Capítulo Final

11.8K 715 70
                                    

Narra Ignis

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Narra Ignis

Dos meses han pasado desde que supe que estoy embarazada. Estuve todo un mes burlándome de Edward junto con Jasper y Emmet por que se desmayó.

Según Edward, no puedo hacer ningún esfuerzo y ni siquiera me deja aparecer comida. Aunque lo hago a escondidas.

El lado bueno, es que este embarazo durará como el de un humano. Según mi padre, debo beber sangre dos veces al mes. Los Cullen no se explicaron cómo es que un vampiro puede procrear y mi padre les explicó sobre los niños mitad mortal y mitad inmortal. Claro que yo tenía conocimiento sobre estos híbridos, si embargo, no creí que yo, siendo mitad ángel y mitad demonio, podría quedar embarazada.

Aunque era de suponerse, ya que mi padre pudo tener a éste ser tan magnífico que soy, siendo un ángel, caído, pero a fin de cuentas, ángel.

Dijo que nuestro hijo o hija, será mitad demonio/vampiro y mitad ángel.

Sin duda es algo sorprendente y puedo asegurar que el poder de este ser que viene, será casi igual al mío.

Por otra parte, Dan murió. No llegué a tiempo para salvar su alma y poder ayudarlo, y ahora está en el infierno. A quien sí pude salvar es a Remiel, la hermana de mi padre, que incluso estuvo en la batalla contra Miguel.

Mi padre ganó, y ahora tiene que subir al cielo para poder ocupar el lugar de Dios. Eso sin duda es sorprendente, de él rey del infierno al todopoderoso Dios.

Remiel ahora se queda conmigo y su carácter fuerte y de batalla le ha ayudado para estrechar lazos con los Cullen, sobretodo con Rosalie y Jasper.

—¿Estás lista? —pregunta Edward abrazándome por la cintura, justo cuando termino de cerrar la maleta.

En las últimas tres semanas ha estado insistiendo en que vayamos a ver a mi padre, según él, porque cuando asuma el papel de Dios, ya no podré verlo. De cierta manera tiene razón, al ser la hija del Diablo, nunca había podido llegar a la ciudad de plata, pero tal vez ahora que será el gran señor de los cielos, tal vez pueda por fin cruzar las puertas del cielo.

—Ya te he dicho que yo siempre estoy lista —le respondo a Edward y me volteo para darle un beso.

—¡Es hora de irnos! —dice Alice emocionada entrando a la habitación—. Remi irá con nosotros —trato de leer su mente, pero sucede lo mismo que en éstas últimas semanas. Solo cantan o piensan cosas sin sentido. Miro a Remiel con mis cejas alzadas. Es la primera vez que la veo portando un vestido, aunque es largo y sencillo, le queda bien.

Mi compañera Demonio «Edward Cullen» Where stories live. Discover now