Líricos de un adolescente deprimido

I don't belong here

18.06.19. Melka

¿Algún día piensas hacer un jodido cambio en tu asquerosa y repugnante personalidad?

 ¿Sabes? 
También huiría lejos de tu penosa vida 
si no estuviera atado a ti. 

Es asqueroso mantenerme bajo tu maldita y sucia piel, 
realmente me avergüenza lo patético que eres.

Si te daño, es para que aprendas de una maldita vez. 

Pero, ¡Vamos! 
Ocúltalo. 

¿Qué necesidad tienes de demostrarle a todo el mundo como te maltrato? 
Oculta esos hematomas por debajo de tus rodillas, 
a nadie le importa.

Esos rasguños en el cuello y brazos, 
sé que los hiciste en un acto de desesperación 
por quitarme de dentro tuyo.

Pero no te será tan fácil.
Viviré aquí 
y haré tu vida tan miserable 
hasta escuchar que de rodillas 
me pidas a gritos que pare 
y sientas la necesidad de cortar tus putas venas 
hasta que te desangres en el piso del baño.

Me gusta torturarte porque comienzas a destruírte, 
es divertido ver como pierdes la cordura.

Eres mi muñeco preferido, 
marica sensible. 
Sabes que te lo mereces. 

Te mataría si pudiera, 
pero estás cubierto de miedos y, 
aunque lo intente, siempre huyes. 

No sirve, 
no te escondas; 
conozco cada movimiento tuyo 
y no te será fácil quitarme de encima.

Soy esa carga que estará rondando en tu cabeza siempre que estés mal, 
provocando tsunamis en un vaso de agua. 

Cobarde. 

Estás provocando cada vez más daño, 

eres un jodido tóxico que depende de los demás para mantenerse con vida, 
pero mientras tanto 
los envenenas de ramas a raíces 
transmitiendo toda tu puta negatividad. 

Y créeme que adoro hacerte llorar, 
es un buen comienzo 
ver cómo las lágrimas brotan,
recorren tus mejillas y chocan fuertemente contra el frío suelo.

Eres muy fácil de dominar.
Cúbrete, tarde o temprano lo lograré. 
Tú no perteneces aquí, 
y yo me encargaré de mostrarte la salida.