5. Xuan (2ª parte).

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He Xuan era el único hijo de la familia He. Su familia se dedicaba al comercio, pero no era tan prominente como la familia Shi.

La madre de He Xuan administraba un pequeño mesón y su padre se dedicaba a comercializar objetos que traía del extranjero.

Cuando He Xuan nació, su padre se encontraba de viaje, su madre esperaba que naciera dos meses mas tarde pero el pequeño Xuan había decidido que nacería antes de lo esperado y nadie pudo detenerlo.

El maestro del santuario Zhāngnǎo lín tocó a la puerta tres días después.
Siendo amigo de la infancia de la madre de la señora He, sintió curiosidad por conocer al nuevo miembro de la familia.

Cuando leyó la carta astral del bebé sintió pena por la hija de su compañera de juegos y con gran pesar le dijo — Tu primogénito ha nacido bajo la luz de la estrella gemela. Es una estrella que ilumina con un gran resplandor y promete buena fortuna a quien nace bajo su luz pero... Tras la estrella brillante hay una segunda estrella, esa estrella es causante de que aquellos que nacen bajo su signo se inclinen al camino de lo demoníaco. A causa de esto es probable que tu pequeño hijo tuerza el sendero si no es guiado correctamente.

La madre primeriza miró asustada al maestro, — ¿Qué debo hacer para evitar eso?

—Yo seré su maestro, verás que tu hijo será un hombre de bien.

La madre de He Xuan le miró por largo tiempo, — Maestro Ming Yi, no podría causarle tal molestia.

El joven maestro se sonrió, — es un hecho que eso no me causará ninguna molestia, al contrario será para mí un gran honor ser el maestro de tu hijo.

Así fue como ese bebé prematuro se convirtió en discípulo del maestro del santuario Zhāngnǎo lín.

Cuando He Xuan fue lo suficientemente fuerte y despierto, fue mandado a aprender del maestro.
Subía todos los días hasta el santuario para repasar sus lecciones.

Cuando el joven Shi Qing Xuan se volvió un compañero de juegos, también lo acompañó al santuario.

Ambos se sentaban hombro con hombro, He Xuan leía en voz alta y Shi Qing Xuan escuchaba atentamente.

Los años no pasan en vano y aquellos niños pronto se convirtieron en jovencitos.

He Xuan miro a su hermana recién nacida. Que dormía en los brazos de su madre.

— ¿Que nombre te gustaría que llevara tu hermana?

— Saneri.

— ¡Saneri! — Exclamó la mujer, — ¿Y que significado tiene?

— Cura espiritual, — dijo el jovencito sin despegar la vista del cuerpecito regordete.

— ¡Es bueno! Pero yo creo que buscaremos uno más tradicional.

El chico asintió y sujeto la diminuta mano del bebé, — cualquier nombre será bueno si ella lo tiene.

*****

— ¿Que tienes ahí, — Preguntó Shi Qing Xuan al ver a su amigo entrar con un atado de seda entre las manos.

— Adivina, — dijo He Xuan por toda respuesta levantado entre sus manos el pequeño bulto.

— Xiōngdì dime, no quiero adivinar, — pidió Shi Qing Xuan saltando para intentar quitarle aquel objeto de entre las manos.
Y pese a que ambos chicos tenían la misma edad He Xuan le sacaba ya dos cabezas de diferencia.

Cuando los clientes del hostal los miraban creían firmemente que Xuan era el hermano mayor de Qing Xuan.

La comisura de los labios del jovencito se curvó. Aquello era suficiente para hacerle feliz. No pedía nada más, simplemente quería que la vida transcurriera de esa manera. Él y su pequeña amiga juntos, hablando, estudiando, jugando, haciendo todo juntos.  

La Verdadera Línea Del Destino. Où les histoires vivent. Découvrez maintenant