El hospital || Infinite.

16.- "Está aquí"

SungJong se sintió observado todo el trayecto hacia el hospital, pero a pesar de que miraba disimuladamente a todos lados, no podía ver a nadie que le pareciera sospechoso.

De cualquier forma, esto podía ser producto del cansancio, o eso pensaba él. Ya quería poder entrar a la consulta del estúpido psiquiatra para librarse del pesar de sus párpados y esas ojeras, ya se había comprado con un panda y demonios, solo le faltaba llamarse Po.

De todos modos, estaba feliz de poder haber concretado una cita. De no ser por MyungSoo, seguro ya estaría muerto por el sueño, pero gracias al cielo que su vecino era amigo del psiquiatra mal nacido, sino, probablemente tendría que haber vendido su riñón para pagar la pobre hora en la que estaría allí dentro.

Cuando anunció su llegada en recepción, pudo ver una leve sombra esconderse por el pasillo. Decidió no tomarle importancia, atribuyendo todo a la falta de sueño. Por suerte todavía conservaba su teléfono, así que se colocó sus audífonos y escuchó música a un volumen prudente para no perder su turno. Finalmente fue llamado, y prácticamente saltó de su lugar para dar un par de pasos hasta entrar a la oficina del psiquiatra.

Cuando entró allí, se encontró cara a cara con el más alto, él lo miraba con un rostro altanero y con su cabeza medianamente ladeada.

"Tome asiento, joven Lee" Dijo el doctor, y SungJong obedeció, sentándose en la silla que estaba del otro lado del escritorio.

SungYeol sacó un par de papeles y rellenó los datos generales de cada paciente, como su nombre, su edad, entre otras cosas.

"Bien" SungYeol volvió a hablar, sonriendo de manera burlona. "Supongo que ya sé por qué estás aquí ¿viste otro fantas-?"

"Ahórrese sus comentarios, doctor" Dijo SungJong, alzando la palma de su mano, indicándole al otro que se detuviera. "Vine porque no puedo dormir, necesito un somnífero o algo así. Ahora, si fuera tan amable de darme una receta para poder comprar las pu-"

SungJong se detuvo abruptamente cuando una figura femenina apareció junto al doctor, estaba de brazos cruzados y sonreía amablemente mientras lo observaba. Los ojos del castaño se abrieron, aunque el resto de su rostro no cambió ninguna expresión. SungYeol se dió cuenta del cambio en el menor, porque se había detenido y parecía estar observando algo detrás de él, así que se dio vuelta y, como esperaba, no logró ver nada.

"Esquizofrenia, lo que me temía" Dijo el médico, una vez que se volvió. Miró a SungJong y negó con la cabeza.

"¿Qué?" Dijo el menor, volviendo a prestar atención.

"Tendremos que internarlo, joven Lee, al menos hasta que esté estable otra vez" El psiquiatra tomó una pequeña libreta y se dedicó a buscar el número del equipo paramédico para que se llevaran al castaño.

"¿Internarme? ¡No estoy loco! Podré estar un poco zafado de la cabeza pero es porque veo a estos malditos fantasmas todo el día. Solo dame la maldita pastilla para dormir y me iré" El menor elevó la voz, mirando hacia la fantasma como pidiéndole ayuda.

"No puedes dejar que te lleven, niñito, te necesito" Dijo ella, entrando en estado de pánico, algo muy loco si recordamos que ella solo era un anima.

SungYeol ignoró el último comentario del chico, y claro, no escuchó las palabras de la joven fantasma porque no tenía el mismo don que el Lee menor. Sin darle mucha importancia al asunto, él tomó el teléfono.

La rubia tuvo un plan.

"¡Soy su hermana!" Medio gritó. "¡Háblale sobre mí, rápido!"

SungYeol comenzó a marcar el teléfono. Cuando la llamada entró, empezó a esperar a que contestaran.

Un tono.

"¿De casualidad tenías una hermana de cabello rubio y tatuajes en sus brazos?" Dijo de pronto SungJong, agitado, luego de levantarse de la silla de un golpe.

Dos tonos.

SungYeol se quedó mudo un segundo.

"¿Qué diablos estás diciendo?" Finalmente dijo.

Tres tonos.

SungJong se quedaba un momento en silencio, mirando hacia atrás del médico, para luego volver sus ojos a él.

"Le gustaba vestir ropa de colores oscuros, y cantar cuando tocabas la guitarra"

Cuatro tonos.

"¡Para ya, estás desvariando!" SungYeol estaba algo enojado, se podía notar en su voz, y al igual que el contrario, se levantó de la silla, enfrentándolo.

Cinco tonos.

La rubia decía algunas palabras, y SungJong las repetía.

"Tenía 16 años cuando desapareció y su nombre era Moon JiByul, hija del segundo matrimonio de tu padre"

"¡Cállate!" Furioso, el doctor Lee estiró su mano y volteó el rostro de SungJong de una cachetada. "¿¡Cómo demonios sabes sobre ella!?

Seis tonos.

"¡Respóndeme!"

"¡Porque ella está aquí!"

Siete tonos.

"Moon JiByul, tu hermana... A quien secuestraron, está aquí"

Silencio, solo hubo silencio.

"¿Hola?" Se escuchó desde el teléfono.

SungYeol se puso pálido, su mandíbula tensa y sus puños estaban apretados. No podía creer lo que había oído.

"Tienes que creerme, por favor" Suplicó el chico, desesperado, casi al borde de las lágrimas.

En el teléfono se escuchaba que todavía había alguien tras él intercomunicador, preguntando si había alguien allí, y que le respondieran, así pasaron unos cuantos segundos, escuchándose solo aquella voz y las reparaciones de ambos.

Finalmente, SungYeol colgó el teléfono.

✨

¡Hola, Munnies!

Volví fkdkfkdk. Me costó un poco ponerme al día pero creo que voy muy bien, así que me escapé de mis responsabilidades un poquito para traerles está actualización.

Espero que les haya gustado mucho.

Los adoro mucho, mis Munnies beios, lindos y preciosooooos 💗

Eso es todo, espero que estén muy bien y que tengan un lindo día😞💗

Cambio y fuera~~