- ¡Hiroki, he venido a por Nao-chan!- escucharon la voz de Akihiko desde la entrada. Haruki, rápidamente, se puso en pie de un salto y empujó, lo más delicadamente que pudo, a Hiroki fuera de su dormitorio, cerrando la puerta en sus narices.
- ¡AY, DIOS, HARUKI!- exclamó el profesor todavía impactado y Akihiko frunció el ceño acercándose a él-. ¡MADRE MÍA!
- Hiroki, ¿qué ocurre? ¿Le ha pasado algo a Haruki?- preguntó el escritor preocupado y se dirigió hacia la puerta de su sobrino. El profesor, al escuchar la voz se su amigo, reaccionó y se dio cuenta de lo que supondría que Akihiko viera lo que él acababa de ver.
- ¡Murakami!- gritó agarrándole con fuerza del brazo para impedirle acercarse al dormitorio de su hijo. Akihiko se giró y le miró extrañado.
- ¿Haruki Murakami?
- Sí... Jamás le darán el Nobel, ¿verdad?- murmuró y Akihiko le abrazó.
- No digas eso, algún día se hará justicia. No perdamos la esperanza, Hiroki.
- Gracias, Akihiko, ya me siento mejor.
- Te entiendo perfectamente, yo también pienso mucho en ello- dijo el escritor separándose de él-. Oye, ¿sabes si los niños han acabado ya de hacer el trabajo?
- Pues... Les acabo de echar un ojo y aún estaban en ello- dijo Hiroki-. ¿Por qué no te vas y ya te acerco yo a Nao-chan?
- No me importa esperar, así hablamos de nuestras cosas.
- Ya, pero... ¿No te preguntas qué estará haciendo Misaki solo en casa? ¿Darse un baño? ¿Masturbarse?
- ¿Sabes qué? Soy un hombre ocupado y no puedo estar toda la tarde esperando, así que me voy y ya me traes al niño a casa.
- Por supuesto- asintió aliviado y su mejor amigo se fue. Hiroki se apoyó en el reposabrazos del sofá, intentando asimilar toda la información nueva que tenía. No supo cuánto tiempo estuvo mirando a la nada pero, finalmente, escuchó abrirse la puerta de su hijo y Haruki asomó la cabeza.
- ¿El tío...
- Se ha ido, podéis salir- le dijo Hiroki poniéndose en pie. Los dos adolescentes salieron del dormitorio claramente avergonzados y el profesor se cruzó de brazos mirándolos con seriedad.
- Papá, ¿vas a decir algo?- preguntó Haruki al ver que su padre no decía palabra.
- Me cago en vosotros. ¿Cómo se os ocurre? ¿Sabéis el rato que me habéis hecho pasar?
- Papá, estamos enamorados- dijo Haruki cogiendo la mano de su novio y Naoki se sonrojó todavía más-. Dentro de dos semanas hacemos un año juntos.
- ¿Qué?- murmuró impresionado-. ¿Un año? ¿Juntos?
- Sí, somos novios, papá.
- ¿Y por qué no me lo habías contado? Haruki, este tipo de cosas se cuentan.
- La culpa es mía, tío- habló Naoki-. No quiero que mi padre se entere y le pedí a Haru que no lo contara.
- Ya... A ver, eso lo entiendo- dijo Hiroki-. No quiero faltarle al respeto a mi mejor amigo pero está claro que cuando se trata de ti, se vuelve un imbécil irracional.
- ¿Se lo vas a contar a mi padre?- preguntó Naoki temeroso.
- Dios, no- negó el profesor-. Aprecio demasiado la vida de mi hijo, no seré yo quien se lo diga. Pero sí que se lo voy a contar a Misaki. Nao-chan, no me mires así... Se lo tengo que contar a tu madre.
- ¿Por qué?- preguntó Naoki-. ¿Y si se lo cuenta a mi padre? ¡Me separará de Haru!
- Eso no va a pasar, Nao-chan- le dijo Hiroki-. Si tengo que darle un cogotazo a tu padre para que entre en razón, lo haré.
![](https://img.wattpad.com/cover/194649018-288-k643408.jpg)
YOU ARE READING
El Internado
FanfictionAkihiko es contratado como nuevo profesor en el internado donde da clases Hiroki. Misaki y Shinobu, quien está enamorado del profesor Miyagi, asisten a ese mismo internado. Hiroki evita a Nowaki, el hijo del conserje, por algo que pasó entre los dos...