Capítulo 25

666 56 50
                                    

"EL VIAJE DE ZUQUITA EN LAS DOS ERAS"

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

"EL VIAJE DE ZUQUITA EN LAS DOS ERAS"

Zuquita emprendió el viaje después de aquel engaño imaginario que tuvo con el malvado InuYasha.
No sería algo fácil encontrar a una humana que tuviese algún parecido con Kikyo, pues a ella no la recuerda con claridad, era tan sólo una niña cuando murió. No la conoció tanto, pero si escuchaba anécdotas de ella y del medio hermano del perro desgraciado de InuYasha.
Uniendo fuerzas para vencerlo, sin embargo no lo lograron, muchos aldeanos, soldados, monjes sacerdotisas y demonios han sufrido inmensas perdidas y temores siendo víctimas de las injusticias, la muerte, la tración, la sangre y el miedo.

Zuquita mucho tiempo vivió con esas emociones. Estaba cansada de ello, obtuvo una pequeña libertad y con eso se sentía feliz pero aún seguía atada a InuYasha de alguna manera, ella anhelaba ya no ser víctima de chantaje o de ser obligada a trabajar con alguien que detesta y la única manera de no ser su esclava es que InuYasha este muerto.

La única manera de escapar de vez en cuando era con el báculo de las eras, donde podía esconderse por unos días y vivir nuevas experiencias aunque fuesen temporales. Porque por mucho que ella quisiera estar en la era Reywa no podía porque alteraría el círculo del tiempo y del espacio.

Empezaría a buscar por sus alrededores, tal vez la chica era de aquí y por alguna extraña razón podía viajar al otro lado, o sino es que realmente es de allá y no de acá. Sería un largo y cansado viaje, pues es como intentar buscar a una aguja en un pajar. Sólo le quedaría seguir sus instintos o sino tendría que masacrar a toda mujer que tuviese parecido con Kikyo. Algo que no disfrutaría, porque dejó de hacer ese deporte desde hace tiempo.
Por fortuna tenía dinero para crear interrogatorios, y si eran leales a sus secretos chantajear y amenazar con la cantana.
Alguien debía saber algo por muy mínimo que pareciera le sería útil para encontrar a esa mujer.

No sería fácil pero debía hacerlo antes que InuYasha se desesperara del encargo y ella terminará muerta en lugar de aquella extraña chica.

Llego a la primera aldea y visito cada casa, y a cualquier chica que tenía algún rasgo similar a la sacerdotisa era asesinada de manera cruel y despiadada. Sólo atacaba a las mujeres, dejando a los esposos y los hijos mal heridos.
Salpicando su ropa de sangre o su rostro cada vez que lo hacía. Pedía perdón a buda por sus actos pero no encontraba la manera para obtener una libertad cien por cierto completa.

Se sentía cansada de oler sangre, pues llevaba todo el día haciéndolo es algo sofocante. Es un atardecer y decidió acampar para dormir un rato sin embargo los remordimientos no la dejan dormir, tal vez nunca concilie el descanso.

«¡Maldito InuYasha!», pensó algo frustrada. Siempre manda a otros a hacer sus juegos sucios cuando él no puede hacerlo. «Si pudiera matarte por mi cuenta, no dudaría en hacerlo». Sus pensamientos se hacen pesados y sombríos, provocando que eche a llorar como niña pequeña. Acurrucándose para esconder su vulnerabilidad. Le dolía el pecho de tanto llorar, casi llegando a la inanición. Nadie podría consolarla. Deseaba más que nunca un abrazo fuerte de su madre o alguien conocido y la dijera. "No es tu culpa Zuquita, sólo eres una víctima más de InuYasha". Pero no había nadie.
Sólo un dolor inmenso y un vacío en el corazón, roto por las circunstancias. Sería una tarde larga y tediosa, al parecer así serán hasta que encuentre el objetivo que tanto desea aquel híbrido.
Hasta en sus pocas horas de descanso era maldecída por pesadillas crueles. Un grito sofocante salió de su interior. Despertando con sudor en la frente, tenía miedo... Miedo de si misma, pero aún más miedo del suicido a pesar de ser samurai es un acto de honor conseguir la muerte por tus propias manos para así descansar eternamente. Se sentía que traiciona a su cultura, a sus creencias y a lo que ella es. Sin embargo continúa viviendo y tratará de resistir lo que más pudiera, y sino conseguir la muerte por un tercero que valiera lo suficientemente para destruir su sufrimiento. Ese podría ser Sesshomaru. Y ojalá que aquellas vidas que ha destruido la perdonen, aunque llevará una larga carga en el Inframundo.

💕💕💕💕💕💕💕💕💕💕💕💕💕💕

Es cortito el capítulo, pero espero les guste.
No se pierdan el primer capítulo de Edad Prohibida. Espero también les guste.

Tentación prohibidaWhere stories live. Discover now