Día 80. La fuente y su misteriosa estatua

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Día 80. La fuente y su misteriosa estatua

¡Hola, crayola!, ¡ji, ji!

Ayer te prometí que si ocurría algo interesante por la noche, te lo haría saber mañana por la mañana. Bueno, pues ya es por la tarde, y no ocurrió nada interesante durante la noche, pero sí en la mañana, aunque no me creas, ¡ji, ji, ji, ji!

Para no hacerte largo el cuento, bueno, hubo algo de tensión sexual entre Fabrizio y yo.

Hubo besitos...

Hubo caricias...

Hubo abrazos...

No hubo sexo, ¿eh? Cochinote.

Nuestra relación ha cambiado para bien. Y sé que es muy rápido para olvidarme de Fire, estoy consciente, pero... Fabrizio tiene ese algo que estuve buscando en Fire durante tanto, tanto, tanto tiempo.

Sé que sentirme solo no es excusa para haberle sido infiel, pero, Diario, ¡Fire me utilizó como escalón!... Aún no estoy seguro de si todas esas cosas que sé de él son ciertas, pero todo concuerda, todo encaja a la perfección, y creo que es hora de quitarme la venda de los ojos.

En fin, por ahora mi extraña/amorosa relación con Fabrizio no es importante, porque tengo algo más interesante que contarte:

Resulta que Fabrizio y yo fuimos a pasear al pueblo; estábamos aburridos en la cabaña, porque no había nada en la televisión por satélite. Me encapuché y él se puso su armadura de Hammer Bro (su traje verde, su vestimenta original). Un fire bro es muy raro de ver y puede llamar mucho la atención, pero un hammer bro es uno más del montón.

Cuando por fin llegamos, lo primero que hice fue ver hacia el cielo. El pueblo es un lugar muy hermoso, y aunque el Mundo 7 (Reino de las Nubes) cubre casi todo su espacio aéreo, el pueblo no se encuentra bajo su sombra; de alguna extraña manera no le tapa el sol, hasta que me di cuenta de que en todas las inconmensurables colinas que lo rodeaban hay gigantescos espejos, que reflejan y transportan los rayos de luz solar desde el Mundo 7 hacia abajo. ¡Fascinante! A pesar de que está nublado, se ve como si estuviese soleado.

«¡Bowsy!», me habló Fabrizio; ahora me llama como me llamaba Fire, y no me molesta; de hecho, se me hace muy tierno, pues siempre me gustó ese nombre, ¿sabes? «Creo que encontré algo que podría interesarte», me dijo, tomando mi mano para llevarme corriendo hacia el centro del pueblo.

Toda las calles conectaban hacia una enorme fuente con muchas estatuas en toda la circunferencia de su grueso cemento blanco. Estaban adornadas por muchas luces de colores que, a pesar de que era de día, sobresalían por alguna extraña razón; o las coloridas luces son demasiado fuertes o el reflejo de los rayos de luz que proporcionaban los espejos son muy tenues como para opacarlas.

Fuera como fuese que haya sido, aquellas luces y su enorme fuente blanca ya las había visto, ayer que vine, pero no había notado, no me había percatado de lo que Fire me señalaba ahora.

«Observa», me persuadió, señalando con su dedo. «En el centro, allí. ¡Mira!»

Había una estatua de mi mamá Peach, que soltaba, desde la boca de su estómago, grandes cantidades de agua, como una pequeña cascada que rodeaba toda su cintura, formando un largo y cristalino vestido; bonito efecto. La chuleé al primer vistazo, hasta que Fire... perdón, Fabrizio me volvió a señalar.

(Rayos, espero que la confusión de nombres no me vuelva a pasar cuando estemos de nuevo en la cama... En la cama haciendo nada malo, ¿eh? Cochinote.)

Aquella no era mi mamá Peach, sino una señora muy parecida a ella (demasiado, diría yo), y bajo su enorme escultura se hallaba una dorada inscripción con letra de carta, grabada sobre una pequeña lápida; así es, Diario, una brillante y blanca lápida de una persona muerta: «Aquí yace vuestra señora de las rosas negras, reina de la obscuridad y madre de los ocho pilares del castillo del Reino Koopa, esposa del Rey de las sombras».

Rápidamente me puse a analizar aquella estatua. No soy tonto, Diario. Sé quién es. ¿Ocho pilares? Claramente se refiere a los ocho herederos de mi padre, nosotros, sus hijos. ¿Rey de las sombras? Es obvio que se trata de él...

Pero ¿por qué? ¿Es acaso nuestra verdadera madre?... Y si fuera así, ¿por qué mi padre me lo ocultaría? ¿Y por qué yo no la recuerdo, siendo el mayor de todos?

Lo consulté con Fabrizio, pero, al parecer, él tampoco sabe nada. No creo que me esté mintiendo; además, hicimos pinky promise con la garrita y él aceptó a decirme toda la verdad, y yo le creo, ¿eh?

Como sea, tengo una idea, y ya la consulté con Fabrizio. Iremos en busca de una respuesta, iremos al Reino Champiñón. El único problema es que tardaríamos días en llegar sin mi Clown Car... Ni modo. Mi padre dijo que vendría a visitarme dentro de un mes, más o menos, así que disponemos de treinta días para ir y volver (quince días de ida y quince de regreso, calculando).

Será algo difícil, pero podremos con ello.

¡Chitón, Diario! Fabrizio no sabe de mis segundas intenciones; de hecho, son mis verdaderas intenciones. Quiero ir para buscar a mi mamá Peach y obtener respuestas sobre la estatua, pero también iré en busca de Mario para que me ayude a averiguar si Fire es... bueno... esa persona de la que tanto escuché en el pueblo, ¡ah!, porque déjame decirte que sí hay un espécimen-fire-bro-mafioso, líder de aquel Círculo de Protectores y Opresores... Todo mundo ha comenzado a tenerle miedo, nomás es cosa de que digan su nombre y tiemblan: Fireasa... ¡uuuuh!

Yo sólo espero que no sea el Fire que tanto llegué a querer, porque NO todos los fire bro se llaman Fire, pero, en este caso, el fire del que hablan sí se llama Fire (me hice bolas; yo solo me entiendo).

¡Kooparrayos y koopacentellas!

Bueno, Diario, ya es hora de descansar. Me tengo que ir. Mañana partiremos a primera hora de la mañana. Será un viaje muy largo al Reino Champiñón y necesitaré de tu ayuda para mantenerme cuerdo, ¡ji, ji! Empacaremos comida y agua, y creo que usaremos el Expreso Común, un tren gigantesco que viaja en círculo por los ocho mundos, los ocho reinos completos, ¡vaya!

¡Hasta mañana, mi pequeño gordito-confidente-come-secretos!

Atte. Bowser Jr., tu único y mejor amigo, equis-de.

UNISON (un amor prohibido)Where stories live. Discover now