Árboles de primavera y nubes al atardecer.

Capítulo 41

Aunque sabía que Mo Shu creció en un ambiente anormal, era imposible no tenerle miedo de repente. Sin embargo, la posibilidad de que él mantuviera a Mo Shu a distancia debido a eso también era escasa.

Incluso antes de mencionar que no era problema de Mo Shu, Nan Ge Er se sintió incapaz de dejar a Mo Shu para sobrevivir en otro lugar.

No fue incapacidad, sino renuencia.

Por supuesto, no sería tan difícil para él si realmente deseaba abandonar Guang Tian y vivir mientras se escondía en el continente.

Sin embargo, entendió claramente, Guang Tian fue quien lo revivió, a alguien que no estaba interesado en vivir.

Nunca habría otro lugar que pudiera hacerlo vivir en paz y desarrollar un sentido de pertenencia como Guang Tian.

El mundo era tan enorme, pero los humanos eran tan minúsculos.

Desde el ángulo de la física, los humanos no necesitaban un gran espacio para sobrevivir, ya que eran criaturas sociales después de todo. Nadie podría vivir solo por un largo período de tiempo.

Nunca quiso construir una carrera exitosa y siempre fue una persona poco ambiciosa. Tener un lugar que pudiera hacerlo curvar los labios cada vez que lo pensaba era suficiente para él.

No importa cuánto sufriera afuera, sentiría su corazón calentarse cada vez que pensara en ese lugar simple y tosco. Tal lugar era lo suficientemente bueno.

La gente normalmente llama a eso: Hogar.

Por esa razón-

"Extraño un poco mi casa ahora". Nan Ge Er se encogió en el kang, murmurando mientras abrazaba el cobertor.

Ya habían llegado a la capital de Bei Jun hace tres días. Cuanto más se dirigían hacia el norte, más frío se hacía. Nan Ge Er, que tenía una condición débil en primer lugar, prácticamente dio cada paso con dificultad; deseó poder permanecer en el kang mientras abrazaba el cobertor en cada momento.

Mo Shu se sentó frente a una mesa, escribiendo algo. Al oír eso, se volvió hacia Nan Ge Er y sonrió: "Volveremos en unos días".

Nan Ge Er asintió.

Mirando la mandíbula inferior afilada de Nan Ge Er, Mo Shu colocó el pincel en sus manos hacia abajo. Caminó hacia él, subió también al kang y se sentó junto a Nan Ge Er, "¿Tienes frío?"

Nan Ge Er sacudió la cabeza.

Mo Shu extendió las manos y le tocó las mejillas.
Efectivamente, todavía estaban helados.
Lo tomó en sus brazos, "¿Por qué no me dijiste que tienes frío?"
Después de retroceder un poco, Nan Ge Er relajó su cuerpo, "No me parece frío". Como su condición corporal siempre era débil, se descuidaron todo tipo de molestias leves.

Todavía tenía miedo de Mo Shu, pero al mismo tiempo, sabía que Mo Shu probablemente no lo dañaría.
Por lo tanto, esto hizo que se sintiera ansioso instintivamente cada vez que Mo Shu se acercaba a él ahora, antes de relajarse.

Mo Shu no pronunció una palabra. Simplemente extendió sus manos para agarrar las manos de Nan Ge Er, que se abrazaban al cobertor. "Los asuntos se resolverán rápidamente; Volveremos después de eso. En este lugar hace demasiado frío. No puedes soportar esto por más tiempo ".

Una empatía y un aprecio contundente completamente oculto se escucharon por su tono.

"Ugh". Nan Ge Er respondió borrosamente.

El cuerpo de Mo Shu estaba realmente cálido. Al estar en un abrazo gentil, Nan Ge Er sintió sueño al instante: el viaje constante y el clima incómodo lo hacían sentir mentalmente mal continuamente.