Pequeñas reglas || HunHan ✔

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☕️ «Concierto de sueños» ☕️

— L-Lo digo en s-serio, tengo que i-irme — jadea Luhan, con voz apenas audible y las manos temblorosas, debido al estremecimiento que le provoca sentir los labios de Sehun sobre el cuello a primera hora del día. El hecho que sus manos aferren con fuerza su cintura y sus dedos jugueteen con el borde su pantalón, tampoco está ayudando a su autocontrol.

A sus espaldas, Sehun continua su labor sin sentirse afectado por las palabras del mayor y es que, parece justo aprovechar cada minuto que tiene a su lado, después de los días que se ha visto obligado a pasar sin saber absolutamente nada de él. No ha sido intencional, las actividades en el hospital no han dejado espacio para sus reuniones, pero Luhan tiene que ser consciente de lo mucho que le afecta el tiempo lejos de él.

— Puedes irte cuando quieras — murmura de vuelta, como quien no quiere la cosa. Su nariz traza un camino desde la base del cuello hasta la oreja del mayor, mientras sus manos buscan llegar a la entrepierna de su hyung. No parece posible que Luhan escape, pero de alguna forma, eso es lo que hace.

— Vamos, Hunnie, no me hagas esto — le pide, zafándose de su agarre sólo para girarse y encararlo debidamente. Tiene que darse prisa y dejar el apartamento, antes que sus hormonas ganen la contienda y termine enrollándose una vez más con el menor — Jugaremos más tarde, lo prometo —

— ¿Y cómo sé que vas en serio? Me has abandonado toda la semana, bebé, necesito pasar tiempo contigo — lloriquea, no siendo consciente del puchero que aparece en sus labios.

Luhan sonríe y sus dedos se apoyan sobre su pecho desnudo, lo empujan suavemente hasta caer en la cama una vez más y aunque su mayor deseo es permanecer a horcajadas en el regazo del bailarín, su cabeza parece empeñada en recordar el motivo por el que debe marcharse para cubrir su ronda matutina sin un minuto de retraso. No es que le importe ser retado por ir algo tarde, pero esa semana, debe asegurarse de mantener a Jung Soo contento con su desempeño.

— Tampoco es que tuvieras mucho tiempo libre, ¿verdad? Sólo he dejado que te apliques con los ensayos. ¿Cuántas noches faltan para el Dream Concert? — cuestiona entonces, ligeramente inclinado sobre el cuerpo del otro.

— No inviertas los papeles, yo siempre estoy libre cuando se trata de ti — rezonga Sehun, todavía emberrinchado — El concierto es mañana por la noche —

— ¿Y pensabas darme el pase de entrada hasta que me detuvieran en la puerta de acceso? — Luhan arroja, tomando tan desprevenido al menor, que su rostro no tarda en evidenciar lo mucho que le sorprende escuchar sobre las intenciones del médico de ir a verlo bailar.

Una sonrisa se dibuja en sus labios al procesarlo y antes de que su chico pueda hacer algo, termina sujetándole por la cintura e invirtiendo sus posiciones. Con Luhan bajo su cuerpo, sintiendo cada músculo de su anatomía acoplarse a las suyas, Sehun lo besa con calma, disfrutando el momento y la emoción que le provoca el saber que el otro estará presente en un momento tan importante para él.

Más tarde, estirándose lo suficiente para alcanzar el cajón de su mesita de noche, el rubio extra el boleto que ha guardado en aquel sitio desde que Kasper se lo entregó, varios días atrás. Se había resignado a no invitar a nadie, luego de que Luhan pareciera evadir su invitación la noche que la realizó y aunque era un hecho que dolía, suponía que la negativa era parte de esas pequeñas cosas en las que debía ser paciente y aguardar hasta que el pelinegro estuviese listo para avanzar.

— Perfecto — celebra Luhan al tener el boleto — Ahora quítate de encima, Jung Soo no va a darme el día libre si llego tarde a mi primera ronda del día —