Shu Kurenai

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Shu sería el tipo de novio que. . .

. . . Cocinaría los platillos que tú quisieras de su spaghetti especial.

- ¡Shuuu! ¡Por faaaa! - pataleó en el suelo como una niña pequeña, sacando una risa leve del albino viéndola desde las escaleras de su casa - ¡Oh vamos! No te quedes solo viéndome desde allá, ¡cocina para mí!

- _____-chan, en el restaurante te comiste cinco platos. . . completos. . . sin dejar ni una mancha. . . - comentó divertido.

- Pero eso fue hace mucho tiempo. - alegaste.

- Han pasado menos de dos horas desde eso. - dijo viendo el reloj en su muñeca. Nuevamente comenzaste a llorar en el sillón; tomaste un cojín de este y lo aplastaste contra tu cara, tenias hambre - De acuerdo. ¿Qué quieres que cocine? - cuestionó sonriente bajando las escaleras. Llegó a la cocina y se puso su mandil.

- ¡ESPAGUETTI A LA CARBONARA! - gritaste a todo pulmón, con estrellitas en tus ojos - Es tu especialidad, Shu.

- Entiendo. - sacó un sartén y le vertió aceite sobre el fuego de la estufa - Espera un poco a que esté listo.

- Veré cómo lo haces. Quiero aprender a cocinar. - tomaste asiento en la barra frente a la estufa, viendo cómo sus orbes rojos analizaban con cuidado cada detalle de los ingredientes para el platillo - Me encanta verte cocinar así, te ves muy sexy. - dijiste mordiendo tu labio inferior.

- Shu rió viéndote - ¿Piensas que me veo sexy? - levantó una ceja divertido de tu reciente confesión - No lo sabía.

- Pero ya en serio, no quiero que solo tú cocines para ambos; al menos debería aprender a cocinar una sopa o algo vital.

- Ten mucho cuidado, ¿si? No queremos que termine como el incidente anterior.

- No me lo recuerdes. - rascaste tu nuca nerviosa recordando su anterior departamento en llamas - Oye Shu. - recibiste un 'hmm' por respuesta, ya que mezclaba con precaución en el sartén - ¿Tú me quieres mucho?

Tu pregunta lo tomó por sorpresa, ocasionando que un poco de aceite le cayera y se quemara.

- ¡Shu! - fuiste por un trapo húmedo y lo pusiste sobre el área afectada - ¿Estás bien?

- ¿_____, a qué viene la pregunta? - preguntó como una voz seria.

- ¿Eh? B-bueno. . . - rascaste tu mejilla nerviosa - es que, ya sabes que soy muy comelona, y hay veces en las que actúo como una niña rara e infantil. No sé, creo que. . . mereces a una chica más. . . ¿normal? Aparte-

Sentiste sus labios estampándose contra los tuyos. Se movían en un vaivén suave, dándote la sensación de estar danzando entre las nubes. Se separaron recuperando el aliento. Shu juntó su frente con la tuya.

- No se te ocurra volver a decir algo así, ¿entiendes?

- Pero-

- Otro beso te interrumpió - Me enamoré de ti por el tipo de chica que eres; no importa que hagas rabietas a cualquier hora del día, o que te acabes la despensa todos los días: yo te amo. Eres única, y eso es algo que me encanta de ti, _____.

- Shu, el-

- No, déjame terminar. - puso una mano sobre tu boca impidiéndote hablar - ¿Recuerdas que nuestro primer encuentro fue en una competencia culinaria? Tú eras la juez y yo el participante; aún recuerdo tus ojos inigualables entre toda la multitud, y tu cabello escapándose entre ese gorro que traías puesto.

- El-

- Déjame terminar. Deberías de apreciarte más a ti misma, porque si ni tú lo haces, tampoco podré hacerlo yo. Quiero que nuestra relación salga adelante a pesar de cualquier contratiempo o desafío que se nos aparezca en el camino.

- Se está-

- A pesar de todo el spaguetti que deba hacerte y las veces que deba mimarte después de que te enojes, te amo.

- ¡Shu, EL SPAGUETTI SE QUEMA!

- Se levantó de un salto hacia la cocina - ¡¿POR QUÉ NO ME DIJISTE?!

- ¡ESO INTENTANA HACER! Ah, y yo también te amo. - lo besaste dulcemente - Ahora sírveme que tengo hambre.

Espero que les haya gustado. Recuerden votar y comentar.

Sam fuera.

PD: Husbando de un juego nuevo que acabo de instalar hace poco.

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