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Erick

Despertar temprano siempre ha sido un problema para mi, soy una persona perezosa, en ocasiones.

Pero esta vez no es pereza.

Estar con Joel es increíble.

Siento su mano recorrer mi espalda y sonrío ante el atento tacto.

Es una sensación increíble, tener al hombre más deseado del mundo es increíble.

Joel es increíble.

—¿Ya despertaste? —abro mis ojos y lo miro, aún con el pelo alborotado es muy guapo.

—Buenos días —unos nuestros labios formando un beso superficial.

—Muy buenos bebé —me sonríe coqueto y vuelve a unir nuestros labios.

Sonara cursi, pero no quiero separarme de él.

Hace unos días quería irme de aquí porque sabía que estaba mal, Joel es mayor que yo y se que esta mal eso.

Pero simplemente no puedo evitarlo, estar con el es lo mejor que me pudo haber pasado.

Siento su mano ir a mi trasero y lo aprieta, entiendo esa referencia.

—¿Bebé...? —me mira con súplica y entiendo que quiere meter su gran polla.

Porque si, es una gran polla.

—Es temprano y tenemos que ir a desayunar —le sonrío con diversión al ver su puchero, pero es verdad, nunca en mi vida había tenido un desgaste físico tan largo, lo hicimos noche y día.

—Será rapido —hace una mirada tierna pero aún así no accedo.

—No, Joel, levántate, bañate, cambiate y baja a desayunar —en ocasiones soy muy mando pero me importa su salud y él también a tenido si desgaste físico.

—Uy, que mando, pero... —entre cierra los ojos y me mira, como si me analizara —. ¿Nos bañamos juntos? —su sonrisa es la más hermosa que he visto y no me cansaré de decirlo.

Se que bañarnos juntos sería follar, y esa idea me enloquece, nunca lo he echo, pero si he tenido esa idea.

—Ok —su sonrisa se expande más —. Pero no meterlas tu polla en mi lindo culo —su sonrisa se borra y yo suelto una risita.

Se levanta si decir nada y se que se molestó por no follar, en los últimos días lo he observado, y se que se molestó.

Me levanto cuando escucho la ducha encenderse y voy dispuesto a tomarla juntos.

—Ahora yo no quiero —habla antes de que pudiera decir algo y es tan divertido verlo en esta situación.

—¿Enserio? —hago un puchero aúnque se que no me mira.

—Sí —toma el jabón y comienza a pasarlo por su cuerpo.

—Ok —me mira —. Entonce la única solución es irme a duchar a mi cuarto y quedarme ahí —me doy la vuelta dispuesto a irme —. Y yo queriendome quedar aquí —sonrió divertido al ver que sale de la ducha y me toma del brazo.

—Oh, no, tú te queda conmigo —me jala a la ducha.

Es increíble ver como en solo una noche cree tener el poder sobre mi.

Y es cierto, me encanta que sea así de posecibo.

Me toma de la cintura y me pega a su cuerpo.

Toma el jabón y lo pasa por mi cuerpo cuidadosamente, como si fuera algo delicado.

Enjabona mi cabello con su champú y me encanta porque huele a él.

—No todo en la vida es sexo Erick —dice de repente y se a lo que se refiere.

—Perdón —me sonrojo porque sabe lo que estaba pensando.

—No tienes que pedir disculpas, también lo pensé, pero quiero ir lento —me volteo para mirar si hay diversión en su rostro, pero no, su rostro está serio.

—¿Hablas de ir lento cuando lo hicimos toda la noche? —suelta una carcajada y no puedo evitar reír también.

—Arruinas el momento Erick —sale de la ducha y toma mi mano para que lo siga.

Pasa una toalla por mi cuerpo para sacarme y la deja sobre mis hombros.

Hace lo mismo con su cuerpo.

Y no puedo evitar mirarlo, trabaja muy bien su cuerpo.

Trato || JoerickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora