El Fénix [W]

El Fénix [Wigetta] #20

Aquel ‘’Acepto’’ había sido el mechero que prendió la mecha, Guillermo se encontraba feliz de saber que el amor de su vida había aceptado su propuesta de matrimonio. Samuel por otro lado estaba nervioso de no haberse equivocado al dar el acepto a Guillermo. Ambos estaban emocionado pero también asustados, compartir tu vida con otra persona no es una tarea fácil, mucho menos para dos hombres que se aman y a veces tienen sus diferencias.

Guillermo en su mente se encontraba en una locura de imaginación, que si donde será la boda, que darán de comer, como serán sus trajes. Guillermo tenía una presupuesto guardado, el que le dio su padre para casarse con la mentada ‘’chica’’.

Hay problemas con la carencia de dinero y la falta de apoyo hacia estas dos personas… ¿Quiénes serían los invitados? Samuel por su lado no conoce a su familia y solo tenía a su mamá. Guillermo tenía a toda su familia, pero era obvio que su papá al enterarse de esto trataría de detener la boda.

Ninguno de los dos tenía amigos fieles, Samuel tal vez podía considerar al mesero que quiso ligar con el cuándo Samuel y Guillermo se habían molestado.

Ambos tenía planes para todo esto, sabían que debían organizar todo a la perfección, Samuel por un lado no tenía trabajo y tampoco iba a la escuela, él podía organizar todo desde el sofá y planear casi todo a la perfección.

—Joder Samuel, quiero que un grupo toque en nuestra boda —molestó Guillermo.

—Guillermo, vamos a ver… apenas hace unos 15 minutos que te he dicho que acepto y ya estas empeñándote  con cosas que tal vez y no podamos pagar —regañó Samuel.

—Pero Samuel, ¿apoco no estaría padre que una banda tocara en nuestra boda? —preguntó Guillermo haciendo pucheros sentados en la banca donde el sol comenzaba a molestar.

Samuel se levantó de la banca para moverse a la sombra, el sol era molesto y digamos que a Samuel no le agrada para nada el sol.

—¿A dónde vas? —pregunto Guillermo.

—A un lugar donde no higa sol, supongo que a este árbol —contesto Samuel.

Guillermo levanto su trasero de la banca mientras se dirigía a Samuel, sus ojos trasmitían ternura y sus mejillas se veían adorables.

—Samuel…

—Guillermo…

—No ya, para. ¿Quieres que le digamos a mi papá lo nuestro? —preguntó Guillermo.

Esa pregunta había llegado sorpresivamente a Samuel, este solo hiso su cabeza hacia atrás y abrió bien los ojos.

—¿A tu papá? —dudo Samuel—. Esa no es decisión mía Guillermo, el que debe decirle eres tú.

—Pero… Samuel en algún momento debo decirle —contesto Guillermo mirando a los ojos a Samuel.

—En algún momento debes decirle, él debe saber nuestra relación.

Guillermo se sentía presionado con el tema de su padre, él sabía perfectamente que su papá se opondría a todo esto de la relación de Guillermo y Samuel, hasta le quitaría el dinero que le dio.

El padre de Guillermo es el típico padre de negocios con mucho trabajo por delante, es frio y no perdona un error, mucho menos que su hijo es homosexual.

Su padre vivía en España, la última vez que lo vio Guillermo fue hace un año después de mudarse a Los Ángeles para estudiar.

—Samuel —dijo directamente Guillermo.

—¿Mande? —preguntó Samuel.

—¿Quieres venir conmigo a España? —pregunto Guillermo.

—¡Con que dinero! —exclamó Samuel—, No tenemos ni un solo centavo, tenemos lo de la boda, lo poco que te dio tu padre, no podremos pagar dos boletos de viaje hacia España.

Guillermo respiro profundo.

—Si tengo dinero… —dijo Guillermo—. Soy un niño de papi, nunca lo demostré porque tal vez no te gustaría vivir con una persona que derroche dinero por todos lados, la cena, el aniño ¡lo page yo! No mi padre —explicó Guillermo.

La cara de Samuel estaba de impactado, cuatro meses viviendo con un riquillo y nunca lo sospecho.

—¡Tienes dinero! —exclamó Samuel—. ¿Por qué nunca me dijiste?

—Te acabo de decir que pensarías que era un niño de papi y que me gustaba presumir mi dinero —aclaró Guillermo.

—¡Entonces nos vamos a España! —exclamó Samuel.

—¡Claro! —contestó Guillermo.

—¿Le dirás a tu padre lo de nosotros?

—Sí…

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Me lee bastantes personas y solo son como 15-20 personas que están activas, ¿Por qué se hacen los fantasmas? Tan siquiera dejen un comentario de que si esta buena la novela, que no les gusta o que les gusta… y bueno, también quería decirles que el día de ayer llegamos a los 4K (4 mil leídos) eso me pone feliz, porque mucha gente está comenzándola a leer y eso me agrada. Tengo otra sorpresita, he decidido que creare otro Fanfic, tengo más o menos una idea de lo que será esta novela… Solo eso quería decirles. ¡Feliz fin de semana!