SÓLO ES MI JEFE

Cap 9 /~ Yo no te compré ~

Estaba viendo un programa de supervivencia o algo así, no sé cuál es su nombre simplemente lo puse porque Guzmán se sentó a ver televisión. Yo no quería verlo, al menos no en 10 años, me moría de vergüenza ¿Como reaccionarían al ver a su jefe en toalla?

Yo estoy normal, justo ayer vi algo parecido en Instagram. Nada que no haya visto.

— Exacto.

—¿ Qué? — miro a Guzmán y este está con el entrecejo hundido y el semblante dudoso.

—¿Eh?.

— Exacto ¿que?.

— Exacto nada—actúo normal y trato de no mirarlo.

¿Había hablado en voz alta? Ash, soy muy descuidada.

— ¿Está bien? — no se ve convencido de que todo en mi cabeza marche correctamente y no lo juzgo, yo también creo que me hace falta un tornillo.

— Si— alzo los hombros y miro fijamente la televisión.

—Si le pasa algo puede contármelo, no soy paciente ni mucho menos voy a rogar que lo haga, pero si algo le molesta puede decirlo.

Tamara amabilidad. ¿Acaso tiene otro contrato escondido?

— Le he dicho que no me pasa nada.

— Collen—su voz se escuchaba cansada, pero no le tomo importancia. Presiono los dientes y lentamente me giro para mirarlo— Hable ya.

¿Qué carajos quiere que diga? Que era de lo más detestable en el mundo? Que ya no soporto tener que mirarle la cara y recordar ese inútil contrato? ¿Quiere que admita que soy una estúpida por dejarme manipular por mi padre? Si eso era lo que quería oír no se lo iba a permitir.

— No tengo nada que decir.

El silencio nos envolvió instantáneamente, mi cabeza dolía y sentía que iba a explotar por la rabia contenida. Parpadeé hacia él por un segundo y un poco cansada deje caer mi cabeza hacia atrás.

Perfecto, simplemente perfecto.

Volví a posicionarme y lo vi soltar un gran respiro mientras venia camino hacia mí.  No dudaría de decirle una cuántas verdades si no fuese mi jefe, sin embargo lo era y aunque mi subconsciente me llamase cobarde no iba ha arriesgar el puesto para el que he luchado todo este tiempo.

— No soy idiota así que no quiera verme la cara. Venga suelte ya lo repugnante que es tenerme cerca, porque si usted no lo dice de todos modos su acciones hablan por si solas. — me sujeta de la barbilla sin hacer tanta presión en los dedos, sólo me toma para hacer que lo mire y aumentar su ego de antemano— No evite mi mirada. Ahora me tiene cerca, venga y dígalo frente a frente— me observa fijamente a los ojos y creo que luego cae en cuenta de sus acciones. Asume que no valgo la pena.

Me quiero ir ya.

Él se aleja lentamente y cuanto estoy segura de lo que quiero hacer me levanto y salgo lo más rápido posible de casa para tomar un taxi e irme.

***

Llevo caminando por la playa aproximadamente 40minutos, al salir de la casa de Guzmán no tenía un lugar fijo de a dónde ir, pedí al conductor que diera unas vueltas y al rato decidí bajar en la playa. Cuando Erick tenía 11 años solíamos escapar de mamá y venir aquí, digamos que no éramos muy buenos para escuchar los regaños. Teníamos una linda complicidad, pero dejó d existir cuando este entró a la etapa más dura de la vida..LA PUBERTAD.