¿POR QUÉ? 3

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Wei Ying jugaba en el jardín trasero con Sizhui y los conejos, todo era muy agradable, Wei Ying quería guardar aquel momento en su memoria para siempre.

Cierto par de ojos brillantes lo veían a la distancia, con una suave y sutil sonrisa.

- Sizhui, ¿ya pensaste en qué pasaría si tienes un hijo con Jin Ling? - preguntó curioso Wei Ying

Sizhui volteó a verlo nervioso, cierto Jade que los veía, se recargo en un árbol y masajeo su frente, por alguna razón Wei Ying quería saber quién de sus conocidos quería tener un hijo.

- Madre, por el momento no hemos pensado en ello... - dijo nervioso Sizhui

- Oh, ya veo. Deberías hablarlo con él, porque ¿sería líder del clan Lanling Jin o de Gusu Lan? - preguntó acariciando un conejo

Sizhui se quedó mudo ¿qué podía decirle a su madre? Número uno, si no habían pensado en tener un hijo, menos sabrían si sería líder de algún clan, número dos, hablar de un hijo con su madre implicaba que aceptaba que habían sobrepasado los besos...

Por su parte Lan Zhan observaba a su hijo con cuidado, nunca había pensado que su pequeño rabanito hiciera esas cosas, si bien, él lo hacía con Wei Ying, no podía imaginarse a su hijo en esa situación.

- ¡Jajajaj, Lan Zhan!, ¡Sal de ahí! - gritó alegre Wei Ying

Lan Zhan se encaminó al lugar con un rostro más serio de los que se le veían a diario, Sizhui solo pudo encogerse de hombros, si le daba vergüenza hablar con su madre, le ATERRABA, hablar con su padre respecto a ese tema.

- Lan Zhan, ¿te imaginas un hijo de nuestro A-Yuan y Jin Ling? - dijo Wei Ying analizando cada movimiento de su amado.

- Bueno... yo... me... debo... quizás... - Sizhui tartamudeaba bastante nervioso, su cuerpo temblaba y sudor comenzaba a caer de su frente.

- Mhm - asintió Lan Zhan al ver a su hijo así de nervioso.

Sizhui salió corriendo, Wei Ying rio por lo alto y solo observó a su esposo.

- Wei Ying... ¿por qué...? - preguntó a medias Lan Zhan

- Supongo que quieres saber el porqué de que cuestione a la gente respecto a sus hijos a futuro... ¿no? - dijo Wei Ying acomodándose entre la hierba.

Lan Zhan solo asintió sereno y espero la respuesta de su amado.

Wei Ying suspiró y vio a su esposo - creo que... no te puedo mentirte ¿cierto?

Lan Zhan negó con la cabeza y observó cada detalle del bello rostro de su esposo.

- Tengo un mal presentimiento, como si algo fuera a pasar, quiero cuidar de las personas que amo... pero tengo... miedo - dijo agachando el rostro

Lan Zhan se agachó y sostuvo a su amado entre sus brazos, lo amaba y le dolía en lo más profundo de su corazón verlo así.

Bichen salió disparada y una pequeña gota de sangre cayó al suelo.

- Oh, creo que llego en mal momento, me disculpo - dijo haciendo una reverencia Xichen.

- No, está bien ¿qué pasa? - dijo más tranquilo Wei Ying

- El líder Yao ha pedido que vayamos una semana antes, parece ser que hay algo en su secta que a estado atacando a sus discípulos - dijo serio Xichen

- Mhm - asintió Lan Zhan

Los 3 salieron de ahí a alistar sus cosas y organizar a los discípulos que irían con ellos.

...

Al llegar a la secta Yao, 3 de las 4 personas que iban a cargo, es decir, Wei Ying, Lan Xichen y Lan Sizhui, pensaban en qué le dirían a cierto discípulo risueño, que no había ido con ellos, pues claro, ¿cómo podían decirle que se adelantó 1 semana el viaje, mientras él estaba de cacería con la secta Yunmeng?, ya que Jinyi veía al líder de su secta y de la secta Yunmeng Jiang como sus padres, y éstos lo querían mucho.

