-WE DID IT

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—YA TE HE HECHO esta oferta muchas veces pero puedes considerar el secuestro

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YA TE HE HECHO esta oferta muchas veces pero puedes considerar el secuestro.–murmuró Charlie con su cabeza en el hombro de la chica.

La pareja se encontraba en el aeropuerto, en el que el canadiense despediría a la rubia y aunque su vuelo estaba por salir, él rodeó sus brazos en su cintura en un abrazo.

Addi rio levemente. Algún día, él realmente la secuestraría y no llegaría a casa.

—No sería un secuestró si te dejo.–murmuró con gracia con su cabeza en el hombro del canadiense.

—No quiero que te vayas.–murmuró él separándose un poco pero sin romper el agarre en la cintura de la rubia.

—Es un poco tarde.–dijo ella con gracia.–Tal vez la próxima vez puedes ir a Oklahoma.

—Hecho.

La rubia sonrió perdida en la mirada del canadiense, que en aquel momento era más azulada que verde.

—Este viaje fue maravilloso, tú fuiste maravilloso,–murmuró acariciando las mejillas del canadiense.–pero tienes que soltarme, Charlie.–comento Addi riendo cuando trato de moverse.

—No quiero.–hizo un puchero.

—Tengo que irme.

—No quiero que te vayas.–murmuró fingiendo un llanto.– Quédate más tiempo.

La rubia sonrió al ver cómo los ojos azules del canadiense tenían un brillo especial. Llevo sus brazos su cuello.

—No puedo, tú tienes cosas que hacer, lugares a los que ir y yo tengo que estar en casa para las fiestas.

—Cancelare mi viaje a los Galápagos.

—No quieres hacer eso.–murmuró Addi con gracia.

—No quiero hacer eso.

Ambos sonrieron mientras sus miradas estaban conectadas. La rubia redujo la distancia entre ellos besando los labios del actor.

—Déjame ir.–murmuró ella cerca de sus labios.

Charlie soltó un suspiro y lentamente deshizo su agarre en la cintura de la rubia.

—Está bien. Pero me debes una visita de más de tres dias.–comento él viendo como ella tomaba su maleta.

—Tal vez, la próxima vez deberías ser tú quien me visita a mi.–mencionó la rubia.

LIAR || Charlie GillespieWhere stories live. Discover now