Tenemos una eternidad para descubrirlo [Hosie]

¿Café? Café.

Esa noche Hope y Josie durmieron en la habitación de Lizzie.

Aunque la rubia había dicho que estaba bien, las chicas sabían que solo estaba aparentando para que no se preocupasen por ella, así que decidieron dormir en su habitación visto que aún tenía la cama extra.

Cuando Hope se despertó por la mañana, notó que Josie no estaba a su lado, lo que la extrañó. Su corazón se aceleró automáticamente y solo volvió a la normalidad cuando la vio durmiendo con Lizzie en la otra cama.

Miró el reloj y, al darse cuenta de que eran pasadas las siete y cuarto, decidió dejar una nota e ir a buscar desayuno para las tres.

Cuando volvió, junto con tres croissants, tres donuts, tres cafés y una bolsa de sangre, se encontró a su novia de pie mirando por la ventana.

- Hey - dijo susurrando antes de dejar la comida encima de la cama y abrazar a su novia por detrás.

- Buenos días - respondió la hereje dándose la vuelta para abrazar bien a su novia -. ¿Qué has cogido?

- Donuts, croissants, sangre y lo indispensable si no quiero que Lizzie me eche mal de ojo.

- ¿Café?

- Café - respondió la tríbrida separándose de su novia -. He visto que me has cambiado por Lizzie esta noche.

- Sí, lo siento, es que notaba como la ansiedad estaba a punto de sobrepasarla y sé que dormir conmigo la ayuda a calmarse.

- No tienes que disculparte por cuidar de tu hermana - contestó con una sonrisa -. Y en realidad ha sido cómodo tener la cama para mi sola - bromeó Hope.

- Si tanto te gusta puedo volver a mudarme - la picó Josie.

- ¿Eso harías? - respondió la tríbrida levantando una ceja y acercándose aún más a su novia.

- ¿Podéis dejar de hacer lo que sea eso y darme mi café? - preguntó Lizzie con la cabeza enterrada bajo el cojín.

Las tres chicas comieron en silencio por los siguientes diez minutos, escuchando cómo los pasillos empezaban a llenarse de gente y de ruido a medida que la hora de empezar las clases se acercaba. 

Por suerte para ellas, Caroline las había excusado de los siguientes días de clase ya que sabía que no podrían concentrarse sabiendo que su tío sociópata estaba planeando como matarlas.

Cuando los pasillos se calmaron y todo volvió a quedar en silencio, Lizzie habló.

- Hope, ¿puedes dejarme a solas con Josie un momento?

- Claro - respondió la tríbrida -. Le prometí a Sam que lo llamaría antes de que entrase a trabajar, así que si me necesitáis estaré en el despacho de vuestro padre.

Hope dio un beso rápido a Josie y, en cuanto cerró la puerta, Lizzie cogió las manos de su hermana y la miró a los ojos.

- Sé que anoche dije que estaba bien, pero gracias por quedarte conmigo.

- Siempre que lo necesites, Liz.

- ¿Puedo preguntarte algo? - Josie asintió - Qué... ¿Qué sentiste al morir?

Josie se quedó pensativa unos segundos, intentando recordar la experiencia.

- Creo que no sentí nada - respondió finalmente -. Solo noté una mano girando mi cabeza hacia la derecha y luego desperté dentro de Malivore. Entremedias... es como si estuviese dormida. ¿Por qué lo preguntas?

- Solo... para saber que me espera cuando Kai me mate.

- Lizzie - dijo la hereje apretando las manos de su hermana con más fuerza -, todo estará bien, ¿de acuerdo? Hope y yo no vamos a dejar que se acerque a ti.