No mas callado [TK]

Capitulo 62

Desde que pasó lo del secuestro, Taehyung iba todos los días a la comisaría. Con el único objetivo de saber si encontraron a Yoongi.

Le preocupaba que Yoongi se haya ido con su padre, entonces todas las mañanas se subía a su bicicleta y andaba unas cuadras hasta llegar a la comisaría para tener noticias. Pero nada aún. No podían encontrarlos, era como si se hubieran esfumado completamente.

Tae dejó la bicicleta apoyada en la pared de su casa y cerró sus ojos tomando aire fresco. Estaba por entrar a su casa, pero de pronto, escuchó una voz.

—¡TaeTae~!

Se dio la vuelta y sonrió al ver que era su vecina quien la llamaba. Se llamaba Nancy, una joven un año más chica que Tae, que se la pasaba sonriendo y cantando en la vereda del barrio frente a la casa de Tae.

Hace unos días había comenzado a hablar con Nancy y una que otra vez se detenían en medio de la vereda para charlar juntos o dar algún pequeño paseo por ahí.

La chica se acercó a él, llevaba en sus manos una pequeña cajita y Taehyung alzó una ceja al verla.

—¿Que tienes ahí?

—Es... Algo q-que te prepare a ti—dijo la chica con nervios y bajando la cabeza—Lo hice yo

—Oh, gracias

Nancy le extendió la caja y Taehyung la tomó. La abrió y vio que era un pequeño chocolate con forma de corazón.

—Gracias, Nancy

—¿Sabes por qué lo hice?—preguntó la chica acercándose más a Tae—Es que yo... te quiero Taehyung

El mayor abrió bien sus ojos, apretó sus labios y sintió como comenzaba a sonrojarse levemente. Mordió su labio y bajó la cabeza.

—Yo... yo...

Dio un suspiro y levantó la vista

—Yo también te quiero, Jungkook—dijo y al darse cuenta que se equivocó, llevó una mano a la cabeza—¡Q-quiero decir! Yo t-también te quiero Nancy

—¿Eh? ¿Quien es Jungkook?

—N-no... nadie

—¿Seguro?

—Seguro

Nancy alzó una ceja curiosa y finalmente asintió con la cabeza.

—Esta bien, me tengo que ir. Adiós Tae.

—Adiós Nancy.

Taehyung se dio la vuelta con la cajita en mano y se adentró a su casa dando un suspiro. No sabía que le pasaba, pero hace días que no podía sacarse a Jungkook de la cabeza.

—¿Hijo?—se escuchó la voz de la señora Kim asomándose por la cocina—Oh, por fin llegaste. Pon la mesa para comer.

—Bien...

Comenzó a sacar todas las cosas en los estantes para comer. Tomó tres vasos, pero al recordar que su padre ya no estaba con ellos, dejó el tercer vaso en su lugar y se acercó a la mesa. La señora Kim colocó la olla de comida en el centro de la mesa y miró curiosa a su hijo, que se encontraba serio.

—Taehyung ¿Que pasa?

—Nada, mamá

—¿Estas así por lo de tu padre o por Jungkook?

—Creo que las dos cosas.

Taehyung se sentó en su asiento y apoyó la frente en la mesa. La señora Kim se sentó a su lado apoyando su mano en la espalda de su hijo.

—¿Sabes, mamá? Desde que pasó lo de Jungkook, estoy intentando centrarme en otras cosas pero no puedo. A veces siento que solo debería olvidarme de él porque merece algo mejor que yo... porque yo soy un inútil que no sabe resolver bien las cosas.

—Hijo ¿Por qué no lo llamas para saber si está bien?

—Es que... n-no lo sé, siento que voy a hacer todas las cosas mal como hago siempre—respondió y miró a su madre—Creo que debería terminar con Jungkook y que busque algo mejor que yo

La señora Kim se lo quedó mirando y entrelazó su mano con la de Tae sonriendo.

—Taehyung ¿Crees que no escuché lo que dijiste hoy con Nancy? Querías decirle a ella que la querías pero terminaste diciendo que querías a Jungkook.

—¿E-estabas escuchando?

—Justo pasé por ahí—se excusó y siguió hablando—Si dijiste que lo querías a él, significa que aún no puedes sacarlo de tu mente. Significa que no puedes olvidarlo y que aún lo amas.

—¿Pero él seguirá amándome a mi?

—¡Claro que si! Cada vez que están juntos, a Jungkook le brillan los ojos y se le nota la emoción cuando está a tu lado—respondió la señora Kim—Si tu crees que debes seguir esperando, hazlo. Pero no niegues que sigues amando a Jungkookie, porque se que aún lo haces y las personas no cambian de un día para el otro.

Taehyung miró a su madre, se quedó en silencio por unos segundos y sonrió.

—Mamá, eres la mejor

Comtinuará