El aroma del exquisito café, es incluso suficiente para la inspiración hacia un poema
La vida es esto, para mí y para muchos que conozco. El degustar de una taza de café mientras hace frío, tomas un libro de tu estantería y para que el momento sea perfecto que caiga la lluvia y golpee los cristales de tu ventana, haciendo que ese agradable sonido haga eco en tu cabeza.
Son momentos que a diferencia de los que mencioné en el capítulo anterior, estos si se olvidan. Por qué pasan con más frecuencia y se puede repetir, es opuesto al primer beso.
He tenido la oportunidad de hacerlo y lo he hecho, y se siente bien, ¡eso amigo mío es disfrutar la vida!
Disfrutas la vida cuando sales en compañía de tus amigos a jugar, hacer algún deporte como todos los fines de semana, llegas agotado a casa y satisfecho de haber dado un gran esfuerzo, más allá de si ganaste o perdiste la partida. Te diriges a la ducha y tomas un baño... Esa sensación de alivio que sientes después de tan refrescante actividad, ¡Eso amigo mío es disfrutar la vida!
Cuando te encuentras en una situación económica difícil y logras obtener un trabajo, por más diferente que esté sea a tus expectativas, sientes ese estado de tranquilidad y paz. Cada vez que recibes tú salario producto de tu trabajo, ¡eso amigo mío es disfrutar la vida!
Cuándo tomas de la mano a la persona que te hace sentir especial, cuando besas sus labios y sonríes después de hacerlo, ¡Eso amigo mío es disfrutar la vida!
Ahora bien, luego de cada actividad que nos hace sentir vivos y felices existe la otra parte, la otra cara de la moneda, el momento en que la vida aparentemente nos da la espalda. He aquí algunos ejemplos...
Cuando enfermas y sientes tú cuerpo adolorido, y los síntomas se muestran bastante molestos impidiendo la paz y tranquilidad de nuestro sentir, ¡eso amigo mío es parte de la vida!
Cuando la persona que te atrae o te mantiene pensativo te rechaza; cuando sus actitudes son de indiferencia, desdén u otra similar nuestro ánimo va en declive, y la resignación se nos vuelve una opción de última instancia, pese a la negatividad insistimos una vez más, ¡eso amigo mío es parte de la vida!
La perdida irremediable de un familiar, de un allegado, un amigo o una persona que de cierta forma nos afecte su partida, nos mantiene en un estado depresivo momentáneo para quienes son resilientes y sin embargo nos negamos en aceptar la realidad, ¡eso amigo mío es parte de la vida!
Agradecería a mis amigos lectores, que a través de en comentario me comenten un momento de la vida que les hace disfrutar y otro que les pone tristes. Me encantaría incluirlos en algún capítulo
* No olviden leer el capítulo anterior, que por algún motivo que desconozco, no aparece en las notificaciones. Un abrazo ❤️🇪🇨
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ESCRITOS DE UN INSENSIBLE
Non-FictionEste es un compendio de ideas, emociones y sentimientos que surgen desde mi ser. Tras un vano intento de componer escritos de amor he notado que simplemente no me nacen, no puedo ser un Joaquín Sabina, un Pablo Neruda o un Medardo Ángel Silva ¡No so...
