XXV

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MARATÓN:(2/5)

Un mes, un mes había pasado desde que JooHyun había llegado al castillo, y desde que se dieron cuenta que YongSun estaba en la dulce espera.

Durante ese mes no habían pasado tantas cosas. La reina de Goyang volvió a su reino una semana después de que llegara JooHyun, pero WheeIn estaba segura de que volvería, pues tenía que volver a encontrarse con cierta Omega pelinaranja que había robado su total atención durante su estancia allí en el castillo de Seúl.

JooHyun ahora estaba muy apegado a SeulGi y casi no se quería separar de ella, pues dos semanas separadas fueron una eternidad para ambas, además de que SeulGi estaba cada vez más cerca de tener el parto, pues ya tenía cinco meses y ya casi estaba por el sexto mes.

MoonByul era más protectora con YongSun desde que se enteró de su embarazo, pues ella estaba preocupada de que le sucediera como SeulGi y que estuviera en riesgo también. La Alfa por lo general le pedía a WooSeok que escoltara a YongSun si la Omega quería salir, pues no se sabía cuándo era que Busan atacara.

Podía ser que la guerra comenzó hace poco más de un mes, pero el reino de Busan aún no daba ningún tipo de ataque a Seúl; por otro lado, Daegu era ahora liderado por la hermana menor de JooHyun, una Alfa llamada Jennie que vivía en el pueblo, pero al ver que su hermana mayor estaba en peligro y su cuñada también, decidió ayudarlas y hacerse cargo de Daegu y esto JooHyun lo agradecía demasiado.

ΩΑ

-Unni... ¿Cuándo pararan las náuseas? – YongSun le pregunto a la pelirroja, quien rio con fuerza.

-A mí me pararon como al segundo mes – contesto SeulGi.

-Ya no quiero... – la rubia dijo haciendo un puchero.

-Piensa que lo haces por tu cachorro – dijo SeulGi posando una mano en el vientre de YongSun, el cual ya se empezaba a notar levemente.

-Tienes razón – la menor suspiro.

Ambas Omegas estaban en la habitación de YongSun, pues la rubia estaba teniendo demasiadas náuseas y apenas podía pararse. MoonByul por otro lado, estaba resolviendo algunos asuntos con JooHyun acerca de Daegu, además de tener que hacer entrenar aún más a la guardia real.

Ya todos los habitantes de Seúl sabían sobre la guerra, todos estaban informados para que tuvieran cuidado. MoonByul, quien había querido ayudar a los pueblerinos, no pudo, pues está demasiado ocupada viendo cosas sobre la guerra y absolutamente no dejaría que YongSun salga del castillo.

SeulGi y JooHyun salieron un rato al patio trasero del castillo, sus Alfas no quería que salieran tanto, pero las Omegas simplemente desobedecían.

Aquella tarde era tranquila y cálida, ambas Omegas estaban solas, pues HyeJin se había enfermado de fiebre y debía estar descansando. YongSun y SeulGi platicaban y estaban en su propio mundo, tanto así, que apenas se pudieron dar cuenta cuando fueron rodeados por unas cinco Alfas.

YongSun reconoció el logo en el uniforme inmediatamente y SeulGi también. Eran guardias de Busan, los cuales tenían espadas.

SeulGi fue la primera en reaccionar, y soltó un pequeño gemido, llamando a su Alfa. Uno de aquellos Alfas se acercó a YongSun y le agarro el brazo.

-¡No! ¡Suéltala! – SeulGi se acercó, pero fue agarrada por otro Alfa.

-¡Princesa de Busan! ¡Tendrá que volver con nosotros! – dijo el que parecía estar liderando aquel grupito de Alfas.

-¡¡No!! ¡¡Ahora suelten a SeulGi!! – YongSun grito al ver que estaban lastimando a SeulGi del brazo.

-¡Maten a la hermana de la reina de Seúl! – grito aquel hombre, haciendo que YongSun reaccionara inmediatamente.

SeulGi ya estaba empezando a llorar, había un Alfa sosteniéndola y una espada estaba justo en su garganta, si daba un leve movimiento, era su fin. YongSun se acercó rápidamente, logrando zafarse del agarre de aquel Alfa y corrió hacia SeulGi, pero en cuanto se acercó, el agarre de la espada se acercó más al cuello de la pelirroja.

-N-No... ella no hizo nada... no la maten – la rubia empezó a sollozar.

-¡¡Mátenla!! – Grito con fuerza la Alfa.

Lo siguiente que paso fue demasiado rápido para las Omegas. SeulGi sintió que el agarre de ese Alfa se debilitaba y cuando abrió sus ojos, pudo ver a JooHyun con ojos rojos y gruñendo con fuerza, JooHyun había matado al Alfa que la sostenía. YongSun vio como unos guardias atrapaban a los 4 Alfas que quedaban y los llevaban a la fuerza.

-¡¡Quiero que los maten!! – MoonByul fue quien grito.

-Unni... – susurró YongSun y corrió hacia su Alfa.

MoonByul y YongSun se abrazaron con fuerza, pero la vista de la Alfa se dirigió a su hermana, que estaba sollozando con fuerza, siendo abrazado por JooHyun, quien ya había empezado a derramar lágrimas también, pues el susto que les dio a ambas Alfas fue muy fuerte.

-¿Estas bien? ¿Te hicieron algo? – MoonByul le pregunta a la rubia, posando una mano en el vientre de esta.

-No me hicieron nada... pero... iban a matar a SeulGi – la rubia sollozo.

-SeulGi está bien, mira – MoonByul apunto a la Omega que ya estaba un poco más relajada junto a JooHyun – Llegamos a tiempo – suspiro aliviada la Alfa.

-Me asuste tanto... – susurro YongSun.

-Lo sentí... JooHyun también sintió el llamado de SeulGi y corrimos hasta aquí – MoonByul dijo.

-¿Cómo supieron que estábamos aquí? – pregunto un poco sorprendida la rubia.

-No sé, yo solo seguí a JooHyun, ella y SeulGi tienen un lazo fuerte – la Alfa sonrió.

Ambas parejas ya más calmadas, se dirigieron al interior del castillo. Cada pareja se dirigió a su habitación y cuando YongSun y MoonByul llegaron a la habitación que compartían, se acostaron en la cama, pues querían descansar un poco del susto que se habían llevado. MoonByul se acostó y abrazó a YongSun por la cintura, acariciando con dulzura el vientre de la Omega, donde se estaba formando su pequeño cachorro. Pero algo que captó la atención del Alfa, fue ver que el pelo de su Omega empezaba a tener un color rosado, pero se podía ver más el rubio junto con un poco de rosado, siendo este rosado un poco claro. 

My Queen (MoonSun)Where stories live. Discover now