Zombies 2.5 - Wyatt y tú - (I)

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Pasamos todo el día paseando por Seabrook. En todo el camino la hice reír, y no dejaba que recordara lo de sus amigos.

- Te lo digo en serio - Se le escapó una risita.

Le estaba contando como es que Wynter se dejaba acariciar por Zoey.

- Quiero probar, quiero probar. - Intentó tocar mi cabello.

- No, señorita. Todo menos eso - Le dije tomando su mano en el aire.

- apor favor, no seas malo. - Se acercó a mi hasta abrazarme, mientras hacía una cara muy tierna.

- No me mires así...

- Por favor. De por sí tu cabello se ve muy suave y esponjocito. - Parecía una niña pequeña, o como diría Willa, Wyatt cuando quiero Froyo.

La obligué a sentarse conmigo. Ella aprovechó que la había soltado para quitarse la capucha, pues ya había oscurecido.

- Tú cabello está un poco desordenado. - iba a acomodárselo, pero ella lo hizo primero.

- Es tú culpa. Por colocar tu cabeza encima de la mía, y, más aún, cuando no parabas de moverte.

- Tú cabello también se ve muy suave. - Quise tocarlo, pero, ahora, ella me detuvo.

- Si me dejas tocar el tuyo, yo te dejo tocar el mío. - Lo dudé un poco, pero al final acepté.

- Pero yo primero. - Ella rodó los ojos, pero asintió.

Me acerqué lo más que pude a ella. Podía ver a la perfección sus ojos color café, que cuando ella quería podía cambiarlos a rojos. Una parte de su cabello, seguía fuera de su lugar. Sin apartar la mirada de sus ojos, levanté mi mano para acomodarlo. No sabía en que concentrarme, la suavidad de su cabello, o lo hipnótico de sus ojos.

- ¿Qué pasa? - Dijo rompiendo el silencio.

- Es que... ¿Segura de que no me hipnotizaste?... Tus ojos son hermosos.

- Soy "nueva". No tengo poderes. Así que... gracias. - Ni siquiera me di cuenta cuando fue que mi mano abandonó su cabello, para pasar a tocar su mejilla. - ¿Ahora si puedo tocar tu cabello?

- Adelante - No me moví, pero ella sí.

Se alejó un poco de mí, y se acomodó en su lugar, arrodillándose en la banqueta.

- Ven aquí, lobito. - La forma en la que lo dijo era tan tierna, que sin pensarlo le hice caso.

Me acerqué a ella. Liv sonrió y se acercó un poco a mí, pasando uno de sus brazos por detrás de mi cuello y con el otro brazo empezó a tocar mi cabello. Se sentía muy bien, era muy relajante. Ella se dio cuenta y se rio levemente, mientras apoyaba su codo en mi hombro.

- ¿Se siente bien? - Su mano llegó hasta la parte posterior de mi oreja.

Eso se sentía mucho mejo. Era como si todo desapareciera. Era mucho más relajante. Ahí entendí porque a Wynter le gustaba tanto que Zoey hiciera eso.

- Se siente genial. - Dejé caer mi cabeza en sus piernas. - Oye... - Le dije cuando quitó su mano. - Sigue. - Tomé su mano y la puse otra vez en mi cabeza.

- ¿No que todo menos eso? - Volvió a acariciar mi cabello.

Oficialmente, siempre que me estresara, y después de los entrenamientos, le pediría que hiciera eso.

- Eres y serás a la única que dejaré tocar mi cabello.... Awo, es tan relajante. - Mis ojos empezaron a cerrarse por sí solos.

- No te duermas, Wyatt. - Me sacudió suavemente.

- No estoy dormido.

- Parece que sí...

- No le diremos a Willa de esto. Nunca me gustó que tocaran mi cabello. Me molestaría con esto por siempre. - Ella me miraba fijamente, sumergida en sus pensamientos.

A pesar de la increíble tarde que estábamos viviendo... me sentía decepcionado. Sabía que tarde o temprano, volvería a pensar en lo que sea que le estaba afectando. Pero, por un momento pensé que lograría hacerlo desaparecer.
Me asusté mucho cuando me di cuenta que estaba por llorar. Al instante me levanté y la abracé.

- Liv... - No sabía que decirle, no sabía qué hacer. - calma... eh, estás conmigo...

- No te quiero hacer daño, Wyatt. - Si bien no llegaba a llorar, sentía que estaba alterada.

Intentaba aferrarse a mí. Y yo también la atraía a mí.

- Jamás me lastimarías.

- No me conoces. Ni yo misma me conozco.

- Ey, mírame. - Tomé sus mejillas con mis manos y la obligué a mirarme. - Eres increíble. Eres una gran chica, no importa lo que seas, o cual sea tu naturaleza ahora. Eres tú, eres genial. Por eso me encanta pasar tiempo contigo. No importa con quien estés, siempre eres tú. Encajas perfectamente con muchas personas. Por eso es que Willa y Wynter te adoran. Todos nosotros, vampiros, hombres lobo y zombies tenemos un poco de oscuridad, pero conociendo a las personas adecuadas ese lado desaparece. - Ella suspiró, antes de recostarse un poco en mí.

Yo me permití abrazarla con mucha fuerza.

- Desde que soy vampira, creí... que todo era muy complicado... Pero... - Volvió a suspirar, ya había empezado a derramar unas lágrimas.

Era muy extraño que un vampiro se conectara con sus emociones. Pero ella estaba llorando. Cosa que no me gustaba, me hacía sentir mal. Era una vampira, llorando. En verdad tenía que ser algo profundo. Algo que le causaba tanto daño que, al llevar poco tiempo en ese mundo, era un hilo directo con sus emociones.

- No es necesario que me lo cuentes. Solo quiero que sepas que, siempre podrás confiar en mí.

- Lo hago, confío en ti. Eres... la mejor persona, bueno... lobo, que pude haber conocido. - Le sonreí intentando reconfortarla.

- Siento lo mismo. Estamos desafiando a la naturaleza, pero... me alegro de hacerlo. Sin esto, probablemente nunca nos hubiéramos conocido. - Ella volvió a bajar la mirada. - Liv, por favor... No me gusta verte llorar.

- Tal vez hubiera sido más seguro para ti. Estás en peligro conmigo cerca.

- Víctor no me hará nada, no te preocupes.

- No hablo de él. Hablo de mí. Soy un peligro para las personas que me importan, Wyatt. Y tú me importas mucho.

- Por favor. Tú también me importas. En poco tiempo te volviste demasiado importante para mí. - Tomé sus manos entre las mías. - Y te conozco, eres una gran persona. Eres increíble. Hiciste que los lobos, tus enemigos naturales, ya no puedan imaginar su vida sin ti. Eso hiciste conmigo. Por favor, entiéndeme. Si te vieras desde mi lugar, verías... No sé cómo explicarlo... solo, ya no puedo dejar que te alejes de mí.

- Maté a mi hermano, Wyatt ¿Quieres estar cerca de una chica así? ¿Qué te hace pensar que no podría perder el control y atacarte a ti?