10 errores por los cuales...

Porque perderás amistades (sera difícil volver a confiar en alguien)

Mi cuerpo, ahora suyo. Sus labios irresistibles entregando en los míos besos apasionados, esos besos, ahora míos. Unos besos con ligeras mordidas, explorando. Paseaba calidamente sus manos por mi cuerpo. Las prendas de ambos iban cayendo poco a poco en la habitación. El no tenia (ni parecia querer) imponer fuerza, fue delicado sin que se lo pidiera. Sentí que trato a mi cuerpo como a un valioso jarrón de cristal. Sin darnos cuenta, entre gemidos y respiraciones cortadas nos entregamos el uno al otro, nos hicimos uno. Explorando un pozo de absoluto placer, sudábamos piel con piel, nos movíamos, nos gustaba. 

Su nombre salia de mis labios sin ni siquiera pensarlo antes. En mi mente aun es confuso, el pegándome mas a su cuerpo, apretándome. El placer que había querido sentir, estaba sintiéndolo, a pesar de los nervios, de mis inseguridades, estaba disfrutando que el estuviese dentro...

-Moon... Gemí 

El encima de mi, me besaba el cuello mientras subía para morderme el lóbulo de la oreja. Mas caliente, otro gemido "Moon... mierda". Estaba siendo delicado, no me penetraba para lastimarme, ni para solo satisfacerse a el. Estábamos disfrutándolo ambos. El entraba y salia dándonos mas por sentir, sus movimientos me estaban volviendo loca. 

Y sin darnos cuenta, el tiempo se consumió al igual que nuestro acto. Ambos en un buen movimiento dirigido por mis caderas y los deseos de Moon, llegamos al cielo. Respiraciones entrecortadas, cuerpos vibrantes, sudorosos, excitados y cansados. 

El primero que se levanto fue el, hubo un silencio un tanto incomodo, supongo que fue porque sentamos cabeza de lo que acababa de suceder... nuestra amistad ya no seria solo eso, o al menos después de hoy, ni siquiera seria eso. 

Ropa por aquí, por allá. "Esto es mio. Gracias" Ya vestidos, el sentado ahora frente a mi poniéndose sus zapatos. Sus ojos intentando encontrar los míos y cuando lo hacían, volteaba o miraba otro sitio. El que fuésemos mejores mejores amigos implicaba conocernos como la palma, el sabia que para mi seria difícil "esta experiencia" por mi falta de sentir, mis inseguridades y mi casi confirmada asexualidad. 

Supongo que yo era una gran meta para un hombre, el hecho de que no lograse sentir nada y fuese por ahí diciendo "ese wey no me hizo ni cosquillas" es mucho para el sexo masculino afectado. Sabia que Moon se sentiría acomplejado por cumplir el reto o porque el también tenia puntos débiles, y si yo no lo era porque no me amaba, definitivamente era su estatus de macho. 

-¿Esta todo bien?. Dijo por fin y se me quedo viendo.

-Si.. solo... ya sabes. Lo mire y el puso cara de "Puta madre, no la hice sentir cosquillas".- Me hubiese gustado que asi hubiese sido...

-¿Que?

-Mi primera vez... 

Y sin mentirles, casi me pongo a llorar por recordar ese problemita, hasta que el dijo:

-Si quieres puedes fingir, no se, decir, que yo fui tu primera vez. Me sonrió, y gracias a mi, sabia que triunfo.

Aunque siendo reales, nunca tome su palabra, ni intente convencerme de que así fue. Hubiese sido muy fácil ir por la vida "Moon me quito la flor" pero no seria verdad, porque aun en mi mente estaban las veces que lo hice con Rom, y aunque no fueron placenteras... no se borran, están todos los días.

Cuando ya estábamos cambiados, salimos a caminar. Hablamos de todo, de como nos fue en el verano, de lo que haríamos entrando, de lo que esperábamos mejorar este ultimo año. 

Tanto que hablar, que ni los 30 minutos camino a casa fueron suficientes para hacerle la pregunta del millón. "Hey Moon, es que tenia una duda que me carcome día y noche... ¿tu me amas, como un chico ama a una chica, sin decirse hermanos?" 

Estaba asustada porque sabia que iba a rechazarme, acababa de acostarme con el. Y a mi mente vino "Bueno, si no eres la novia, ni la mejor amiga y públicamente no eres nadie para el. Al menos diviértete siendo la amante desconocida". 

Cuando el destino llego, nos despedimos y entre a casa. Llegue muy temprano, Queen se sorprendió pero no hizo preguntas después del "¿Como te fue?". Lo molesto no era que acababa de coger, que acababa de sentir, o que en definición, me acababa de coger el niño de mis ojos y me había hecho sentir que caminaba por la luna... era que había dicho a Queen que fue una fiesta, que ahí tendrían comida... no comí nada, y me aguante para evitar sospechas, reclamos y futuros "Estas castigada". 

Llegué a casa, me senté en el sofá y mi cabeza comenzó a girar... mi plan no funciono, seguia enamorada de el.