between stumbles (Neville Longbottom)

cena

Narrador omnisciente:
-Te ves hermosa.- le dijo Hermione mientras la chica se arreglaba sus últimos retoques a su vestido.

-Al igual que tu.- le respondió la chica mirándola con un ma sonrisa.- Vamos?

Las dos chicas salieron de la sala común para ir a la estúpida cena de Slughorn. Era privada y exclusivamente para estudiantes sobresalientes en cualquier cosa.

Cuando llegaron, el profesor les sonrió para dejarlas pasar.

Allí ya se encontraban algunos como las hermanas Carrow o Blaise entre otros como Cormac y Neville quién miraba fascinado a la chica que acababa de entrar.

-Me alegra que haya podido venir señorita Jones, después de esa caída... empezó a decir Slughorn mientras se sentaba.

-Si, menos mal que no me ha pasado nada. Zabini, puedes comunicárselo a tus bateadores.- dijo con sarcasmo la chica tomando asiento.
-Tranquila, lo haré.- respondió el moreno repitiendo el mismo gesto.

Cuando ya estaban todos...casi todos a excepción de Ginny, empezaron a cenar en silencio.
-Entonces, empezamos por ti hijo, como te llamabas?- preguntó a lo que Neville tragó hondo.

Los de la mesa a excepción de Tara, Hermione y Harry rieron por lo bajo, poniendo incómodo al chico que se presentó correctamente.

-He oído que se te da muy bien la herbología, algún día deberías hacer clase!- dijo a lo que Cormac quien se había reído habló.

-Si ese hace clase, no traigo a mis hijos para que estudien aquí.- dijo a lo que los demás se seguían riendo.
-Dudo que los tengas de todos modos.- dijo Tara sin mirarlo haciendo reír a Hermione y Harry.

Cormac miró a Tara quien sonría al ver a sus amigos reír entonces decidió molestarla más aún.

Y cuál era la mejor forma de molestar a Tara? Meterse con Neville.
-Dime Neville, tus padres deben estar orgullosos de ti no?- preguntó a lo que la
chica empezó a apretar el tenedor.- Nunca los he visto...ahora que recuerdo, siempre viene tu abuela.

-Mis padres...están en San Mungo, pero creo que si que lo están...espero que lo estén.- respondió de la mejor manera el chico.
-Estoy seguro de eso.- corroboró Slughorn.

Ahora, el profesor empezó a preguntarle a Blaise sobre su madre y este, respondió sin problemas.

Mientras hablaban, Tara no paraba de fulminar a Cormac quien disfrutaba de la comida.
-Y que hay de usted señorita Granger? A qué se dedican sus padres?- preguntó el profesor.

-Son dentistas.- respondió la castaña con simpleza y incomodidad.

Tara, en esos momentos, solo pensaba en que no le preguntaran a ella, no quería responder esa simple pregunta para muchos pero complicada de responder para ella.

-Jones? Estás muy callada, y tus padres? Seguro que orgullosos de que su hija sea la capitana del equipo de quidditch!- y ahí estaba la dichosa pregunta.- Como se encuentran?

-Eh...supongo.- dijo restándole importancia.- Esto esta buenísimo.- dijo admirando la comida.

Cormac, quién quería arruinar a la chica supo que algo escondía.
-Creo que no le has contestado la pregunta.- dijo a lo que Tara miró su plato.

-Mia padres, están...como siempre.- dijo a lo que todos se la quedaron mirando.
-Y a que se dedican?- preguntó el profesor con inocencia.

Neville quién veía el dolor en sus ojos, y la vergüenza que estaba pasando en ese momento no sabía que hacer ante tal situación. Quería ayudarla pero no encontraba la manera.

-Creo que deberías responder la pregunta.- insistió Cormac con una sonrisa maliciosa.

Tara se levantó de golpe.
-Disculparme.- dijo para irse de ahí y dejar a todos confundidos.

-Que pena, y yo que quería saber más...- empezó a decir Cormac volviendo a comer como si nada hubiera pasado.

-Eres una mala persona.- dijo Neville para levantarse y seguir a la chica.

Escuchó un llanto, hasta acabar en la parte este del castillo, cerca de la sala común de Ravenclaw.

-Tara?- le dijo el chico acercándose donde se encontraba esta, sentada abrazándose a ella misma.
-Neville, lo siento.- dijo intentando parar de llorar.

-No, está bien. Llorar, esta bien...- empezó a decir mientras se sentaba a su lado.- Sabes? La gente llora cuando no sabe expresarse con palabras...dicen que es bueno.

Tara lo miro y sonrió.
-Gracias por no reírte de mi.- dijo a lo que Neville asintió.- Tengo algo que decirte.

-Si?- preguntó el chico a lo que ella empezó a ponerse nerviosa.

-Te acuerdas cuando intentase besarme en enfermería y yo me aparté?- preguntó a lo que Neville asintió con algo de vergüenza.- Bien, pues ese ha sido mi mayor error que pude haber cometido.- dijo.

La chica rápidamente se acercó al chico y cortó el especio que había entre ellos en un torpe y tierno beso. Un beso que Neville no esperaba para nada pero que correspondió al instante.

Pensar en todas las veces que había soñado y pensado en ese momento...pensar en cómo sabrían sus labios y el tacto que tendrían sobre los suyos, ahora lo estaba comprobando.

Tara era la chica de la que siempre estaría enamorado. Simplemente era una emoción de alegría y felicidad que le producía al estar a su lado.

Cuando la chica se separó con miedo de la reacción del chico se encontró con la misma expresión de Neville, solo que esta era de shock.

-Me gustas.- dijo finalmente la chica.

Neville parpadeó varias veces para procesar toda la información que acababa de soltar Tara.
-Por favor que no sea un sueño.- dijo a lo que la
chica sonrió.

-No lo es.- dijo riendo.- Me gustas mucho Neville.

El corazón del chico ahora estaba solo para ella. Si le pedía que lo dejara todo lo haría y la seguiría a todos los lugares del mundo si se lo propusiera.
-T-tu...también.- dijo con lo ojos cerrados.- Me gustas.

Tara abrió los ojos algo sorprendida.
-Enserio?- preguntó sin poder creérselo.

Neville asintió y sonrió.
-Siempre he estado enamorado de ti.- dijo a lo que Tara se sonrojó.
-Y por que no me lo has dicho nunca?

-Pensaba que ya lo sabías...- admitió con algo de vergüenza.- Ademas, aún no me creo que alguien como tú...le guste alguien como yo.

-Alguien como yo?- repitió la chica.- Soy afortunada de tener los gustos que tengo.

Los dos rieron, y así pasaron toda la bóchame hablando sobre plantas, quidditch, sus padres... sin importar nada del otro, ni nadie.

Solo Tara y Neville.