Me necesita

capítulo 11

Christopher se miró en el espejo antes de salir de casa, había rociado su cuerpo con ese perfume de Hugo Boss que tanto le gustaba, estaba vestido más formal que nunca. Al fin y al cabo solía vestirse siempre con chándal y tenis, vestirse ahora con camisa y pantalón de vestir era un gran cambio.

Peinó su cabello con sus dedos y regresó a mirar su teléfono una vez más, Brooke le había pasado la ubicación de un restaurante en el que cenarían esa noche.

Tomó una profunda respiración para calmar los nervios y salió de casa, lo que menos quería era ser impuntual.

Aparcó su coche en el parking y se sorprendió ligeramente al encontrarse a Brooke caminando en dirección a la entrada.

—Vaya, vaya... Has llegado diez minutos antes— murmuró la rubia con diversión.

—Por lo que veo no soy el único — dijo sonriente, se acercó para saludarla, ella dejó un beso en cada una de sus mejillas pero él aprovechó para besar sus labios—. Ahí está mejor, ¿no crees?

—Supongo que si —dijo con sus mejillas sonrojadas—. ¿Nos sentamos?

Él asintió ligeramente, llevó una de sus manos a su espalda baja y la guió hasta el interior del restaurante. Tomaron asiento en una de las mesas más alejadas, donde había menos personas, y un camarero se acercó para tomar sus órdenes.

La cena transcurrió con normalidad, entre risas, comentarios entre lo gracioso y lo romántico, una velada digna de repetirse.

El castaño tomó su mano por encima de la mesa y la acarició con su pulgar.

—No sé cómo agradecerte todo lo que has hecho por mi, Brooke.

—No tienes nada que agradecerme, lo que hago es porque quiero —respondió con una sonrisa en los labios.

—Pero yo si quiero agradecértelo...— susurró llevando su mano hasta sus labios para dejar un beso en ella—. Quiero terminar esta noche de la mejor forma...

En sus ojos chispearon las llamas de fuego, propias de la lujuriosa mirada que le había lanzado. Remojó sus labios con su lengua y ladeó su cabeza en busca de una respuesta.