- 《 oh no, there you go, making me a liar 》
La vida de Addison era normal comparada con la de su hermano el actor Owen Patrick Joyner pero su vida cambia cuando él le pide que se mude a Canadá junto a él y su compañero Charlie Gillespie, del que ell...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
—VAMOS, ADDI. Hablas francés conmigo, esto debería ser pan comido.–insistió el canadiense. –Feliz Año Nuevo.
—Dilo una vez, prometo que esta vez lo dire.
Charlie soltó una carcajada. Tomó el rostro de la rubia entre sus manos, removiendo cualquier mechón rebelde en su rostro y sonrió perdiéndose en sus ojos azulados.
—Repite conmigo.–murmuró sin romper contacto con sus ojos.–Feliz
—Feliz.–murmuró la palabra en español concentrada en los ojos del canadiense.
—Año.
Addison rio levemente al escucharlo decir aquella palabra.
—Año.–repitió no muy segura.
—Nuevo.
—Nuevo.
—Feliz Año Nuevo.–dijo Charlie.
—Feliz Año Nuevo.–repitió la rubia sin saber si lo había dicho bien.
—¡Lo hiciste!–exclamó soltando el rostro de la rubia para levantar sus brazos emocionado.
—¿Lo hice?–pregunto sin poder creérselo.
—Lo hiciste, addi. Muy bien debo decir.–hablo Gaby desde la otra punta de la mesa.
—Ya puedes decir que sabes algo de español.–comento Jeff junto a su prometida.
Addison sonrió conectando su mirada con el canadiense que no dejaba de mirarla emocionado. Él volvió a tomar su rostro, con poca distancia entre ellos.
—Lo hiciste.–murmuró cerca de sus labios.–Estoy orgulloso de ti.–comento con gracia.
—Tengo un buen profesor.–dijo la rubia antes de acortar la distancia entre ellos porque no resistía tener sus labios tan cerca sin tocarse.
Era el primer día del año nuevo, su estadía en la isla estaba por acabarse pero eso no era un impedimento para que la pareja no aprovechara su tiempo juntos. Se encontraban en una mesa en la espera de su comida, con el mar a lo lejos, rodeados de otras personas pero el lugar era tan grande que parecía que estaban solo ellos.
—Recuerden que estamos aquí, las habitaciones no están tan lejos.–bromeo Patrick, haciendo que la pareja terminara su beso. Charlie riendo mientras Addi no podía evitar sonrojarse.
—Déjalos, están enamorados.–murmuro Gaby.
—Prefiero presenciar demostraciones de amor después de comer.–comento el canadiense, sobándose la frente, por la resaca supuso la rubia.
La verdad es que Addi se sorprendió de verlos a todos despertar con tanta energía luego de la noche que habían tenido. Al principio, la noche consistió en una cena tranquila con alguna copas pero luego de la media noche se organizo una fiesta en el hotel donde se estaban quedando y estuvieron casi hasta el amanecer. La rubia por su parte no bebido mucho así que no tenia tanto malestar pero los hombres Gillespie si habían aprovechado el alcohol gratis, aunque para Addi no era raro ver a Charlie con tanta energía, él era así naturalmente.
