cap.27| Una visita poco usual

5.9K 689 55
                                    

♣♥♣

— Creo que es aquella rama de allá. No la veo aquí abajo — murmuró Embry, acto seguido presionando la pantalla en el lugar que mencionó antes y...una gran equis roja apareció indicando que había fallado — ¿pero qué...? ¡¿Por qué?! — gritó el chico estresado.

— La rama está aquí también Embry. Mira bien, casi nos haces perder al igual que antes — respondió Collin indignado, rodando los ojos en dirección de un confundido Embry.

— Creo que la que falta está en el perro — murmuró Seth, con sus ojos cafés fijos en la pantalla y un mohín de concentración en sus labios. Al instante la mirada embelesada de Embry estuvo fija en él, como la mayoría del tiempo.

No sabía qué estaba pasando allí, esperaba que sus amigos confiaran en él y se lo contaran, porque aveces en momentos así se sentía dejado de lado, fuera de lugar con algo que todos sabían menos él. Le dolía aquello o quizás estaba muy sensible con su reciente corazón roto.

— El perro...— murmuró volviendo su atención a la pantalla y dejó aquél asunto de lado, por ahora. Abrió sus ojos ampliamente cuando vio aquello que habían buscado por tanto tiempo — ¡oh, si! ¡El collar! — presionó el lugar, y apareció un pequeño círculo verde en ambas partes, indicando que era correcto. Las felicitaciones no tardaron en reflejarse en la pantalla y el nivel terminó, al fin. Chocó las palmas con Seth con una gran sonrisa por haberlo logrado juntos, escuchando las infantiles quejas de Embry por no haberlo conseguido él y las risas de Collin.

— Muy bien pequeño — miró a su izquierda, a Brady, que le daba una mirada cariñosa. Al instante sintió sus mejillas colorearse ¡¿qué rayos le pasaba a ese chico?! Desde que se exaltó aquél día por lo que había pasado con Edward, no se había separado de su lado. Le cuidaba en las rondas con la manada, lo mimaba, a cada rato estaba preguntándole que si estaba bien, trayéndole regalos... Joder, no comprendía nada. Y tenía que soportar las burlas de los demás que decían que él era la princesita mimada de la manada y debían protegerle.

Ahora todos estaban en plan protectores con él, y era incómodo, a veces divertido, pero en su mayoría incómodo. ¡Hasta Sam, por Dios! No lo sacaba a flote como los demás, pero sabía que lo hacía por dentro.

Y él notaba los intentos tan poco discretos de sus amigos por protegerlo de Edward.

En las rondas no lo dejaban ir al lado norte, donde quedaba la frontera con él territorio Cullen, cuando él insistía en el porqué solo decían que le gustaba ese lugar y cuando miraba a Sam en busca de respuestas éste sólo desviaba la mirada encogiéndose de hombros. Pero Brady era el menos discreto de todos ellos, hasta había intercambiado turnos con Paul para ser su compañero en las rondas. Y sus intentos por hacerlo reír eran muy evidentes, sin embargo le alejaban de los pensamientos depresivos que lo invadían en ocasiones.

Sinceramente, no quería pensar que el chico tuviera sentimientos por él, eso si que sería malo, porque él no quería romperle el corazón, le dolería verlo sufriendo por su rechazo, porque es obvio que él no podría corresponder sus sentimientos. No porque no le gustaran los chicos, esa era una excusa que no podría darle, sino porque estaba tan enamorado de Edward Cullen que dolía.

Le dio una sonrisa pequeña y desvió sus ojos cuando se percató que lo estuvo mirando fijamente por mucho tiempo, y él le estaba dando una mirada demasiado intensa para ir dirigida solo a un amigo.

Miro a los otros tres chicos reír viendo la pantalla, habían estado jugando la mayor parte de la tarde  en la tablet de Collin a 'encuentra las diferencias' era muy entretenido.

— Jacob...— desvió la mirada a la puerta de su habitación donde Paul estaba parado con solo un pantalón corto y el dorso descubierto, mirándolo dubitativo.

Entre el Crepúsculo y el Amanecer [Edward x Jacob]Where stories live. Discover now