6: Sensaciones.

1.2K 217 222
                                    

  

   _ ¿Por qué dijiste que tenías que marcharte a la una y media? ¿Qué pasa con el trabajo que debías hacer sin falta mañana por la mañana?

   _ Lo haré en el avión. No lo olvides: llevaré mi portátil de alto ejecutivo.

   _ Oh, por Dios...

   _ ¿Y qué demonios se supone que iba a decir? Tú deberías haberme dicho a qué hora sale el avión. ¡Llevabas horas quejándote de que no podrías volver a casa hoy mismo! Y por eso pensé que te apetecería quedarte.

   _ ¡Pues no! ¿No era evidente?

   _ También pensé que tal vez que preocupase el hecho de obligarme a cambiar de planes.

   _ ¡Claro que me preocupaba! ¡Supuse que harías cualquier cosa con tal de marcharte!

   _ Tranquilizate. Al finde cuentas, era lo más sensato. Tu madre se hubiera puesto histérica.

   _ ¡Eso no ha sido más que un chantaje emocional!

   _ No del todo.

   De acuerdo, no del todo. Mamá siempre se quedaba preocupada hasta recibir el mensaje: "Ya estoy en casa sano y salvo".

   _ Y al menos, ahora te podrás tomar una copa. A mí también me vendría de lujo.

   _ ¿Tú estás de broma o qué? He estado a punto de cagarla. Si ahora me pongo fino de mojitos...

   _ No te he dicho que te emborraches. Solo una copa.

   _ Oh... _ murmuré una versión menos educada del "déjame en paz".

   _ Te he oído. ¿A ti te parece que quiero quedarme tirado en medio de Okutama?_ preguntó de mal humor_ Mañana tengo una cita para almorzar.

   _ ¿Y entonces por qué no me apoyaste? Era imposible que me saliera con la mía y si me seguía resistiendo, habría terminado por parecer sospechoso.

   _ Si de veras estabas empeñado en que nos marchásemos, tendrías que haberles plantado cara.

   _ Por favor, no me lo eches en cara. Tengo un dolor de cabeza tremendo. Estoy agotado. Llevo desde las cinco y media de la mañana despierto...

   _ Pues entonces hicimos bien en quedarnos entonces.

   No le faltaba razón. No siquiera tenia una camiseta para dormir, además cuando duermo me muevo mucho y me destapo. Algunas veces adopto  una postura bastante infantil, con la cara enterrada en la almohada y el culo en pompa. Una vez Dabi me pilló durmiendo así y me despertó con una fuerte palmada y, el muy hdp, se echó a reír.

   _ Lo siento, no estaba preparado para compartir habitación.

   _ Yo tampoco. ¿En serio te parece no mal?

   Empezaba a darme cuenta que era un poco exagerada mi reacción. Al fin de cuentas, las camas eran individuales.

   _ Supongo que no. A veces hablo en sueños, espero que no te moleste.

   _ Estoy agotado. Seguro que caigo rendido. ¿Por qué no te das un baño y te relajas? Y te traigo una copa también.

   _ Sí. Un mojito bien cargado.

   _ Enseguida vuelvo.

   Me dejé caer en la cama. Los desastres que tanto había temido no llegaron a materializarse, el destino tenía planeado otra cosa.

Please, be my boyfriend.Where stories live. Discover now