...

El líder Yao los recibió con una sonrisa algo exagerada, algo que Lan Zhan no pasó por alto, pues éste mantenía su vista fija en Wei Ying.

- Hola líder Yao, agradecemos su hospitalidad y nos gustaría que nos indique ¿en qué podemos ayudarlo? - dijo amablemente Sizhui mientras hacía una reverencia

- Hablaré con el líder de la secta Lan, no con un discípulo - dijo haciendo muecas el líder Yao

- Disculpe líder Yao, pero al parecer no le han notificado que Lan Sizhui es el futuro líder de la secta Lan, por ende, debe participar en algunas situaciones que sean importantes para su secta - Jiang Cheng apareció tras de ellos con su singular ceño fruncido y Zidian chisporroteando en su mano.

- Líder Jiang, veo que recibió mi carta también - dijo molesto el líder Yao

- Si, pero por el momento solo pude venir yo, hasta mañana vendrán mis discípulos - dijo serio caminando hacia donde se encontraban todos.

- Ya veo, entonces me parece que será mejor hablar mañana con usted y con el líder de Gusu Lan respecto a la situación que les comenté, hasta mañana - dijo saliendo de la sala.

- Wanyin, ¿dónde está Jinyi? - preguntó casi en un susurro Xichen

- Le pedí que se quedara en Yunmeng a acabar con unos asuntos - explicó Jiang Cheng

- Oh, así que veo que no soy el único que recibió una carta - dijo Nie Huaisang entrando con Jin Ling a la sala - parece que el líder Yao nos quería antes de tiempo ¿no creen? - dijo con su abanico bajo su mentón

- Algo no está bien, si nos pidió que viniéramos antes... - Wei Ying fue interrumpido por Nie Huaisang

- En realidad este niño no recibió carta - dijo refiriéndose a Jin Ling, quien solo veía al piso nervioso

- ¿Qué ha venido a hacer líder Jin? - preguntó tranquilo Xichen

- Yo... - Jin Ling seguía viendo el piso

- Al parecer cierto discípulo le avisó que llegaría antes, - dijo Huaisang refiriéndose a Sizhui, quien bajó la mirada al sentir los ojos del líder Jiang sobre él - además de que se enteró por alguien en Yunmeng, que su tío salía antes de lo acordado - finalizó Huaisang

- Chismoso... - susurró Jin Ling

- ¿Yo?, claro chiquito - dijo burlón Huaisang

...

Todos maldecían en silencio a Wei Ying, mientras perseguían a Jiang Cheng por todo el lugar.

Es que ¿a quién se le ocurre preguntar por embarazos en ese momento?

- No me digas que ya tienen un bebé en camino - dijo sarcástico Wei Ying

Jiang Cheng volteó a ver al hijo de su hermano y a su sobrino, pasaba su vista de uno a otro, ambos más pálidos que una hoja.

- ¡LES ROMPERÉ LAS PIERNAS A AMBOS! - gritó Jiang Cheng haciendo chisporrotear a Zidian

- ¡NO, ¿ASÍ CÓMO PODRÁN TENER HIJOS?! - gritó burlón Wei Ying

- ¡TU CÁLLATE! - gritó Jiang Cheng antes de comenzar a perseguir a ambos chicos

- ¡LAN ZHAN, ¡DETENLO, QUIERE MATAR A NUESTRO RABANITO! - gritaba desesperado y divertido Wei Ying

Ninguno de los ahí presentes se percató de cierto hombre que los veía desde dentro de la sala, entre las sombras, mientras planeaba el final de esos 7 hombres que corrían en su jardín... 

EL ROJO Y EL AZUL SIEMPRE VAN JUNTOSWhere stories live. Discover now