・ Comprado ・ taekook ©

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—¿Cariño?— dijo la voz femenina de su esposa.

—¿Mmh?— dijo entre sueños.

—¿Huele a quemado?— dijo con el corazón latiendo fuertemente contra su pecho.

—Debe ser por fuera.— dijo su esposo mientras se removía en el colchón.

El fuego llegó a expandirse hasta la ventana de su habitación, la cual inmediatamente se rompió por el calor ocasionando que la pareja se asustara.

—¡Ah!— gritaron ambos al mismo tiempo al ver el fuego invadir su ventana.

—¡Levántate!— gritó su esposo mientras se colocaba rápidamente de pie y se ponía sus pantuflas al mismo tiempo que la mujer iba a un mueble en su habitación en donde guardaba papeles importantes.

—¡Jungkook! ¡VE POR JUNGKOOK, YA!— grito su esposa desesperada mientras removía los papeles y documentos mientras el otro tomaba un par de pantuflas suyas y el suéter de su amada para cubrir al pequeño Jungkook.

Junghyun salió de su habitación para dirigirse a la de su hijo quien gritaba desesperadamente mientras veía como el fuego alcanzaba a su habitación y la madera de la casa se incendiaba rápidamente provocando que se sofocara con el humo y el calor intenso.

—¡PAPA! ¡PAPÁ!— grito desesperado por ayuda mientras corría a la puerta intentando abrirla.

—¡Jungkook, abre la puerta!— grito su padre golpeando fuertemente contra ella y girando la perilla con impotencia.

—¡AYUDAME! ¡PAPÁ LA CASA SE INCENDIA!— grito Jungkook mientras golpeaba la puerta aún sin poder abrirla.

Parecía sellada.

—¡ALÉJATE DE LA PUERTA, KOOK!— gritó su padre mientras escuchaba el crujir de su casa, la cual estaba a minutos de consumirse por las llamas del fuego, tenían poco tiempo.

Su padre se encaminó hacia atrás unos cuantos pasos y luego pateó la puerta cerca de la cerradura, no podía lograrlo.

—¡PAPÁ! ¡SÁCAME DE AQUÍ!— los gritos de súplica de Jungkook le dieron la fuerza suficiente para poder patear la puerta un poco más y terminar por empujarla con el costado de su cuerpo para finalmente abrirla.

—¡AH!— grito Jungkook al ver la madera de la puerta quebrarse y estrellarse contra la pared.

—Ya, tranquilo.— dijo su padre alcanzándolo con los brazos abiertos.

Rápidamente le colocó el suéter de su esposa YoungHye y su pantuflas, para después envolverlo en una manta, todo esto mientras Jungkook asustado y tembloroso preguntaba:

—¿M-mamá? ¿donde e-está mamá?— dijo desesperado mientras veía la puerta de su cuarto.

—Está en nuestra habitación sacando unos papeles.—

—¡Tienes que regresar por ella! ¡Papá!—

—Regresaré por ella luego, ella estará bien. Agarrame fuerte.— dijo su padre mientras lo cargaba contra su pecho y corrían contra el fuego y escombros cayendo en el segundo piso.

—¡Aquí estoy!— dijo su madre esquivando el fuego que había comenzado a penetrar la madera.

Para su desgracia una grande y pesada tabla de madera en llamas cayó del techo dejándola sin salida.