Chantaje Pasional (Adaptación Camren) G!P

Capítulo 4

Lauren POV

-¿¡Estás loca!? - Pregunté exasperada con la mano en mi mejilla. Eso había dolido y mucho.

-¿¡Qué crees que estabas haciendo!? ¿Crees que no se de qué va todo esto? ¿Pensabas que caería como todas? Pues yo no soy así Lauren Jauregui. - Gritó levantada frente a mí. Mi boca se abrió para contestarle más de una grosería.

¿Tan famosa era mi "afición" por las mujeres? Me quedé en silencio cuando sus palabras me descubrieron. Sinceramente aquello no me afectaba, pero volví a pensar… si quieres ganártela, vas a tener que ceder. ¿Y qué más podía hacer? La manera en que sus manos descansaban en sus caderas mientras hablaba o ahora cuando estaban cruzadas en su estómago, realzando un poco más sus senos me causaba estragos.

-Lo siento. - Conseguí articular y agaché la cabeza.- No era mi intención, de verdad.- Dije acercándome lentamente.

-Quédate donde estás.- Avisó con el ceño fruncido y apuntándome con una mano.

-Camila por favor, perdóname.- Seguí acercándome hasta que estuve a 10 centímetros de ella. - Simplemente… me atraes más de lo que hubiese imaginado.

Sus ojos me miraron asustados y su respiración comenzó a aumentar hasta el punto de que tuvo que abrir sus labios. Incliné un poco más mi rostro hacia el suyo, podía sentir su exquisito aliento descontrolado, entonces se apartó.

-Basta, creo que ya es suficiente.- Dijo dirigiéndose hasta el sofá.

-Camila.- Ella había cogido el bolso. - Por favor… perdóname.

-Estás perdonada, ¿puedo irme?

La seriedad en sus palabras me hizo ver que aquello era mucho más grave para ella de lo que era para mi. Tenía que haber alguna manera… ella tenía que confiar en mi, hacerle creer por un momento que para mi solo existía ella. Estiré mi brazo para prohibirle que siguiera su camino.

-No voy a hacerte nada. No sé que es lo que habrás escuchado o que te habrán dicho… pero lo que me haces sentir tú, jamás lo había sentido por nadie. - Y en parte era cierto, con suerte ella se lo tomaría de otra manera.

-No confio en ti. - Dijo separando cada una de las palabras.

-¿Cómo vas a confiar en mi si no me has dejado demostrártelo? Solo te has guiado por algunos rumores. - Camila se quedó en silencio. - Te invito a cenar, esta noche para disculparme. Prometo comportarme. - Ella rió irónicamente.

-¿Pretendes que vaya a cenar contigo para después llevarme a la cama?

-He prometido no intentar nada… además si vamos a ser socias, debemos conocernos un poco mejor, ¿no crees? Y así matamos dos pájaros de un tiro. - Retiré el brazo y ella me miró con el ceño fruncido, se mordió el labio inferior y pareció sopesar mi propuesta. - ¿Por qué tenía que ser tan sensual?

-Muy bien, cenaremos, pero espero que esto no vuelva a repetirse, ¿entendido? - Dijo arqueando las cejas.- Yo asentí con una sonrisa.

-¿Podemos volver a donde estábamos?- Ella suspiró poniendo los ojos en blanco.

-Está bien, pero esta vez te vas a sentar tú.

Reí interiormente, ¿tanto miedo le daba? Miedo a lo mejor no, pero había notado su nerviosismo, de eso estaba casi segura. Estuvimos una hora más en mi oficina, hablando sobre temas más profesionales, temas que incumbían a la dichosa fusión que jamás se llevaría a cabo, aunque tenía que admitir que aquella revista había mejorado mucho.

Tuve que controlar mis reacciones estando tan cerca de ella, a veces tenía incluso que cerrar los ojos para relajarme ya que había momentos en los que ansiaba tenerla de una manera brutal. ¿Por qué nunca había sentido algo igual por una mujer más fácil? Imaginé que aquel rasgo que le pertenecía era uno de tantos que me volvían loca. Y la verdad es que ahora lo fácil se me hacía demasiado aburrido. Los retos eran mucho más divertidos.