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—Dando por concluida esta conversación, necesito que me chupes la polla por que estoy muy cachondo, bebé.

Los ojos de Jimin saltaron debido al atrevido vocabulario de Yoongi y su corazón latió fuerte al bajar la mirada al grande y gordo falo del blanquecino quien ahora secaba su cabello con una toalla.

—¿Q-que quiere que haga q-que?—dijo perplejo.

—Quiero que lamas, chupes y succiones mi polla con esa linda boquita que me vuelve loco, ven ahora mismo o te azoto.— Jimin estaba perplejo, ¿Tenía que chupar su... su pene? De ninguna manera, se daría a respetar. —Uno.— "Oh no."

Todos los recuerdos de su infancia, todos los golpes y gritos de sus padres llegaron como un torbellino, un nudo de formo en su garganta junto a un mal sabor de boca.

—Dos.— no lo pensó dos veces y gateó en la tina para estar frente al blanquecino entre sus piernas quien lo veía desde arriba. —Buen chico.—acarició su cabello con la toalla y comenzó a secarlo.

Cuando terminó se dio cuenta que los ojos curiosos y cristalinos del menor estaban sobre su pene palpitante y erecto, sonrió de lado con la mirada oscurecida.

—Vamos, acércate más. No muerde.—Jimin se acercó más hasta quedar aproximadamente a veinte centímetros de distancia, con la mirada en la punta roja y chorreante de presemen. —Eso es, ¿recuerdas lo que hice hace un rato con tus lindas manos?— el menor asintió subiendo la mirada. —Bien pues quiero que lo hagas tu, comienza a dolerme.— le guiño un ojo con una leve sonrisa en sus labios.

Jimin acercó sus manos pequeñas y las enrollo en el pene palpitante y duro del blanquecino. Comenzó a dar pequeños movimientos de arriba a bajo en toda la extensión del gran falo, comenzó a masturbar al mayor quien mordía su labio inferior a causa de la satisfacción provocada.

—¿A-asi?— asintió.

—Más rápido bebé.— murmuró.

Jimin comenzó a mover sus manos más rapido, justo a la misma velocidad en la que lo había hecho su papi logrando sacar jadeos y pequeños gemidos del antes mencionado; los ojos curiosos de Jimin fueron al rostro del blanquecino, quien sonreía al aire con los ojos cerrados lleno de excitación provocado por el menor.

La primera vez que Jimin sintió excitación fue al escuchar gemidos y jadeos provenientes de una mujer en una película estadounidense, el contenido sexual no era extremo pero había sido lo suficientemente excitante para Jimin, quien curioso comenzó a frotar su mano justo en donde le daban cosquillas y su sangre era concentrada en la glande rojiza de su pene. Intentaba cubrir su boca para que raros sonidos salieran de ahí, los mismos sonidos raros que salían de la boca del pelinegro; a los pocos minutos llegó su climax manchando sus pantalones con un líquido viscoso y blanco que le supo salado, por que si, Jimin había probado su propia esencia al no saber que era, y aunque no le supo feo no volvió a hacerlo ya que lo veía asqueroso.

Regresando a la actualidad, Jimin tenía plantada su vista en la caliente polla de su papi, la cual seguía masturbando con rapidez. Los sonidos llenos de excitación no dejaban de salir de la boca de su papi y eso lo estaba poniendo extrañamente duro.

De un movimiento a otro YoonGi retiró las manos del menor de su pene tomó entre sus dedos los mechones de cabello del menor para acercarlo más a su palpitante pené, Jimin lo vio asustado por tal acto. ¿Sería arrastrado por el suelo de los cabellos justo como antes? La malvada sonrisa de Yoongi le sonrió ampliamente junto a sus ojos lujuriosos.