

— Mi familia es bastante conservadora, los errores no se permiten con frecuencia. —Louis suspiró abatido con sus ojos enfocados sobre una mancha en su pantalón. — Mi padre siempre se ha encargado de que en la familia se haga lo correcto, lo que sucedió con mi hermano no lo esperábamos y nos destruyó enormemente como familia. —Harry le dio un apretón reconfortante a su mano. —Yo nunca he sido un chico problemático y a pesar de eso, durante los últimos años todos los ojos han estados puestos en mí, en que haga lo correcto. — Sus ojos azules volvieron a enredarse con los suyos. —Lo estaba haciéndenlo muy bien hasta que inesperadamente apareciste tú y se fue todo a la mierda...

El estómago de Harry dio una voltereta hacia atrás, una vez más era el maldito culpable de algo, no había podido hacer la diferencia ni con su palomito. Apretando las manos, bajo los ojos culpables.

— Te investigó Harry, mi padre sabe quién eres, sabe qué hacías y donde estuviste los dos últimos años.

Las manos de Harry temblaron de inmediato, sentía la agitación en su interior y los nudos nauseabundos comenzaban a inundar estómago de manera desagradable. Ahora comprendía su actitud, ahora entendía por qué se rehusaba a seguir viéndolo, estaba haciendo lo que su padre quería, estaba intentando ser su maldito hijo perfecto.