between stumbles (Neville Longbottom)

gemelos

Narrador omnisciente:
Todos los alumnos de segundo año se encontraban en el gran comedor, que ahora, solo eran pupitres individuales.

La razón era simple, estaban realizando los TIMOS, los exámenes más importantes para decidir qué materias podías cursar el año que viene, debías obtener las mejores notas. Por ejemplo en pociones.

Si no conseguías la nota maxima, no podrías tomar la optativa, y muchos de los puestos como auror se solicitaba haber cursado pociones.

Tara se encontraba en las filas de atrás, a su lado había un Ravenclaw que no dejaba de escribir y delante suyo tenía a Dean que no escribía nada.

La chica sabía todas las preguntas, nunca habían sido un problema sus estudios, pues entendía todo con facilidad...todo menos Herbologia.

Maldita herbologia que bajaba su promedio, pensó.

Tara seguía respondiendo cada pregunta, estaba segura de si misma pues había repasado el día antes con Hermione.

De repente, se escuchó un golpe, a la puerta que se encontraba cerrada.

Todos se giraron para ver que era pero no había nada.
-Ya podrían decirles que dejen de joder...- se dijo a sí misma mientras seguía escribiendo.

Volvió a sonar. Otra vez un golpe seco contra la puerta y fue cuando Umbridge se dirigió hacia esta con intención de abrirla y decirle que parasen.

Al abrirla, Dolores salió fuera a comprobar. De repente, una luz, como un fuego artificial entró en el gran comedor haciendo un poco de ruido.

Tara abrió los ojos y miró a Ron quién ya la estaba mirando.
-Sabias algo?- preguntaron a la vez.

Al parecer ninguno de los dos sabía que estaban tramando los gemelos Weasley.

Y de un momento a otro Fred y George entraron al gran comedor subidos en sus escobas, levantando todos los papeles de los exámenes por los aires.

Tara inmediatamente se levantó y fue donde se encontraba Ron.
-La que les va a caer esta vez!- dijo el pelirrojo fascinado.

La chica miró donde estaba George. Entonces los gemelos empezaron a lanzar fuegos artificiales por todo el lugar, haciendo mucho ruido y destrozando todo.

Los de la brigada inquisitorial intentaban quitarse de en medio las luces, pero estas solo les perseguían.

George quien estaba pendiente de Tara y Neville miró a Fred indicando que era la hora.

Se acercó donde estaba ella.
-Sois los mejores!- dijo la chica emocionada.- Pero no sabéis la que os va a caer encima.

El pelirrojo la miró con algo de ternura.
-De hecho no...por que nos vamos.- Tara dejó de sonreír.- No te enfades por favor.

La chica que ahora tenía ganas de llorar sin embargo se acercó a George y lo abrazó con todas sus fuerzas.
-Te extrañaré mucho Georgie.- dijo.

El pelirrojo la miró y empezó a sonreír.
-Por qué me miras así? Que vas a hacer?- empezó a decir la chica al verlo. - No se te ocurra hacer nada...

El pelirrojo le lanzó directamente unas luces a la chica que empezó a correr, pero no se dio cuenta de quién tenía delante y acabó chocándose con alguien acabando en el suelo.

Neville quién no entendía que hacía en el suelo, miró a la chica que tenía a su lado.
-Tara?- dijo de sorpresa.- T-te encuentras b-bien?- la chica lo miró y el rubor subió por sus mejillas.

-P-perdón.- empezó a tartamudear.

George quien veía la escena orgulloso miró a su gemelo quien le dio la señal para el espectáculo final.

Fred lanzó una cajita la cual se transformó el un enorme dragón que empezó a seguir a Umbridge que no tardó en empezar a correr había la salida.

Una vez a fuera, el enorme fuego artificial explotó, y los gemelos Weasley por fin pudieron irse, dejando una enorme W en el aire y dejando claro quiénes eran, son y serán los reyes de las bromas de Hogwarts.

Tara vio como e iban, entonces, tomó la mano de Neville y lo arrastró fuera donde se encontraban todos aplaudiendo y gritando de alegría.

Neville solo pensaba en ese momento en no desmayarse. Miró el perfil de la chica que sonría y aplaudía y no pudo evitar pensar lo que sería besarla.

Si solo ella sintiera todas las cosas que él sentía...si solo ella lo mirara de la forma en que el lo miraba...

El chico sacó esos pensamientos de su cabeza cuando vio que Tara lo miraba y le estaba hablando.
-No son increíbles?- preguntó la chica.

-Si...si que lo eres.- respondió pero ella no le escuchó puesto que se giró dándole la espalda.

Pero no era por que le estaba ignorando, sino por que Harry se había caído al suelo.
-Harry!?- decían Hermione y Tara.

-SIRIUS!- gritó de repente.- Tienen a Sirius.- Harry se levantó de golpe y empezó a caminar adentro del castillo seguido de las dos chicas y Ron.

-Explícanos que pasa Harry.- le pidió Ron.
-Es igual que tu padre cuando lo atacaron en el ministerio, tienen a Sirius, d-debo salvarlo.- dijo muy decidido.

-Vamos a ayudarte.- le dijo Hermione.- Y no aceptaremos un no como respuesta.
-Hermione, no quiero que...- empezó a decir Harry pero Tara lo interrumpió.

-Harry Potter vas a dejar de ser tan modesto algún día!? Déjanos ayudarte! No podrás hacerlo tú solo!- le gritó Tara.- Ahora, dinos qué hacer y nosotros te seguimos.

Harry suspiró y empezó a pensar cómo podían salvar a Sirius.
-Esta bien, esto es lo que haremos.