18 (2/2)

2.1K 181 57
                                    

•••

Taehyung no podía pegar el ojo para poder dormir, ¿la razón? Jungkook, su pobre conejito llorón. Se sentía tan mal, sentía que estaba reviviendo lo de aquella vez, debía hacer algo si no quería perderlo a él también.

Se levantó de la cama y salió de su alcoba solo en pantalones de pijama y salió descalzo. Camino hasta las escaleras y las bajo en poco tiempo, después le dio la vuelta a estas y bajo a un pasillo que daba a otras pocas escaleras y otro corto pasillo, para luego seguir derecho y encontrarse cara a cara con la puerta de la habitación de su pequeño conejito. Se podían escuchar apenas unos sollozos y pequeños murmullos, su pecho dolió un poco.

Abrió la puerta lentamente y escuchó como Jungkook se removía en su cama fingiendo estar dormido. Paso y cerró tras de sí la puerta, no hizo un intento por hacer no ruido, de todas formas sus movimientos siempre son silenciosos. Se detuvo frente a la cama de Jungkook del lado contrario a donde estaba acostado y no perdió el tiempo para meterse bajo las cobijas junto a él menor quien se tensó inmediatamente.

—Se que estas despierto, conejito.— dijo mirando el techo mientras reposaba ambas manos sobre su abdomen.

Jungkook maldijo en su mente.

—Lo siento, papi.— dijo entrecortadamente y en un hilo de voz no pudiendo mantenerla debido al llanto.

Taehyung suspiro.

—Señor Kim. Ahorita no quiero follar.— dijo sonado cansado.

—Pero la señora Kim me dijo que...— el menor fue interrumpido por Kim, quien volteó a verle con el ceño fruncido.

—¿Quien te compró? ¿Ella o yo?— atacó tratando de no sonar tan brusco, Jungkook volteó a verle con los ojos rojizos.

—Usted.— murmuro bajito viendo fijamente a los ojos a Kim, quien enseguida de eso volteó la vista al frente sintiendo un pequeño dolor en su pecho.

—Entonces debes de obedecerme a mi.

—Claro, señor Kim.— susurro mientras veía el perfil de su papi, quien sonrió levemente y cerró los ojos suspirando.

—Así está mejor, conejito.— se quedaron en silencio unos segundos, unos que parecían ser eternos hasta que Kim decidió cortarlo atreviéndose a preguntar al menor su estado mientras volteaba a verle fijamente. —Quiero saber cómo estás, por favor... no me mientas, lo que menos quiero ahora es castigarte.— Jungkook suspiro nasalmente, iba a sincerarse.

—Mal.— dijo en un hilo de voz tratando de no quebrarse de nuevo.

Las lagrimas comenzaron a caer rápidamente otra vez, Taehyung se giró para estar acostado de costado frente al menor, llevo una de sus manos a las caderas de kook por encima de las cobijas y comenzó a repartir caricias ahí tratando de ser suave.

—Eso es. Dime más.— dijo con voz cálida.

—E-estoy muy mal, señor Kim.— jungkook llevó sus dos manos a su rostro para cubrirlo y finalmente llorar con fuerza y prepotencia, recordando con dolor cada uno de los golpes dados por aquella mujer de personalidad psicopata.

—Tranquilo, bebé. Desahógate.— Taehyung se acercó más su cuerpo al de Jungkook para finalmente abrazarlo y tratarle de dar calor al igual que confort.

Kim de sintió cómo un patan. Se sentía una mierda.

Jungkook se aferro al pecho desnudó de Kim, quien sentía a la perfección las lagrimas del menor sobre sus tonificados pectorales.

・ Comprado ・ taekook ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora