SEDUCEME -KOOKMIN +18

6 EL AMOR NO ES SOLO SEXO

La prensa se había dedicado a sacar todo tipo de artículos hablando mal del director Lee, y por esa mala imagen que se empezó a crear sus inversionistas habían decidido retirar sus inversiones, y su empresa había entrado en la banca rota tan solo en una semana, los ejecutivos pedían su renuncia y los medios de comunicación pedían notas mas detalladas del tema, Jimin y Jungkook habían puesto una denuncia en contra del hotelero Lee, pero nadie se había enterado por obvias razones, ese hombre tenia mucho poder pero no mas que los productores de la cadena para la que trabajaba Park y Jeon, pero no podían dejar que este hablara con sus "amigos" así que toda la investigación se llevaría a cabo del modo mas discreto posible.

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Sus pisadas eran seguros, y su caminar reflejaba lo decidido que estaba para encontrarse con ese hombre, y hacer lo que debía hacer.

Cuando estuvo delante de la puerta acomodo su cabello rubio para atrás de forma delicada, y el oficial abrió la puerta del cuarto mientras veía al rubio con fascinación, luego el el rubio solo se sentó dejando su saco en el respaldar de la silla, viendo al oficial vigilarlos en la puerta, serio y quieto.

Park miro al hombre delante suyo, esposado a un lado, indefenso, y con rabia, como si de el dependiera su libertad tomaría el cuello del rubio y lo destrozaría en catión de segundos, sin importarle que le dieran cadena perpetua una ves mas. 

Jimin miraba los ojos de ese hombre, eran macabros, era odio, era ira, era premeditación hacía el acto de querer asesinarlo en ese cuarto.

Jimin cruzo sus brazos y piernas para luego mirar una ves mas al policía que se encontraba a un costado de la puerta, y luego miro el cuarto de color gris, suspirando preparado para preguntar, por una respuesta que le diera lo que queria.

-¿Hay algo que quieras decirme? -El hombre lo miro dudoso y sonrío.

-Que quieres que te diga, saldré en poco tiempo gracias a mis contactos -El hombre no dijo nada mas cruzando los brazos tomando una postura firme, no contestaria, no lo haría, y eso Jimin lo comprendía muy bien, pero creyó que tal ves podría decirle lo que queria escuchar.

Jimin solo sonrío y tomo su saco para luego salió de la sala junto al policía como escolta, escucho como la puerta era cerrada nuevamente, luego apretó los dientes en señal de inconformidad y fastidio.

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Jimin ya en su casa saco su libreta de apuntes, y con una lapicera leyó cada uno de los nombres que estaban en esa lista, para luego encontrar el nombre de Lee, nombre que prosiguió a tachar en una lineá perfecta.

-¡¡¡No eras tu!!! -Jimin grito para luego tirar todo lo que se encontraba en su mesita de luz, los papeles de una nueva canción terminaron en el suelo, al igual que esa lámpara de cristal y su cenicero, esas dos ultimas cosas terminaron rotas al tocar el suelo.

El rubio se encontraba de pronto mirando el techo con un cigarrillo sabor menta en los labios inhalando y exhalando el humo, hasta que lo escucho, su timbre había sonado, se levanto apago el cigarrillo pisándolo, luego se roció un poco de perfume para luego dirigirse a la puerta, suspiro un rato para luego sonreír, y abrir la puerta como un chico tan dulce como el algodón de azucar.

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El pelo largo y el bello rostro de la chica era todo lo que Jungkook podía ver, y recordar esa actitud tan fuerte que amaba lo hacia enamorarse cada ves mas de ella, lo hacía delirar por ella.