weasleys

6.1K 766 97
                                    

Narrador omnisciente:
Ya era tiempo de ir preparando todos los libros y materiales para empezar un nuevo año de Hogwarts, en este caso, sexto para Tara.

La chica se encontraba entusiasmada con el plan de ir a Sortilegios Weasley y ver a George sobre todo. Los gemelos no tenían ni idea de lo orgullosa que estaba de ellos.

Así que todos se dirigieron al callejón Diagon, allí, a la tienda que más resaltan de todas además de tener todos los clientes posibles.

Tara ni siquiera esperó a los demás para empezar a correr como una niña pequeña que acaba de comer azúcar y necesita moverse.

Entró y sonrió alucinada por todo el trabajo y los clientes que habían. Sin duda lo habían bordado.
-Santo Merlín...- dijo intentando caminar para explorar la tienda.

Había tanta gente que era difícil ver el panorama, sin embargo la chica seguía.

De repente, la chica notó como alguien le tocaba el hombro así que se giró para encontrarse con Cormac.
-Me has asustado.- dijo algo nerviosa.- Que quieres?

-Quiero muchas cosas...y una es que me presentes a tu amiga Granger.- le dijo en la oreja pues había bastante ruido.

Tara hizo una mueca de asco y lo miró.
-No, no pienso presentártela.- dijo apartándolo, sin embargo el chico la tomó de la muñeca.- Que crees que haces?
-No seas maleducada.- le empezó. decir.- No quieras meterte en problemas Jones...

-Ah si? Cuáles problemas? Me los explicas?- dijo una voz detrás de ellos.

Cormac, inmediatamente soltó con rapidez a la chica y miró a George con algo de temor y respeto que se encontraba detrás de Tara con la expresión más seria posible.

Le dio una mirada a la chica quien se miraba la muñeca donde el chico había hecho presión y salió de la tienda, no sin antes mirar a Hermione de manera descarada.

-Oye, te encuentras bien?- preguntó el pelirrojo a lo que la chica suspiró hondo y lo miró con una sonrisa.
-No podría estar mejor, esto es un éxito!- dijo abrazándolo.- Os felicito a los dos.

-Me alegra que te guste.- empezó a decir George con una sonrisa.- Hay algo que te interese?

La chica rió y empezó a oler justamente a Neville. El también estaba ahí? Frunció el ceño al no encontrarlo por ningún lado, así que dirigió su mirada a las pastillas vomitivas, las clásicas.

Tomó un par y se giró quedando cara a cara con el gemelo que ya estaba cruzado de
brazos.
-Georgie...mi mejor amigo.- empezó a decir.- Sabes que yo te quiero mucho no? Y que eres el mejor amigo que una chica podría desear...

George rodó los ojos.
-Te las regalo, cortesía de la casa.- dijo a lo que Tara sonrió y lo abrazó de nuevo.

-Wow, creo que debéis mantener algo de distancia, sino esto se convertirá en una selva con leonas hambrientas...- dijo Fred apareciendo.

-Leonas?- preguntó George a lo que el pelirrojo mayor le señaló un grupo de chicas que sonrieron al hacer contacto visual con los gemelos.

Al parecer muchas chicas no estaban ahí para comprar productos...sino por las vistas.
-Si pudieran matar a gente, estarías muerta.- siguió hablando Fred a Tara quien rodó los ojos.

-Que gracioso eres Freddie.- dijo la chica.
-Gracioso es mi segundo nombre lo sabías?- dijo para guiñarle el ojo y ir a atender a una señora.

-Y como vas con Neville?- preguntó finalmente George a lo que la chica lo miró algo nerviosa.- No me digas que aún no sois nada.

-Por qué íbamos a ser...algo? Somos...amigos, supongo.- dijo con la cabeza baja.

El pelirrojo la arrastró hasta una parte de la tienda donde el olor a Neville era más fuerte aún.
-Hueles...a algo especial, que es?- preguntó el gemelo a lo que la chica lo miró.

-Huele a Neville, pero no está, que clase de magia es esta?- preguntó a lo que George empezó a reír.

-Sabes pequeña? Me encanta que seas tan... idiota a veces.- dijo tomando un pote con forma de corazón.- Esto es una poción de amor. Huele a lo que más nos atrae en tu caso, a la persona que más te atrae.- sonrió más al ver que Tara se empezaba a sonrojar.

-No...no puede ser, es decir...- empezó a tartamudear y a decir cosas sin sentido a lo que George la interrumpió.

-Esta bien que te guste Neville, es bueno para ti. De hecho es demasiado bueno para todos.- dijo a lo que la chica lo miró.

-Pero el solo me ve como una amiga.- dijo a lo que el pelirrojo estaba a punto de tirarle el frasco en toda la cara.- Tu que crees?
-Creo que debes decirle lo que sientes.- finalizó a lo que Tara sonrió.

-Debería? Y si no me corresponde?- preguntó.
-Estoy seguro que no, créeme.- dijo con una sonrisa.

-Bien. Me gusta Neville, y voy a decírselo...- dijo mentalizándose de eso.- Se lo diré en cuanto lo vea...o eso creo.

Tara volvió a abrazar a George pero esta vez parecía como si fuera la última vez.
-Te voy a echar mucho de menos...- le dijo en un susurro a lo que el pelirrojo sonrió.

-Yo tambien, pero recuerda que siempre puedes llevar una foto mía.- dijo guiñándole el ojo.
-Eso siempre.- le respondió la chica riendo.

-Y recuerda, si alguien intenta pasarse contigo, te he enseñado lo que tienes que hacer. Entendido?- dijo a lo que la chica asintió con algo de cansancio.

A veces George la trataba como si fuera su hija, y podía ser demasiado sobre protector.

Tara ya se marchaba sin embargo el pelirrojo aún le seguía diciendo cosas.
-Recuerda escribirme!- dijo antes de que la chica desapareciera por las puertas del local.

Fred se acercó a su gemelo y lo miró.
-Se hacen tan mayores...- dijo para reír y seguir trabajando.

between stumbles (Neville Longbottom) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora