My Queen (MoonSun)

III

-¿Cuidar de mí? Ya soy suficientemente grande como para cuidarme sola – reclamo la rubia Omega.

-Sí, pero necesita a alguien que la guie – explico la Omega con cabello anaranjado – Usted en este momento está perdida, necesita de mi – rio levemente.

-B-bueno... es cierto – susurro la rubia.

-¿Qué edad tienes? – pregunto la contraria.

-18 años – respondió la rubia.

-¡Yo tengo 24! Debes decirme Unni – la pelinaranja sonrió.

-E-está bien, Unni – la rubia se sonrojo levemente.

-Querías ir al jardín ¿Verdad? – La menor asintió a la pregunta de la mayor – Está bien, acompáñame

HyeJin camino hacia el jardín. YongSun iba caminando detrás de ella, como un pollito siguiendo a su madre, pues la rubia estaba muy pegada a la mayor. Cuando ambas llegaron al jardín, la rubia se sorprendió por lo bello que era aquel lugar, todos los colores y animales que habían allí.

-Puede que la reina parezca una persona cruel y fría, pero a ella le encantan los colores y los animales – dice la mayor con una sonrisa – Ella es quien manda a que este lugar este así de bello

-Vaya... es hermoso – susurro YongSun, pero igual la mayor le pudo escuchar.

Ambas se adentraron más al jardín. Llegaron hasta un lago, donde había peces y el agua estaba tan limpia que se podía ver con claridad los animales y plantas que habían dentro del agua.

HyeJin y YongSun siguieron paseando por el extenso jardín, hasta que empezó a llover. Estaban un poco alejadas del castillo, por lo que se tardaron un poco en llegar, mojándose.

Cuando llegaron al castillo, la reina estaba allí, frunciendo el ceño y cruzando los brazos, notoriamente molesta.

-¿Qué hacían allí? – fue lo único que dijo la reina.

-Estábamos dando un paseo – respondió HyeJin.

-¡Están todas mojadas! – grito la Alfa acercándose a HyeJin.

-U-usted nos dijo q-que podía ir a-al jardín – hablo con timidez la Omega rubia.

-¿Acaso no notaron las nubes? Era obvio que iba a llover – respondió la Alfa, aun molesta.

-¿Y cuál es el problema? No te vamos a mojar a ti – la de cabello naranja respondió.

-HyeJin, mojaste toda tu ropa – seguía reclamando la reina.

-¿Y qué importa? – HyeJin no entendía la actitud de la Alfa – ¿Acaso estas molesta de que la Omega YongSun se enferme? – se burló.

-¿Q-que? ¡Claro que no! – respondió nerviosa, pero aun estando molesta - ¡U-ustedes dos váyanse a sus habitaciones! – grito fuertemente.

HyeJin rio y se llevó a la rubia a la habitación en la que se estaba quedando. Ambas llegaron y la Omega pelinaranja le ayudo a la rubia a secar algunas de sus prendas.

ΩΑ

Era de mañana, YongSun acababa de despertar, repentinamente la puerta se abrió, dejando ver a la Omega que había estado con ella el día anterior. Esta Omega fue hacia la ventana, deslizando las cortinas para que la luz del día pudiese entrar a la habitación.

-¡Buenos días! – grito con alegría la mayor.

-Buenos días – dijo en voz baja la rubia.

-Unni... que no se te olvide que soy tu Unni – le regaño la de cabello naranja.

-Lo siento... Unni – sonrió con nerviosismo la rubia.

YongSun noto que alguien entro, dándose cuenta que era SeungWan, quien traía una bandeja con comida. La Beta simplemente dejo la comida en la mesa de noche y se retiró.

-Debes desayunar – le dice la mayor.

-¿Por qué me traen el desayuno? La reina dijo que podía ir al comedor – respondió agarrando la bandeja con su desayuno.

-Bueno, creemos que lo mejor es que no tengas tanto contacto con la reina – dijo más seria la mayor – Ella puede llegar a ser... Muy difícil

-Eso ya lo note – rio la rubia.

YongSun empezó a comer, pero mientras comía, sentía ardor en la garganta, hasta que empezó a estornudar constantemente. HyeJin lo noto, por lo que rápidamente se acercó a ella.

-Creo que la reina tenía razón – susurro HyeJin.

-¿E-en qué? – pregunto inocentemente la rubia.

-Ayer dijo que te enfermarías debido a la lluvia – la de cabello naranja mordió su labio inferior, nerviosa – Llamare al doctor

HyeJin salió de la habitación, dejando a la rubia Omega sola. YongSun solo se acostó nuevamente en su cama, quería cerrar los ojos y dormir nuevamente.

La puerta siendo abierta hizo que la rubia abriera sus ojos nuevamente, YongSun pudo ver que estaba el doctor, HyeJin y extrañamente también estaba la reina allí.

-Te dije que te ibas a enfermar – dijo con molestia la Alfa, pero al mismo tiempo se burlaba.

-Lo siento – la rubia agacho su cabeza.

El doctor se acercó a la cama de la Omega y empezó a revisarla. Minutos después, justo cuando el doctor terminaba el chequeo, entro SeungWan con un plato de sopa caliente.

-Su majestad – llamo aquel Beta – su Omega está bien, solo está un poco irritada de la garganta y sus defesas están bajas – todos los presentes allí se sorprendieron por las palabras de doctor.

-Disculpe, pero ella no es mi Omega – frunció el ceño la reina.

-Lo siento – se disculpó – lo supuse porque nunca hay Omegas en este castillo, además de la Omega HyeJin, pero es de la familia – aquel doctor se inclinó como era debido y se retiró.

-Quiero que te tomes esta sopa que trajo SeungWan – fue lo único que dijo la Alfa para luego partir de aquella habitación.

-Unni ¿Usted es familia de la reina? – Pregunto YongSun debido a las palabras del doctor.

-Bueno... Somos primas – hablo aquella Omega – Mi padre, al notar que era Omega, me echo del castillo – dijo cabizbaja.

-¿E-enserio? – YongSun mordió su labio inferior.

-Ya sabes, solo los Alfas pueden asumir el trono. Era la mayor de mis hermanos, al ser Omega, me echaron. Cuando MoonByul se enteró, decidió darme alojamiento aquí – Sonrío.

-¿MoonByul? – pregunto la rubia.

-La reina. Aun con su mal carácter, sigue siendo buena persona con la gente que ama – explico sonriendo la pelinaranja.

YongSun por fin termino de comer la sopa que SeungWan había hecho. HyeJin le dijo que tomara una siesta, así que la menor no se negó. Quedando así, profundamente dormida en aquella cama.