Amargo o Dulce?

16- Te quiero

De nuevo se encontraban haciendo patullaje, por suerte Leonardo no había cambiado las órdenes de Splinter, así que el de rojo y él aún hacían equipo.

Raphael estaba arto de tener que soportar el silencio del líder, por un tiempo se había resignado a no intentar charlar, pero esa noche tenía planes, no le importaba si las cosas saldrían bien o mal.

Corrían sobre los techos y como de costumbre el lider iba un par de pasos adelante, Raphael después de "analizar" las cosas: se adelantó un paso más del líder y se detuvo frente a él.
Cuándo el mayor intentó rodearlo el temperamental lo aventó a la pared más cercana y pegó un puñetazo sobre ella intentando infundirle temor a su hermano para que no intentará escapar, cosa que si logro.

El lider lo miró molesto, no entendía lo que ocurría pero tampoco le interesaba saberlo, bajó la mirada hasta el hombro de su hermano y al ver las marcas de sus dientes en aquella delicada piel: la culpa regresó, intentó escabullirse hacia el otro lado pero el menor dió otro puñetazo a la pared dejándolo acorralado entre sus brazos, él, y la pared.

Leonardo al ver la situación en la que se encontraba lo único que podía pensar era que sería golpeado brutalmente por su hermano o que las cosas terminarían igual que como ocurríeron en el baño, así que asustado y esperando cualquiera de sus dos opciones: bajó la mirada.

Raph— Tenemos que hablar.

Al escuchar esas palabras lo miró a los ojos confundido, Raphael no era de hablar, y el lider tenía una idea del tema que tocaría aquel y no le gustaba ni tantito— No es el momento.

Raph— Tenemos que hablar! —dijó con un tono molesto cerca del oído del mayor, logrando intimidarlo.

Leo— De que quieres hablar? —preguntó ya que al parecer no le quedaba otra opción.

Raph— Quiero entenderte —contestó mirándolo a los ojos.

Leo— Entender qué?

Raph— Entender porqué eres así conmigo! Acaso eres bipolar?! Sé que recuerdas cuando éramos unos niños inseparables ¿Porqué dejamos de serlo? ¿Porqué parece que me odias desde entonces? Qué hice?

Leo— Agh Raphael no seas exagerado —contestó intentando tomarle poca importancia contal de abandonar el tema.

Raph— Y eso no es todo! De la nada... —bajó la mirada al piso y sus mejillas se pintaron de un rojo pronunciado— Hicimos lo que hicimos en el baño... —susurró— Y ahora me odias más que nunca?!! Ya dímelo Leonardo ¿Cuál es tu problema?

Leo— Hicimos lo que hicimos en el baño?... "Hicimos?!!" No me está culpando! —pensó— Tu... No me odias por lo que hice?... —preguntó entre murmullos con la mirada baja.

Raph— ...

¿Cómo contestaría esa pregunta? No podía simplemente decir "Claro que no te odio, de echo me encantó lo que me hiciste ese dia"
Se quedó sin aliento cuando el mayor con la cabeza baja: levantó la mirada hasta chocar con la suya y esperaba atento su respuesta.

Raph— Y-yo... Emm... ¿Cómo podría odiarte?! Eres mi hermano —al escuchar sus propias palabras y ver la cara de remordimiento del lider: deseaba haber pensado mejor sus palabras antes de hablar— A lo que me refiero es...

Leo— Entiendo Raph... —interrumpió— Somos hermanos... —susurró y sonrió intentando ocultar que estaba apunto de romper en llanto— Déjame ir si? Debemos seguir vigilando.

Raph— No Leo, eso no es lo que quise decir... Yo...

Su boca no podía articular las palabras ¿Y cómo? si jamás en su vida había dicho un tonto "Te amo" ni un "Te quiero", "Me gustas" etc.
Comenzó a desesperarse cuando el lider intentó apartar sus manos de la pared para poder escapar— Leo — dijó serio y claro llamando la atención de su hermano, y cuándo aquel giró la cabeza para verlo: Raphael le plantó un beso en la boca: un beso simple, de esos inocentes que das en tu primer beso; y aunque no duró más de un par de segundos: para el lider fue eterno.

Al separarse del beso Leonardo estaba anonadado intentando no explotar por la enorme alegría que se acumulaba en su interior, no sabía si se encontraba soñando o era cierto lo que ocurría.

Rapha— Entiendes lo que trato de decir?!

Leo— No... —contestó tocándose los labios.

Raph— Agh maldición Leonardo!... —bufó sonrojado— Yo... T-te quiero... —habló y dejó caer sus manos liberando al lider.

Leo— Me quieres?... —preguntó incrédulo. No estaba seguro si su hermano entendía la forma en como él lo quería, y no sabía si hablaban del mismo querer— Me quieres como hermanos que somos ¿no?

Raph— Qué?! No! Qué clase de hermanos se besan en la boca! Además... Tu y yo ni siquiera somos de la misma madre.

Leo— Y... ¿Cómo estás tan seguro de eso?

Raph— Mírame! Me Paresco a ti? —preguntó extendiendo los brazos para que el mayor lo observara— No ¿verdad? Hasta soy más verde que tú —susurró dándole un golpecito en el hombro al de cinta azul.

Era cierto, las posibilidades de que fueran hermanos era baja, pero al lider lo que le importaba era saber que ocurriría entre el temperamental y él
¿Se olvidarían de todo y fingirian que nada pasó? ¿Cuál era el pan del menor?— Entonces... Tu me quieres...

El menor simplemente asintió como niño pequeño esperando a oír lo mismo de su parte.

Leo— Y... Qué haremos ahora??

El de cinta roja lo miró un poco molesto por no haber resibido la respuesta que quería pero le agradó que su hermano preguntara— Bueno, suponiendo que tú sientes lo mismo por mí —dijó resaltando más esas palabras y entrelazando sus dedos con los de aquel, a lo cual el mayor no se opuso y asintió feliz rapinamente— No creo que haya motivos para seguirlo ocultando ¿o si?

Leo— ... Tal vez entre nosotros no, pero nadie más debe enterarse —contestó después de haberlo meditado un poco.

Raph— Está bien —sonrió.
Pudo notar la alegría inmensa de su hermano y soltó sus manos esperando su reacción, pero el lider lo único que hizo fue suspirar mientras lo miraba a los ojos.

Leo— Bueno, por ahora solo hay que terminar el patrullaje —ordenó siguiendo su camino y dejando al temperamental atrás contal de que no viera su enorme sonrisa.
Pudo sentir la mano del menor sobre su muñeca intentando detenerlo, así que se detuvo y fijó su atención en aquel.

Raph— Leo, ya no tienes que seguir reprimiendote, y porfavor no vuelvas a ignorarme y dejarme atras.

Los hermosos ojos verdes de su hermano denotaban tristeza, tal vez jamás había visto esa mirada en él ¿Tanto sufrió por culpa de su rechazo?— L-lo siento Raph —susurró y sujetó de la mano al menor.

Se soltaron las manos y sonriendose mutuamente corríeron intentando ver quién de los dos lo hacía más rápido, pero está vez no competían como solían hacerlo, lo único que le importaba era divertirse juntos, al fin juntos...

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:l les dije que la lluvia me pone cursi xP
Había terminado el cap desde en la tarde pero hasta ahora tuve tiempo de publicarlo 'xD jsjsjs.
Nos leemos pronto!! ✌️🖖