Capítulo 8

666 42 2
                                    

¿Si ya lo había asumido? Si ¿Haciendo esto era más sencillo? No. Es algo que llevo pensando por mucho tiempo.Pero ¿Porque el amor es tan fácil pero al mismo tiempo tan difícil? Estas son preguntas las cuales nadie ha podido resolver o explicar, cada persona tiene su experiencia y cada persona lo expresa a su manera, ninguno de nosotros ha podido explicar que es aquel sentimiento pero todos sabemos como se siente, como se expresa pero en ningun momento como se explica. Al pensar en todo esto un cuadro empezó a crearse en mi mente cada pincelada, cada color empezaba a fluir en mi, pero como casi siempre pasa esto la inspiración nunca llega en el momento, por suerte siempre estoy preparada saqué mi celular y lo ensendi, los demás estaban jugando en un puesto asi que me senté en la banca mas cercana. Encendí mis audífonos, me los coloqué, reproducí una playlist y empecé, no era sencillo aquello ya que una pluma táctil y un celular no simplificaba las cosas pero para empezar con un boceto funcionaba, en la aplicación tenía lo necesario y cambiando entre un pincel y otro termino lo que seria mi boceto y al llegar a casa empezaría pero un cuadro de verdad. Al terminar lo admiré por unos momentos cuando noté que alguien observaba lo mismo que yo, levanté mi cabeza para saber quien era aquella persona y era nada más y nada menos que Karen, al principio no se percató de lo que hacía ya que parecía fascinada por lo que acababa de terminar en mi celular, pero a los pocos segundos reaccionó.

-O..Emm...Lo siento no...no era mi intecion distraerte- lo decía tartamudeando en algunas letras.

-No tranquila, no me molesta que observen, y como quiera ya había terminado con el boceto- le decía para tranquilizarla, a lo que pasó.

-¿Eso es un boseto?- decía con un poco de ironía y admiración en su voz -ya quisiera hacer yo vocetos de ese estilo, en mis clases de arte era horrible, no se ni siquiera como llegue a pasar la materia-.

-Muchos dicen que crear arte es un don, pero para mi el arte no es aquello que es perfecto, si no es aquello que te ayuda a liberar tus sentimientos desde los de afuera hasta los más oscuros y profundos que tengas, ya sea a través de rayas, círculos o de paisajes- decía yo aun con aquel cuadro en mi mente.

-Realmente es algo hermoso de pensar- pronunciaba mirándome a los ojos pero rápidamente apartando la mirada -y dime ¿Qué es lo que quieres liberar con este cuadro?- decía mientras se sentaba al lado de mi.

-Muchas cosas, pero siento que el arte no es algo que se tenga que explicar sino algo que debes sentir- decía yo volviendo a conectar nuestras miradas -¿Qué crees que estoy intentando expresar?-.

-Pues....emm...- pensaba ella haciendo muletillas y algunas caras las cuales me causaban gracia y ternura, hasta que se rindió -ya te dije que soy pésima en el arte, podrías decirme y nos ahorramos mi cerebro explotando-.

-Ya te dije que el arte se siente y no se expresa-

-Pero soy pésima, dímelo- decía con un sonido de puchero lo que me provocó una sonrisa ladeada.

-Entonces creo que tendrás que esperar hasta que el arte llegue a ti, no tu a el-.

Su cara volteo hacia mi y nuestros ojos se volvieron a conectar, sentí una corriente elecrica atraves de mi. Mi cuerpo me pedía tocarla pero esto era imposible, ella jamás se fijaría en alguien como yo, un alma rota, y aparte de ello no creo que les gusten las chicas y si lo hicieran, no sería yo. Pero aun asi mi cuerpo lo pedía, aunque fuese un pequeño roze mi cuerpo lo deseaba. Hasta que de nuevo la pelirosa nos sacó de aquel momento por tercera vez.

-Ganee!!- gritaba, refiriendoce a el juego. Volté y me estaba mirando -Elije que premio quieres- decía mirándome.

-¿Yo?- pregunté señalándome a mi misma.

-Si tu- me levante de la banca, a lo que la morena hizo tambien dirjiendonos a el puesto -ya que tu nos has invitado a un desayuno gratis yo te invito a un peluche gratis- decía haciendo que de mi saliera una pequeña risa.

-Bueno si ese es el caso- dije volteando hacia la cabina viendo todos los peluches colgantes -quiero ese- anuncie señalando a un peluche de un lobo ya que este es mi animal favorito.

-Muy bien ese sera- decía Leslie esperando a que el señor se lo entregara -muchas gracias- le decía la menor a el señor -aqui esta su premio- pronunciaba haciendo una reverencia hacia mi, a lo que me reí.

-Muchas gracias por sus donaciones a los pueblerinos, su realeza- contestaba con el mismo tono de las épocas antiguas e imitando la misma posición anterior de la pelirosa -su generosidad se le sería agradecida con un algodón de azúcar y no se aceptara un no por respuesta-.

-Lo aceptaré pero solo si esta campesina acepta una caminata por la cabina real- decía Leslie refiriéndose a la rueda de la fortuna que había en la feria.

-Esta humilde campesina acepta sus humildes misericordias- a lo que coloqué mi brazo en forma de "V" acostada "<" para que colocara su brazo.

Empezamos a reír de el pequeño espectáculo que montamos y seguimos el camino a por el algodón de azúcar.

-Ahora dejando de lado todo aquello de realeza y esas cosas- secándose unas lágrimas y pronunciando con dificultad ya que no parábamos de reír -¿Porque elegiste este peluche?- decía acariciando al loboto que llevaba en mi otro brazo.

-Fácil y sencillo, es mi animal favorito- decía yo apachurando en mi cachete a aquel peluche.

-Aw que lindo, y dime como le vas a poner-

-Em... No lo he pensado aún -decía yo pensando en nombres -pues como tú lo has ganado tú lo decides-.

-Em..- Empezó a pensar.

Me pregunté por un momento de como llegué a verla atraves de un millón de personas a estar aqui charlando como buenas amigas una frente a la otra, claro ella fue quien mas me ha hablado de los tres hermanos y es obvio que le tengo mas confianza, se que pensaba que la menor era una niña chiflada y molesta pero resulto lo contrario al parecer era mucho mejor en persona que lo que aparentaba en videos, y fácilmente nos hicimos buenas amigas. Pero volviendo al tema, como de todas las cosas que pueden pasar en el mundo, tener la suerte de conocer a mis ídolos de la infancia, de estar aqui charlando con ellos frente a frente y conocerlos, era algo que nunca hubiera adivinado que pasaría, pero tristemente no duraría por mucho.

¿Porque tú? (Karen Polinesia y Tu) [Pausada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora