Capítulo IV

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| SAORI |



¡¿Qué piensa que me rendiré a sus pies por su belleza?! Esta muy equivocado, no lo hare.... aunque es guapo, pero no, no tengo tiempo para eso, bueno no con él.

Me dirigí a la biblioteca y busqué unos libros, me senté en una mesa cerca de los estantes, odiaba hacer tarea de filosofía, pero por lo menos puedo concentrarme en algo y no pensar en el problema de Evan.

—Hola, ángel— me saluda Román, un chico del pueblo vampiro.

Nos conocimos en un parque cerca del castillo, me había caído de un columpio y él me ayudo a levantarme tenía 106 años y él 110 años en ese tiempo. Era un chico dulce, siempre estaba atento a mí y él es mil veces mejor que Evan.

—Hola, my perfect boy— lo salude sin mirarlo, me atraía Román, pero no más de allá. Un chico más alto que yo, tez blanca, su cabello de color azabache es tan suave, sus ojos grises daban un poco de miedo, pero sin duda son hermosos.

—Quiero preguntarte algo, mírame a los ojos— rio.

Levanté mi mirada, lo miré a sus ojos grises que me encantan, aunque me ponían un poco nerviosa.

—¿Quieres ser mi novia? — directamente me preguntó sin rodeos.

Me quede muda, es un 911 ¡ayuda!, donde está Elizabeth cuando la necesito. Me pare de la silla, me abalancé sobre él y lo besé. Él es mejor partido que Evan de eso no lo dudo, olvidare el tema de Evan completamente.

—¿Eso responde tu pregunta? — sonriendo cuando me separé de él.

Nunca pensé en tener una relación con él hasta ahora, creo que está bien la decisión que tome.

—Sí, me encantó tu forma de expresar tu respuesta— mientras me agarró la mano.

Entró Elizabeth con Emy, su hermana menor es muy traviesa y carismática.

—Hola— saludó Elizabeth, entrando con su hermana.

—Maldita, me dejaste sola con la tarea— me hice la que estaba enojada con ella.

—Lo siento, estaba ayudando a Emy en su tarea— dijo ella.

Elizabeth detuvo su mirada en nuestras manos entrelazadas y sonrió, al parecer ella ya sabía todo.

—¿Se lo pediste? — preguntó Elizabeth. —Sí— Román respondió con una sonrisa en su rostro.

Román y Eli son mejores amigos siempre se cuentan todo. Entre risas y bromas nos quedamos haciendo la tarea en la biblioteca.

—Oh cierto, tenía que darte esto— saca algo de su bolsillo y era una pulsera con un dije de una uña de guitarra, era la de Román. —Se que gusta la música igual que mí, así que pensé en esta idea para que sientas que siempre estoy contigo, aunque no esté cerca.

—Realmente es tierno de tu parte— deje que me pusiera la pulsera.

Estaba feliz, me atraía, pero no estaba enamorada de él.

Me despedí de Román con un beso en la mejilla. En el transcurso del día fue lento pero tranquilo. Tocó el timbre y fui al salón de artes a buscar mi cartuchera en mi escritorio que se me había quedado anteriormente, igual me había saltado esta clase, la recogí y vi un cuaderno decía afuera " EVAN C. LEXCA B." se le había quedado, mañana se lo entregare.

Caminaba por los pasillos y encontré a Raúl.

—Te estaba buscando—dijo él. —vámonos— andaba con prisa.

Dark SecretWhere stories live. Discover now