El Internado

Capítulo 74: Adefesio-sensei

Naoki desayunaba en silencio, algo inusual en él, mirando a un punto fijo. Akihiko le observaba curioso mientras daba un sorbo a su taza de café. El escritor llamó a su hijo y rió al ver que el niño seguía inmerso en sus pensamientos, extendió una mano y le alborotó el cabello, ganándose una mirada de reproche.

- ¡Me has despeinado!

- Vaya tragedia- rió Akihiko ante la cara de indignación de su hijo.

- No tiene gracia- le dijo el niño poniéndose en pie rápidamente y dirigiéndose al baño.

- ¿Qué haces? Venga, termina de desayunar o llegaremos tarde.

- ¡Pues peinarme!- exclamó Naoki desde el baño.

- ¿Desde cuándo te peinas?- le preguntó el escritor extrañado.

- Papá, tendré que ir decente a clase.

- Pero si con ese uniforme pareces un niño de San Ildefonso *.

- ¡Voy muy guapo!- gritó Naoki cruzándose de brazos y Akihiko volvió a reír.

- Anda, ven y desayuna.

- No me vuelvas a despeinar o me enfadaré de verdad- le advirtió el niño alzando su dedo índice.

- Te prometo que no te despeino. Venga, desayuna.

- Mira que despeinarme...

- No refunfuñes- sonrió Akihiko mientras su hijo volvía a tomar asiento en la mesa. Continuaron comiendo en silencio hasta que el pequeño habló de nuevo, aquella vez más relajado.

- Tú eres viejo, ¿no?

- ¿Qué? Pues no- respondió Akihiko-. Por supuesto que no lo soy, soy joven y lozano.

- ¿Qué es "lozano"?

- Que tengo buen aspecto, que parezco sano.

- Lozano, lozano, lozano, lozano...- murmuró Naoki concentrado.

- ¿Qué haces?

- Si no repito las palabras nuevas luego se me olvidan.

- Bueno, Misakito, ¿a qué ha venido eso de que soy viejo?

- Porque lo eres.

- No lo soy, solo tengo treinta y ocho.

- Eso es mucho- comentó Naoki y Akihiko negó comenzando a sentirse ofendido.

- Pero si soy un bebé.

- Wa-chan es un bebé, tú eres un abuelo.

- No me obligues a desheredarte.

- Eres como cuarenta años más mayor que mami.

- ¿Cómo voy a ser cuarenta años más mayor que tu madre si tengo treinta y ocho? Esta tarde te voy a tener haciendo matemáticas...

- Igual me he pasado pero sí que eres mucho más mayor.

- Diez años no son nada.

- ¿Eres diez años más mayor?

- Sí, mami cumplirá veintiocho en un par de meses.

- Entonces eres muy tonto, ¿no?

- Pero bueno, Naoki, ¿te has propuesto hundirme de buena mañana?

- Hombre, si repetiste tantos cursos es que eres tonto porque diez años son muchos...- dijo el niño y su padre le miró desconcertado.

- ¿Qué demonios estás diciendo?