Jisedai (TMNT 2012)

Ayuda exterior

Lentamente, unos cuantos meses transcurrieron, ya los bebitos tenían 3 meses de edad, estaban más grandecitos y gorditos... Eran una ternura para los padres.

Una tarde, Donnie les daba los biberones a ambos bebés en sus sillitas. Leo y Raph habían salido a patrullar ya que habían escuchado que había actividad del clan del Pie. Michelangelo estaba junto a Donatello, solo que en el suelo, con una mantita y con la pequeña Rosie acostada de pancita. La pequeña se veía muy animada y sonriente. Rosie azotaba sus manitas en la mantita donde estaba. Veía a Mikey y no podía evitar sonreír. Era muy divertido.

-Hola, princesa... - decía Mikey, al estar frente a su niña, sonriendo con cariño- ¡Aquí está mamá!

Comenzó a patear sus piernas regordetas y soltar chillidos en alto ante la alegría de ver a su mamá. Se emocionaba de verdad.

-Donnie, trae a los mellizos aquí - decía Mikey al ver lo feliz que estaba su niña en esos momentos.

Donnie al terminar de sacarles el cólico a ambos bebés, los llevó con cuidado y acostó a los bebés a un lado de su prima. — Amorcitos, es hora de estar de pancita.

Al estar junto a Rosabella, los bebés se emocionaron mucho, mirando a su madre, a su tío y a Rosie.

-Oww... Necesitan una foto- dijo el pecoso, sacando su teléfono de a pocos.

— Puedo imprimirlos de tamaño grande para tener una foto de los tres a esta edad. — Sonrió Donnie a la idea de tener tal hermoso retrato de sus hijos y sobrina.

-¡Será tan tierno...! - dijo el pecoso con una gran sonrisa, mirando como los bebés se levantaban levemente al estar de pancita.

Rosie estaba distraída en moverse y reír, pero notó a Kotaro a su lado y le vio con mucha curiosidad, se dio la vuelta y de manera inocente pegó su manita a su mejilla.

Aquella manita sorprendió demasiado a su primito, el cual, comenzó a hacer pequeños pucheros... Para luego, comenzar a llorar...

— Ohhh mi amor, calma. Es solo Rosie, te quiere saludar. — Rio leve Donnie al cargar a su bebé con cuidado.

-Amorcito, ten cuidado con Kota... Sabes que a tu primito no le gusta que lo sorprendan - le decía suavemente Mikey a su hija.

Rosie solo sonrió a lo que decía su mami y se acomodó en su lugar.

No pasó mucho para que llegaran Leo y Raph después de patrullar la ciudad y ver acerca de la noticia que mencionaban.

Leonardo entró con seriedad a la guarida, pero al ver a sus niños y sobrina, este sonrió con suavidad - Hola a todos~

— Hola Leo. — Saludó Donnie al de azul. — Miren niños, papi y tío regresaron. — Dijo Donatello a sus mellizos.

Kotaro al ver a su papá, comenzó a calmarse, sonriendo con inocencia, alzando una manita hacia este.

Leonardo sonrió, tomando a Kotaro en brazos, para luego besar la mejilla de su pareja.

Amedea al ver a su padre sonrió y comenzó a gemir con alegría, alzó sus manitas para llamar la atención de Leo igualmente.

Rosie hizo lo mismo por su papi pero gritaba de emoción. — Ya voy, nena. Papi ya llegó. — Sonrió Raph al tomarla en brazos.

Leonardo sonrió, hincándose para tomar a su bebita en brazos, junto a Kota- ¿Cómo están mis pequeños angelitos?

Mikey sonrió con cariño, acercándose de a pocos a Raph y su niña-¿Cómo les fue?

— Traviesos como siempre. — Sonrió Donnie yendo con su novio.