Mi Gato - aizawa x deku

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A donde decías que vamos? - izuku caminaba por las calles de la ciudad en su forma híbrida.

Vestía unos pantalones cortos que le tapaban hasta las pantorrillas junto con un gran suéter que parecía vestido.

Al hospital, ahí se encuentra una niña que ha sido muy lastimada - aizawa volteaba por todos lados observando con una mirada gélida a esas personas que miraban a su lindo gatito.

Estas seguro que debo ir? - no se sentía muy cómodo caminar por las calles en esa forma.

Todo era muy extraño para él, era muy distinto a cuando paseaba por la ciudad en su forma animal.

Estarás bien, acuérdate que recovery dijo que debías de salir - gruñó por lo bajo al recordar las palabras de la mujer

Deja de monopolizarlo

No veía el inconveniente en siempre tenerlo a su lado, después de todo izuku seguía siendo un gato.

Se maldecía el haberle dicho a esa mujer de su pareja, pues ahora debía de combatir con esos hombres lujuriosos que observaban a su gatito como si se lo comieran con la mirada

Izuku abrazo el brazo de su pareja, su cola danzaba de lado a lado algo incómodo por las miradas extrañas de las personas.

Sintió como aquel brazo se zafo de su agarre y ahora abrazaba su cintura, algo que le encanto, ya que logró tranquilizarlo

Pasaron varios minutos hasta que llegaron a ese gran edificio blanco, donde muchas personas salían y entraban.

Izuku abrazo la cintura de aizawa, asustado por todo el movimiento dentro del lugar, además de ver a todos esos humanos con esas batas blancas con esa cosa colgada en sus cuellos.

Shota - susurro comenzando a temblar, enterró sus garras en la ropa de su pareja por el miedo que sentía, quería correr y regresar a su hogar, ese lugar no le gustaba.

El azabache se detuvo frente a dos personas, donde una de ellas llamó la atención del peliverde.

Era un gato.

O eso pensaba, pues tenía el físico de un humano pero con cara de gato.

Movió sus orejas fascinado por esa persona, pero aun así se mantenía aferrado a las prendas del profesor.

Izuku puedes quedarte aquí por unos minutos? - se zafo del agarre acariciando los brazos de su pareja - voy rápido, no me tardó

Izuku lo observo con pequeñas lágrimas en sus ojos, quería detenerlo pero no lo logro - Shota - susurro con tristeza al ver como su pareja se iba con ese hombre de abrigo café.

Bajo sus orejas junto con su cola, su cuerpo temblaba por los ruidos extraños que lograba escuchar, pequeños sollozos comenzaron a salir.

Tenía mucho miedo, todo eso era nuevo para él, se sentía desprotegido.

Oye -

Izuku dio un pequeño brinco, miró a ese gato humanoide que le sonreía, no pudo evitar enfocar su mirada a ese collar con esa cosa redonda de color dorado.

Te encuentras bien? -

Izuku no respondió, en cambio sus pupilas se dilataron y sus orejas se movieron, en verdad quería esa cosa redonda.

Sansa entendió el comportamiento de ese chico, sonrió ante la inocencia que emanaba, era obvio que no podía controlar sus instintos.

Se quitó su collar, lo alzó quedando frente rostro del chico, y entonces lo agitó.